Al menos 22 muertos y más de 60 heridos tras una fuerte explosión en un céntrico hotel de La Habana

• El presidente cubano, que ha visitado el lugar del siniestro, ha subrayado que se trató de un "lamentable accidente"
• La tesis más probable es que la explosión se debiese a un escape de gas

Al menos ocho muertos y una treintena de heridos tras una fuerte explosión en un céntrico hotel de La Habana

Una fuerte explosión ha afectado este viernes gravemente al hotel Saratoga de La Habana y ha provocado al menos 22 muertos - entre ellos un menor y una embarazada - y más de 60 heridos según el gobierno cubano.

El ministro cubano de Turismo, Juan Carlos García Granda, ha afirmado que no hay extranjeros entre los heridos.

La causa podría ser un escape de gas

El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, que ha visitado el lugar del siniestro, ha subrayado que se trató de un "lamentable accidente" y ha descartado totalmente que fuese una "bomba" o un "atentado".

El suceso se produjo minutos antes de las 11 de la mañana, cuando un camión cisterna de gas licuado servía un depósito del hotel.

La tesis más probable es que la explosión se debiese a un escape.

La explosión hizo que colapsase una sección del edificio -de siete alturas- y que se desprendiese la fachada de los tres primeros pisos, provocando una lluvia de toneladas de escombro sobre la acera.

El camión cisterna quedó parcialmente sepultado.

La explosión provocó una gran columna de humo blanco, que fue visible en gran parte de la capital.

Considerado uno de los más lujosos de la ciudad

Al lugar de los hechos acudieron rápidamente bomberos, agentes de policía y equipos de emergencias, que trasladaron a los afectados a varios centros hospitalarios cercanos.

El Saratoga se encuentra en un edificio de estilo neoclásico construido en 1880 y que desde 1933 funcionaba como un hotel. Su última restauración tuvo lugar en 2005, según medios oficiales. Con cinco estrellas, el hotel estaba considerado uno de los más lujosos de la ciudad.

El establecimiento se encuentra en pleno Paseo del Prado, una de las principales avenidas de la Habana Vieja, en el centro histórico de la capital cubana. No estaba abierto al público - estaba poniéndose a punto para reabrir sus puertas- , pero en su interior había varios empleados.