Puigdemont, indignado por el espionaje de Pegasus: "Iros a la mierda todos los que habéis violado nuestras vidas"
- El expresidente de la Generalitat cree que "el diálogo con el Estado en estas condiciones no es posible"
- Considera que el que haya sido avalado por un juez no lo convierte "en legal"
El expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont ha mostrado este viernes su indignación después de que la directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Paz Esteban, confirmara en la Comisión de Gastos Reservados del Congreso (conocida como Comisión de Secretos Oficiales) el espionaje a independentistas a través del sistema Pegasus con aval judicial: "Iros a la mierda todos los que habéis violado nuestras vidas y las de nuestras familias".
La directora del CNI mostró la autorización judicial del Tribunal Supremo para espiar a 18 dirigentes independentistas, entre ellos al actual presidente catalán, Pere Aragonès, y a dos personas del entorno de Puigdemont. Sin embargo, se desvinculó del resto de escuchas, más de 60, que publicó 'The New Yorker'.
"Miserables quienes lo hacéis y quienes lo justificáis", ha exclamado en su cuenta en Twitter, donde ha advertido de que el diálogo con el Estado en estas condiciones no es posible.
A su juicio, el independentismo catalán no se puede "sentar nunca más en ninguna mesa con esta gente" hasta que haya que "decidir los términos de la separación".
Compara el espionaje con el caso de los GAL
En otro tuit, Puigdemont ha comparado el espionaje a separatistas con el caso de los GAL y ha advertido de que esta manera de actuar, aunque esté autorizada por un juez, no se convierte en "legal, ni amparada por la ley".
"Para que se entienda mejor: un juez que autorizase una acción de los GAL no convertía esta acción en legal ni amparada por la ley. Convertía al juez en cómplice de un acto criminal", ha denunciado Puigdemont, que asimismo se ha hecho eco de un tuit del exvicepresidente de Òmnium Cultural Marcel Mauri, en el que también mandaba "a la mierda" a quienes "espían, lo avalan o lo permiten".
A su juicio, por todo esto, "España es un Estado carcomido por todas partes", por lo que ha considerado que "es una amenaza a la libertad".