En el hospital y sin aire acondicionado: "Con el calor, el colchón se me pega al cuerpo"
- Las altas temperaturas influyen sobre todo a personas con enfermedades crónicas
- Esta situación también está afectando a algunos enfermos ingresados en hospitales que no tienen aire acondicionado
En plena ola de calor aumentan las visitas a los hospitales y centros de salud de todo el país. Los principales afectados por síncopes son las personas mayores de 75 años, que padecen enfermedades como la hipertensión, problemas del corazón o respiratorios.
Permanecer en casa durante las horas de mayor temperatura, beber agua y evitar el esfuerzo físico son algunas de las recomendaciones de los expertos para evitar golpes de calor y acabar en el hospital. Algunos de ellos, en ocasiones sin tener aire acondicionado o ventiladores, lo que dificulta la recuperación del paciente.
"Con el calor el colchón del hospital se me pega al cuerpo"
Este calor está empeorando la situación de los ingresados en algunos hospitales. Es el caso de María José, que lleva 20 días ingresada en el Hospital Maternal del Virgen del Rocío de Sevilla sin aire acondicionado. "Llevo días ingresada y no funciona el aire", asegura.
María José está operada de una histerectomía, denunció, a través de las redes sociales, dice, las condiciones en las que estaban los pacientes oncológicos de su planta: "Según lo que nos dice el hospital es que son cortes puntuales, cosa que no es cierta porque no he tenido aire ningún día", relata.
En plena ola de calor y con 40 grados en Sevilla se enfrenta además a otros problemas causados por esa falta de aire: "Los colchones son de plástico, porque tienen que lavar a los enfermos, pero con el calor se nos pegan al cuerpo", afirma María José.
Ante la situación, la mujer dice que ha tenido que tomar medidas: "Nos hemos tenido que traer ventiladores de casa y subirlos a escondidas porque dicen que pueden provocar un incendio", explica la mujer.
Por otro lado, Maria José afirma que el personal sanitario no tiene la culpa, que es problema del hospital y les anima a unirse a sus protestas: "Esto es infernal, aquí no se puede descansar, no se puede dormir".
"A finales de este mes debería estar todo arreglado"
La versión del hospital es diferente, dicen que están renovando los aires acondicionados y que no es que no les funcionen, sino que en algunas zonas hay cortes. Aseguran que lo están intentando solucionar con equipos portátiles.
Explican que hace dos meses empezaron unas obras y que prevén que las terminen en un mes. Reconocen la falta de aire acondicionado pero no en todo el hospital. También empezaron a colocar, dicen, láminas que reflejan los rayos del sol para que no entre la luz.
Además, en la sexta planta no hay nadie ingresado porque es en la que más calor hace. También se han vaciado algunas plantas donde se sabe de años anteriores que el sol pega más y se ha trasladado a los pacientes a zonas más frescas. "A finales de este mes debería estar todo arreglado", asegura el personal del hospital.
"A los pacientes les ha pillado el calor con antelación"
En los centros sanitarios de las zonas rurales han aumentado las visitas a causa de los golpes de calor. Rafael Micó es médico de atención primaria en Fontanars del Alforins, un pueblo de Valencia: "Llevamos con mayor volumen de pacientes en los centros desde principios de junio. No es un año normal y a los pacientes les ha pillado el calor con antelación", explica en 'La Hora de la 1'.
Además, recomienda acudir al centro de salud cuando el golpe de calor sea evidente y se padezca una enfermedad crónica: "Las personas con un proceso crónico notan más el calor, sufren como 'presíncopes'. Vienen y consultan, después les haces una exploración básica y se quedan tranquilos. Nuestro hipotálamo va adelantado con este calor. Necesita un tiempo para adaptar estas temperaturas. Los más frágiles necesitan nuestra atención", afirma Micó.
Normalmente, las personas necesitan varias semanas para acostumbrarse al calor extremo: "Habitualmente necesitamos un par de semanas para acoplarnos al calor. Yo trabajo como médico rural y la gente iba a su campo a trabajar, pero les ha pillado que a las 11 de la mañana no hace la temperatura adecuada. Se les hace el día muy largo, notan que no están bien y te preguntan. En ocasiones, tienes que ajustar la medicación en pacientes con hipertensión", concluye.