Por qué estas comparaciones sobre la facilidad de la EBAU en Andalucía son engañosas

• Envíanos consultas al 659 800 555 o a [e-mail]
• Suscríbete a nuestros desmentidos por RSS y practica con la Caja básica de herramientas

Mensajes de redes sociales sobre la EBAU 2022 en Andalucía y Madrid

El examen de Historia de la prueba EBAU en Andalucía ha suscitado críticas en redes por su presunta facilidad. Cada año se producen estas comparaciones entre comunidades autónomas y surgen acusaciones de desigualdad por parte de los estudiantes que se enfrentan a las pruebas más difíciles, pero te explicamos por qué comparar directamente exámenes puede ser engañoso.

“El examen [de Historia de España] es una vergüenza porque no tiene ni el nivel de la ESO”, expone un mensaje de un hilo de Twitter que se ha hecho viral y gira en torno a la prueba EBAU 2022 en Andalucía. En 2020 se comparaba el examen andaluz con el madrileño y en 2021 se hablaba de andaluces sesteando tras robar plazas en Madrid.

Ambas pruebas no pueden compararse de manera directa porque el plan de estudios de Bachillerato es distinto. En la comunidad autónoma madrileña la clase de Historia de España comprende cuatro horas lectivas semanales y en Andalucía tres horas, tal y como explica, respondiendo a las críticas, una usuaria que se presenta como profesora y cuyo hilo también se ha hecho viral.

Desde VerificaRTVE hemos comprobado que efectivamente existe una profesora con el mismo nombre y apellidos que trabaja como docente de Historia en un instituto de Sevilla. Hemos corroborado las horas lectivas dedicadas a Historia de España en estas dos comunidades autónomas consultando los sitios web de Educación de la Comunidad de Madrid y de la Junta de Andalucía.

Horas lectivas semanales de Historia de España en 2º de Bachillerato en Madrid y Andalucía. Fuente: Comunidad de Madrid y Junta de Andalucía. VerificaRTVE

En cuanto a la idea de que estudiantes de Andalucía roban plazas a alumnos de la comunidad autónoma madrileña, el informe sobre el Sistema Universitario Español del Ministerio de Educación señala que en el curso 2020-2021 solo el 4% de los estudiantes que hicieron la EBAU en Andalucía se matricularon en universidades de Madrid (pág. 31), un argumento que también utiliza la tuitera docente. Según ese mismo documento, Andalucía es de hecho la cuarta comunidad que menos estudiantes universitarios envía al exterior, con el 89,1% de sus alumnos quedándose en sus centros (pág. 30). El ranking lo encabezan Cataluña, que tiene al 98,3% de los estudiantes matriculados en sus universidades; Madrid, con un 94,9%; y Valencia, con un 90,3%.

Las estadísticas sí reflejan que los alumnos andaluces registran desde 2019 un mayor porcentaje de sobresalientes en Historia de España que los madrileños, como puedes ver en la tabla inferior, con datos del Sistema Integrado de Información Universitaria (SIIU). En este caso, la usuaria profesora sostiene que los resultados demuestran que Madrid saca mejores calificaciones pero se apoya en datos desactualizados. Pero tomando la EBAU con carácter general, los jóvenes andaluces no aprueban más. Según los datos de 2021 del SIIU, Euskadi es la comunidad con mayor porcentaje de aprobados en este proceso de examinación (97%) y Murcia y Asturias tienen la mayor proporción de sobresalientes, ambas con un 12,9% (pág.3). Andalucía se sitúa entre las comunidades con menor proporción de aprobados, con un 91,5%.

Porcentaje de sobresalientes en el examen de selectividad de Historia de España desde 2017 hasta 2021. Fuente: Sistema Integrado de Información Universitaria. VerificaRTVE

Sistema descentralizado, críticas frecuentes

La desigualdad en pruebas EBAU se comenta cada año en redes sociales. El sistema educativo español es descentralizado y eso supone que en distintas comunidades autónomas puedan existir planes de estudio, temarios y número de horas de clase diferentes. Algunas organizaciones educativas llevan tiempo criticando esta situación, como te hemos explicado en RTVE.es.

Los alumnos no compiten en igualdad estricta de condiciones y eso abre la puerta a la interpretación y a los estereotipos sobre lugares más y menos fáciles para examinarse. Sin embargo, precisamente por esa multiplicidad de situaciones de partida, establecer comparaciones directas entre exámenes es engañoso y tampoco sostiene por sí mismo acusaciones de estudiantes que “roban” plazas a los de otras comunidades.