La gasolina marca un nuevo récord sin aplicar el descuento y el gasóleo cae por segunda semana consecutiva
- La gasolina sube más de cuatro céntimos y se sitúa en 1,94 euros sin el descuento, 1,74 euros una vez aplicado
- La ministra de Transportes ha abierto la puerta a prorrogar la rebaja de 20 céntimos a los carburantes "si es necesario"
- Sigue la última hora del conflicto entre Rusia y Ucrania en directo
El precio de la gasolina ha vuelto a subir por quinta semana consecutiva y se acerca cada vez más a su máximo histórico a pesar del descuento de 20 céntimos por litro aprobado por el Gobierno, mientras que el gasóleo mantiene su tendencia a la baja tras caer por segunda semana consecutiva.
Este jueves, la gasolina de 95 se vende de media a 1,74 euros el litro, mientras que el diésel tiene un precio de 1,667 euros. Estos son sus precios una vez aplicado el descuento de 20 céntimos por litro de carburante aprobado por el Gobierno.
De este modo, la gasolina sube más de cuatro céntimos con respecto a la semana anterior y, si se excluye el descuento, marca un nuevo récord, 1,94 euros. Por otro lado, el gasóleo alcanza su tercer precio más alto de la historia, 1,867 euros, dos céntimos menos que el pasado jueves.
El coste de la gasolina, que también supera al gasóleo por segunda semana consecutiva, sube así un 2,5% respecto a la semana anterior, mientras que el gasóleo es un 1,2% más barato.
En este escenario, los usuarios siguen buscando las estaciones de repostaje más baratas para llenar el depósito.
La tendencia alcista del precio de gasolina y diésel impacta de forma directa en el bolsillo de los usuarios. Con la rebaja "consigues ahorrar un poco, pero no es sufiiciente", explican los conductores, de modo que los últimos incrementos en el precio del combustible han ido restando efecto a la ayuda del Ejecutivo, según los usuarios. De esta manera, el precio de la gasolina esta semana con el descuento, 1,74 euros el litro, es 12 céntimos superior al que marcaba en la priemra semana de abril, 1,613, cuando se comenzó a aplicar esta bonificación. Así, las subidas de las últimas semanas "se han comido" gran parte del efecto de esta ayuda del Gobierno, algo que critican los consumidores.
Llenar el depósito cuesta hasta 17 euros más que en enero
La escalada de ambos carburantes ha provocado que el precio de la gasolina haya aumentado un 18% desde que comenzó el año, frente al 24% que se ha encarecido el gasóleo.
Con los precios actuales, llenar un depósito medio de 55 litros con gasolina cuesta actualmente 96 euros, mientras que con gasóleo supera los 91 euros, lo que supone pagar cerca de 15 euros más que a principios de 2022 si se utiliza gasolina, y 17 euros si se elige gasóleo. Gracias a la bonificación del Gobierno, los consumidores se ahorran cerca de 11 euros al llenar un depósito de este tipo, tanto si emplean gasolina como si optan por gasóleo.
En comparación con la misma semana de 2021, la gasolina cuesta ahora un 29% más, frente al 38% que ha subido el gasóleo; mientras que si se analizan los precios de la misma semana de 2019, antes de que estallara la pandemia, la gasolina es un 29% más cara y el gasóleo un 32%.
A pesar de los valores históricamente elevados, el precio de ambos carburantes en España se mantiene por debajo de la media europea, que, según la estadística de la UE, se sitúa en 1,981 euros el litro para la gasolina y 1,856 euros para el gasóleo. Esto se debe a que España, a pesar del IVA, a los mayores impuestos y a los gravámenes al biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal, en general, que la media comunitaria.
No obstante, el precio del gasoil en España es superior al de la media de la UE, que es de 1,856 euros, aunque está por debajo de la de la zona euro, con un precio de 1,896 euros.
El Gobierno estudia una posible prórroga del descuento "si es necesario"
El 1 de abril, el Gobierno aprobó la rebaja de 20 céntimos al litro de combustible -15 céntimos asumidos por el Estado y 5 por las gasolineras-, una medida dirigida a todos los conductores, que se benefician en el momento del pago en las estaciones y que pueden ver reflejado en el ticket. La medida, dentro del Plan Nacional para paliar los daños económicos de la guerra de Ucrania, estará vigente, en principio, hasta el 30 de junio.
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha abierto la puerta a prorrogar la bonificación de 20 céntimos por libro de combustible que vence el próximo 30 de junio "si es necesario", aunque ha señalado que aún se encuentra "monitorizando" la situación. Esto va en la línea de lo avanzado por la ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, que también abrió la puerta a mediados de mayo, en un Consejo de Ministros extraordinario, a un sistema que tenga en cuenta la renta de los consumidores, para "proteger a los consumidores domésticos y profesionales que más lo necesitan".
Por otro lado, la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, defendió este martes en el Senado la imposibilidad de rebajar el IVA de los combustibles, actualmente en el 21%, porque no lo permite el reglamento de este impuesto. Además, explicó que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) "ya ha dicho que, evidentemente, la rebaja de la bonificación no ha sido (...) engullida por las estaciones de servicio".
En este escenario, las gasolineras siguen quejándose de la "mala aplicación" de esta bonificación, que está provocando falta de liquidez en las estaciones y un riesgo de cierre en las más pequeñas. Las grandes patronales niegan que se estén quedando con los beneficios y, en esa línea, apuntan al papel de las grandes petroleras.
Beneficios de las grandes refinadoras
Con la guerra de Ucrania, las grandes petroleras han disparado sus beneficios en plena escalada de los precios de la energía. Así, entre enero y marzo, la británica Shell obtuvo unas ganancias de más de 8.600 millones, y BP, de 5.900 millones. Sin embargo, el caso más llamativo es el del gigante saudí Aramco, que obtuvo casi 38.000 millones de euros. En nuestro país, Repsol también ha visto subir sus beneficios hasta superar los 1.000 millones de euros.
Esto se debe a que hay un aumento de la demanda mientras que, sin embargo, la oferta de las refinerías no aumenta. “Hay una subida muy fuerte de la demanda de productos derivados del petróleo y, por otro lado, la capacidad de refino no sube. Cuando tenemos este incremento de la demanda y una oferta bloqueada, evidentemente los márgenes suben, los precios suben y los beneficios de las petroleras se disparan”, ha explicado a RNE Massimo Maoret, profesor del IESE Business School.
Alza del petróleo
Estos precios se registran en un entorno de alzas constantes del crudo en el actual contexto marcado por la invasión rusa de Ucrania. Así, el barril de Brent, de referencia en Europa, cotizaba en la mañana de este jueves en torno a los 114,5 dólares, mientras que el Texas americano se intercambiaba a casi 111 dólares.
Cabe recordar que el precio de los carburantes depende de varios factores, como su cotización específica (independiente de la del petróleo), la evolución del crudo, los impuestos, el coste de la materia prima y de la logística y los márgenes brutos. Por tanto, la evolución en la cotización del crudo no se traslada directamente a los precios de la gasolina, sino que lo hace con un decalaje temporal.