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El juez procesa a una filial de Iberdrola por encarecer la luz más de un 26 % en 2013

  • Acusa a la eléctrica de limitar la producción de las centrales hidráulicas del Duero, Sil y Tajo
  • Las acciones de Iberdrola supusieron un perjuicio para la demanda de 105 millones de euros

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Presa en el Duero
Presa en el Duero.

El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha acordado procesar a Iberdrola Generación, filial de la multinacional española Iberdrola, en el marco de la investigación por el supuesto encarecimiento artificial del precio de la luz en un 26,5 % durante el invierno de 2013.

En el auto, fechado el pasado 26 de mayo, el titular del juzgado central de Instrucción número 2 también acuerda proseguir la causa respecto a cuatro personas físicas, que ocupaban distintos cargos de responsabilidad dentro de la compañía en el momento de los hechos.

En concreto, se trata de los directivos Ángel Chiarri Toscano, director de Gestión de la Energía, Gregorio Relaño Cobián, responsable de Optimización, Gestión de Recursos y Trading, José Luis Rapún Jiménez, responsable de Gestión de Activos, y Javier Paradinas Zorrilla, responsable de Mercados a Corto Plazo y Generación Global.

El magistrado les investiga por vulnerar el artículo 281 del Código Penal que protege a los consumidores de "alteraciones de precios" y contempla una pena de prisión de uno a cinco años y multa de doce a 24 meses. Además, por el artículo 288 podrían afrontar una multa de dos a cinco años, o del triple al quíntuple del beneficio obtenido.

Según explica el magistrado, la decisión se produce después del último informe de la Fiscalía Anticorrupción, que considera que, tras las "numerosas diligencias", se ha acreditado "indiciariamente" el "artificial incremento del precio de la energía eléctrica que vendía Iberdrola" en noviembre y diciembre de 2013.

Un perjuicio de 105 millones de euros

El juez, en sus diligencias previas, indica que Iberdrola provocó la reducción de producción de las centrales hidráulicas de los ríos Duero, Sil y Tajo. La consecuencia fue la subida del precio de la energía eléctrica en, aproximadamente, 7 euros megavatio/hora.

El auto estima que el perjuicio alcanzó los 105 millones de euros, teniendo en cuenta que la demanda en el período de 30 de noviembre de 2013 y hasta el 23 de diciembre de 2013 fue de 15.000 GWh.

Por estos mismos hechos, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) impuso una sanción de 25 millones de euros a Iberdrola Generación por la manipulación del precio de la energía eléctrica, considerada como una conducta muy grave.

Competencia señalaba que la manipulación se desarrolló en un contexto en que el mercado se situaba "ya de por sí en precios altos y en un escenario de elevada demanda". Así, Iberdrola, "consciente de la existencia de un escenario de elevada demanda al que corresponde el mes de diciembre, decide retirar una capacidad de producción para provocar un incremento adicional en el precio del mercado".

El regulador estimó que el beneficio propio para la eléctrica fue de unos 21,5 millones.