De niñas de Chernóbil a refugiadas de la guerra de Ucrania
- Victoria y Lisa viajaron a España siendo niñas dentro de los programas de ayuda a las víctimas del accidente nuclear. Ahora vuelven huyendo de la invasión
- Muchas familias de acogida en España esperan cada día datos de sus hijos, que siguen en las zonas de conflicto
- Guerra Rusia - Ucrania, sigue la última hora en directo
Victoria Vorobey y Lisa Komenco son dos de las niñas de Chernóbil que venían a nuestro país para recuperarse de los efectos de la contaminación radioactiva que dejó el accidente nuclear ocurrido el 26 de abril de 1986. Hoy son refugiadas de guerra. "Antes venía de vacaciones y ahora..." y las lágrimas afloran en los ojos de Victoria recordando a su marido que se ha quedado en Ucrania. A Lisa también se le quiebra la voz al hablar de su pareja: "Han pasado casi 20 años desde el primer viaje que hice con cuatro años, cuando me decían que venía de vacaciones. Es tan distinto al de ahora con mi hija de dos años, con toda una vida recogida en una maleta y dos mochilas".
“Victoria: "Creía que la guerra no llegaría, me aferraba a esa idea"“
Victoria y Lisa tenían una vida normal. Si nunca imaginaron que regresarían a España como refugiadas de guerra, tampoco pensaron que la guerra sería algo más que una amenaza. "Creía que no llegaría, me aferraba a esa idea, pero no. El día 24, a las cuatro y media de la mañana se produjo la invasión rusa de Ucrania. Ese día era mi cumpleaños", nos cuenta Victoria. Lisa recuerda aquellos primeros días "como una pesadilla, eso no podía ocurrir".
Volver con la familia de acogida
Victoria ha vuelto a Valencia acompañada de su madre, su hermana y su hija. Ya esta con su segunda familia, Santiago Tajahuerce y Rosa Barranco. Y junto a sus padres de acogida, Antonio Edo y Amparo Muñoz se encuentra también Lisa y su hija de dos años. Son familias que forman parte de la 'Fundación valenciana Juntos por la Vida'.
“Daniel, padre de acogida: "Cuanto recibes un mensaje ya estas esperando al siguiente en el que te digan que estan bien"“
Daniel Sánchez pertenece a la 'asociación CHERNOBIL elkartea', y es padre de acogida de Katia, que permanece atrapada en una aldea que se encuentra a 30 kilómetros de la zona de exclusión que todavía existe alrededor de la central nuclear. Katia tiene 14 años y desde hace siete pasa los veranos y las navidades en Donostia. "Estoy muy preocupado por Katia y sus hermanos, a los que queremos traer en cuanto sea posible", nos cuenta Daniel, para quien la vida en las últimas semanas se reduce a una espera: "En cuanto recibes un mensaje ya estas esperando el siguiente en el que te digan que estan bien". Todos anhelan el fin de la invasión rusa.
Victoria y Lisa esperan volver a sus hogares en Irpin y Kiev.
Los recuerdos de Chernóbil
Svitlana Volochai es maestra, vive en España desde hace un año, pero a los doce residía en Orane, una de las aldeas próximas a la planta nuclear de Chernóbil. La invasión rusa le ha hecho revivir, 36 años depués, la tragedia de la que fue víctima y testigo: "Recuerdo el miedo de la gente, la incertidumbre sobre lo que pasaría, el dolor, la devastación y las imagenes de las evacuaciones de mujeres y niños en autobuses, buscando zonas seguras, como ahora".