El PSOE consigue sacar adelante la polémica ley audiovisual con la abstención de Unidas Podemos y el PP
- Es la primera vez que los socios de Gobierno votan diferente en la aprobación de una norma
- Las productoras independientes consideran que esta medida será su fin
El PSOE ha conseguido sacar adelante la ley audiovisual gracias a la abstención del PP y de Unidas Podemos. Es la primera vez que los socios de Gobierno votan diferente en la aprobación de una norma, después de que el partido se mostrara crítico con los socialistas porque la iniciativa "no protege" a la producción independiente.
El texto, que será remitido ahora al Senado para continuar con su trámite parlamentario, ha salido adelante gracias a la abstención de PP, Ciudadanos y Unidas Podemos -incluidos los miembros del Gobierno Yolanda Díaz, Irene Montero Ione Belarra y Alberto Garzón-, y los votos a favor del PSOE, PNV, Nueva Canarias (NC) y Coalición Canaria. En cambio, han votado en contra Navarra Suma, CUP, Bildu, ERC, BNG, Compromís, Junts per Cataluña, PDeCAT y VOX.
A pesar de la abstención de su grupo, la portavoz adjunta de Unidas Podemos, Sofía Fernández Castañón, ha reconocido que "esta ley no protege la producción independiente" y ha puesto de relieve que es "dañino para el sector". "Tenemos menos diversidad para un tejido audiovisual que ha demostrado mucho, del que tendríamos que estar muy orgullosas", ha asegurado.
La medida no ha estado exenta de polémica y ha puesto en pie de guerra a las productoras independientes que consideran que esta nueva ley será su sentencia de muerte.
En la votación de las distintas enmiendas que quedaban aún vivas, el Pleno del Congreso ha rechazado la enmienda transaccional pactada por el Grupo Confederal de Unidas Podemos, ERC y Bildu para modificar de nuevo la definición de productor independiente de la ley, lo que ha motivado el voto en contra a la ley de los independentistas. Las asociaciones de productores de cine y audiovisual habían pedido a los distintos grupos políticos que votaran "en conciencia" y rechazaran el texto, tras incluir una enmienda del PSOE de consecuencias "devastadoras" para el sector.
La enmienda de los socios de Gobierno del PSOE venía a revertir la modificación técnica con la que los socialistas permiten a las televisiones, o a cualquier otro operador, producir contenidos dentro de la cuota obligatoria reservada hasta ahora a la producción independiente. Con ese cambio de palabra, aparentemente inocuo (“dicho” por “un”), los productores se habrían dado por satisfechos al mantener en sus actuales términos la obligación legal que tienen las TV de invertir un 5 % de sus ingresos en la producción independiente.
Según las asociaciones que representan a todos los productores de España, el rechazo de esta enmienda impedirá la necesaria protección de la diversidad cultural y no garantizará la renovación generacional de creativos, técnicos y actores que plantea la directiva europea y que traspone esta ley, al convertir en productores independientes a los que, "por naturaleza, no lo son".
ERC, Bildu y BNG, en contra de la medida
La polémica enmienda de los socialistas ha provocado el reproche de muchos portavoces durante el debate de la norma, entre ellos, sus socios de investidura como ERC, que ha anunciado su voto en contra porque los socialista han "dinamitado" el pacto que habían alcanzado.
Los independentistas catalanes no han sido los únicos críticos con el PSOE por "la inclusión por la puerta trasera del adjetivo demostrativo 'dicho'", que, según Bildu, ha venido a "desvirtuar aún más la extraña ya definición del productor independiente que contemplaba el texto en origen y vino a vaciar de contenido totalmente esta definición".
A ellos se ha sumado el BNG porque "no garantiza la presencia del gallego". Durante el debate del proyecto de ley en la Cámara baja, Rego ha criticado que el resultado final del texto legislativo "no está a la altura de lo esperado" para la organización nacionalista ni para los diversos sectores de la sociedad.
La parlamentario de Junts per Catalunya (JxCAT) Pilar Calvo Gómez (JxCat), que también ha votado en contra como el PDeCAT, ha apuntado que la nueva norma supone "un revés al sector audiovisual y un grave retroceso para todas las lenguas cooficiales del Estado". "Ni siquiera sirve a su cometido inicial porque no aplica correctamente la Directiva europea que obliga a los Estados miembros de la Unión Europea a promover la diversidad cultural y lingüística en sus territorios", ha afirmado.
"Una mayor concentración de la industria en torno al duopolio actual"
Las productoras independientes sostienen que "esta modificación impulsa una mayor concentración de la industria, en torno al duopolio actual (Grupo Atresmedia y Mediaset España) y las grandes plataformas multinacionales y, se aleja de la visión europea que pretende garantizar la diversidad cultural, promoviendo la existencia de un tejido empresarial independiente, regulando el ecosistema del audiovisual".
Más de 350 creadores y trabajadores del cine y la televisión, entre ellos Pedro Almodóvar, Paco León, Icíar Bollaín o Antonio Resines, firmaron ayer un manifiesto de apoyo a las asociaciones de productores.
El manifiesto cuenta también con las firmas de Álex de la Iglesia, Gerardo Herrero, Maribel Verdú, Elvira Lindo, Jorge Guerricaechevarría, Carolina Bang, Carla Simon, Clara Roquet, Daniel Monzón, Jonás y David Trueba, Isaki Lacuesta, Gerardo Herrero, Isabel Coixet, Javier Fesser, Antonio De La Torre, Leticia Dolera, Santiago Segura, Paz Vega, Benito Zambrano, Fernando Colomo, Agustín Almodóvar o Eduardo Casanova.