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Guerra en Ucrania

Los mapas de los 100 días de guerra en Ucrania: del fracaso en Kiev a la batalla del Donbás

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Cien días de guerra en Ucrania
Cien días de invasión rusa en Ucrania

La guerra de Ucrania ha cumplido este viernes 100 días centrada en la toma de Severodonetsk, una ciudad industrial clave para el control de la región separatista prorrusa de Lugansk, al este del país. Lo que empezó en la madrugada del 24 de febrero con la intención de ser una “guerra relámpago” –que buscaba, según los análisis iniciales, la caída rápida de Kiev con la rendición del Gobierno de Zelenski y una anexión de Lugansk y Donetsk parecida a la de Crimea en 2014– se ha convertido en una encarnizada batalla por el control de estas dos regiones que conforman el Donbás. En la zona, que ya vivía un conflicto armado desde hace ocho años, continúa un avance ruso muy lento pero constante, con un elevado coste para el ejército de Putin.

Tras estos más de tres meses, Rusia controla el 20% del territorio de Ucrania y los combates se libran a lo largo de más de mil kilómetros de frente, según explicó este mismo jueves el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. Además, al menos 4,7 millones de refugiados han huido de la guerra y se encuentran en otros países, mientras que otros ocho millones de ucranianos se han convertido en desplazados internos.


En DatosRTVE repasamos los mapas de la guerra de estos 100 primeros días a través de cuatro ciudades clave: la capital, Kiev, escenario de una exitosa contraofensiva ucraniana que obligó a Rusia a retirarse a principios de abril; Mariúpol, la ciudad portuaria del Mar de Azov tomada finalmente por Moscú tras casi tres meses de asedio que la han dejado reducida a escombros; Járkov, la segunda ciudad más importante del país y telón de fondo de otra contraofensiva reciente; y la ciudad industrial de Severodonetsk, al este del país, que Rusia controla ya en su mayor parte.

1. Kiev: del cerco ruso a la contraofensiva ucraniana

Rusia intentó desde el principio de la invasión rodear la ciudad de Kiev. El cercano aeródromo de Hostomel fue objetivo de los bombardeos desde el primer día de la invasión. Las tropas de Putin llegaron a las puertas de la capital tomando el control de Irpin y Bucha, en el oeste, y del suburbio de Brovary, al este; y sometieron a su población a intensos bombardeos. Pero fueron incapaces de completar el asedio.

Cuando preparaban un cambio de estrategia cavando trincheras para redoblar los ataques con artillería pesada sobre Kiev al constatar que tomar la ciudad no iba a ser posible, las tropas rusas fueron sorprendidas por un contraataque ucraniano. A punto de cumplir un mes de guerra y en menos de dos semanas, las fuerzas rusas tuvieron que retirarse completamente de la región de Kiev hacia Bielorrusia. A los pocos días, abandonaron también sus posiciones en Chernígov (al norte) y Sumy (al noreste).


La retirada rusa de localidades como Bucha -convertida en uno de los símbolos del horror de este conflicto bélico- puso al descubierto masacres indiscriminadas de soldados y civiles que podrían constituir crímenes de guerra de Rusia.

2. La victoria rusa sobre Mariúpol y los últimos de Azovstal

Convertida también en símbolo del peor conflicto bélico en suelo europeo desde la Segunda Guerra Mundial, la ciudad portuaria de Mariúpol ha sido escenario de una de las principales batallas de la guerra de Ucrania. Esta localidad clave de la región de Donetsk para el control del mar de Azov y donde vivían antes de la invasión rusa más de 300.000 personas, ha sido sometida durante cerca de tres meses a un brutal asedio hasta su rendición final.

La captura de Mariúpol ha permitido a Rusia unir la zona separatista del Donbás, que está bajo su control, con el norte de la península de Crimea, anexionada por Moscú en 2014.


Desde las primeras semanas de la guerra, Moscú aplicó una estrategia de desgaste destruyendo deliberadamente infraestructura civil crítica y áreas residenciales dejando a su población sin agua, luz y calefacción y sin apenas comida para forzar su rendición, como ha detallado en sus informes el Instituto para el Estudio de la Guerra.

Después de que el Ejército ruso alcanzara el centro de la ciudad y se hiciera con el control del puerto, los últimos combatientes ucranianos resistieron casi un mes en la acería de Azovstal hasta rendirse finalmente el 17 de mayo. En las instalaciones, convertidas en símbolo de la resistencia, se refugiaron hasta su evacuación centenares de civiles.

Las autoridades locales ucranianas estiman que el 90% de la ciudad ha sido destruida, el 40% de los edificios, sin posibilidad de reconstrucción. Ucrania cifra, además, en decenas de miles los muertos civiles, aunque la cifra no está contrastada. La ONU, por el momento, solo informa de más de 4.000 fallecidos en todo el país que haya podido confirmar. Algunos de los civiles asesinados en Mariúpol son los que se refugiaban en el Drama Teatro cuando el 16 de abril fue bombardeado.

3. Járkov: de los intensos bombardeos a una contraofensiva aún en marcha

La segunda ciudad más importante de Ucrania, Járkov, al noreste del país, se convirtió al igual que Kiev en uno de los objetivos prioritarios de Rusia desde los primeros días de la invasión. La población, donde vivían más de 400.000 personas, fue sometida desde el principio a incesantes bombardeos, aunque Moscú tampoco logró rodearla completamente.

A mediados de abril, Ucrania lanzó varios contraataques en Járkov que han logrado empujar a las tropas de Putin prácticamente hasta la frontera con la región rusa de Belgorod. Moscú, sin embargo, aún conserva capacidad para atacar con artillería pesada la ciudad de Járkov al mantener posiciones a menos de 25 kilómetros de la ciudad. Bombardea también intensamente ciudades fronterizas para evitar que Ucrania avance y logre expulsarlos definitivamente como hizo en Kiev.


4. Severodonetsk, objetivo actual de la batalla del Donbás

La batalla del Donbás por el control de las regiones de Donetsk y Lugansk se ha centrado en los últimos días en el asalto a la ciudad de Severodonetsk, donde antes de la invasión vivían algo más de 100.000 personas. Moscú controla ya la mayor parte de la ciudad, sometida en las últimas semanas a intensos bombardeos.

La localidad, que fue fundada en 1934 como un suburbio de Lysychansk -su ciudad gemela al otro lado del río Donets- para albergar a los trabajadores de la planta química de Azot, es clave para controlar toda la región de Lugansk. Rusia ha logrado en los últimos días avances constantes por la concentración de sus fuerzas y de la artillería en esta zona, según los informes de la inteligencia británica.


El ISW, por su parte, cree que la relativa rapidez de este avance se debe a la retirada de las tropas ucranianas de la ciudad para centrarse en mantener la contraofensiva de Járkov o frenar el avance en Izyum, desde donde Moscú está intentando infructuosamente avanzar hacia Sloviansk, otra ciudad clave de la región de Donetsk. “Logros más importantes” -a juicio del think tank estadounidense- que la defensa de la propia Severodonetsk, por “doloroso” que pueda resultar”.

Londres subraya que para controlar el Donbás no bastará, sin embargo, con hacer caer a esta ciudad, sino que Moscú deberá capturar también Kramatorsk y la carretera principal que une las localidades de Dnipro y Donetsk. Para ello tendrá que cruzar en algún momento el río Donets. A principios de mayo, un intento fallido de pasar a la otra orilla mediante un puente flotante acabó con importantes pérdidas para Rusia.

El frente sur: Jersón, el control del Mar Negro y la 'perla' de Odesa

En el sur de Ucrania, Rusia consiguió un rápido avance en las primeras semanas desde Crimea. Moscú logró hacerse con el control de Jersón, una ciudad de 300.000 habitantes, en los primeros días de la contienda. Actualmente, la región del mismo nombre está siendo escenario de contraataques ucranianos aprovechando el foco de Moscú en Severodonetsk.

Jersón es un "terreno crítico" porque es la única zona de Ucrania que Rusia controla al oeste del río Dniéper, según el Instituto para el Estudio de la Guerra. Mantener esta zona controlada es clave si Rusia pretende avanzar hacia Odesa, la "perla" del Mar Negro. La tercera ciudad de Ucrania ha sido bombardeada en varias ocasiones en estos 100 días, pero no ha sufrido aún ninguna ofensiva terrestre ni anfibia.

Sin embargo, el control ucraniano sobre Odesa no ha impedido que Moscú tenga de facto el control del Mar Negro y mantiene bloqueado el comercio internacional.