La incertidumbre de los desplazados en Dnipro: "Los niños no quieren hablar por miedo"

• La violencia de la guerra ha dejado siete millones de desplazados internos en Ucrania
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Cuando se cumplen 59 días desde el inicio de la guerra, el goteo de desplazados internos es constante en toda Ucrania. Decenas de personas recalan cada día en el centro de refugiados de Dnipro, al sureste del país, en una situación desesperada en la que han dejado toda una vida atrás. La mayoría son mujeres y niños, ya que los hombres se han quedado combatiendo en los pueblos.

En Dnipro, las autoridades ucranianas inscriben a los desplazados en un registro y les asesoran sobre si quedarse o continuar camino. Hasta allí ha llegado Olga que ha recibido esta primera asistencia administrativa, vivía en Járkov, la segunda ciudad del país arrasada por los bombardeos, y cuenta que un misil destrozó el edificio contiguo a su casa y le obligó a huir con su marido y su madre en coche en apenas dos horas.

"Apenas cogimos algunos recuerdos y documentos. Tengo la esperanza de volver algún día a mi casa pero no se lo que me encontraré", explica a TVE.

La violencia de la guerra ha dejado siete millones de desplazados internos a los que se suman cinco millones que han tenido que huir del país como refugiados. Más de 137.000 han llegado a España.

La situación es "horrible, triste y terrorífica"

Una de las coordinadoras del centro de Dnipro asegura que la situación es "horrible, triste y terrorifica. Los niños no quieren hablar por miedo, las madres están bloqueadas", se lamenta. Han atendido a más de 20.000 personas con un drama a cuestas en una guerra cuyo fin no parece estar cerca.

El Gobierno de Moscú ha reconocido este viernes que sus objetivos en esta segunda fase de la guerra en Ucrania son tomar el control del Donbás -región histórica que incluye los óblast de Lugansk y Donetsk- y del sur del país y abrir un corredor terrestre que comunique Rusia con la península de Crimea.

Las fuerzas rusas han reanudado los ataques aéreos y están tratando de asaltar la acería de Azovstal, donde resisten las fuerzas ucranianas que quedan en la ciudad asediada de Mariúpol, según fuentes del Gobierno de Kiev.

"El enemigo está tratando de estrangular la resistencia final de los defensores de Mariúpol en la zona de Azovstal", ha asegurado este sábado el asesor presidencial ucraniano Oleksiy Arestovych en la televisión nacional.