Los padres del pequeño Julen, sin indemnización: el dueño de la finca donde murió se declara insolvente
- El niño de dos años cayó al pozo mientras jugaba en la finca de David Serrano
- El dueño de la finca fue condenado en enero de 2020 a un año de prisión y a indemnizar a los progenitores con 180.000 euros
David Serrano, el dueño de la finca donde murió el niño de dos años tras caer a un pozo, en Totalán, Málaga, se declara insolvente y no tendrá que seguir pagando la indemnización fijada a los padres del pequeño. La finca donde se ubica el pozo ilegal estaba sin inscribir en el registro.
Fue un caso que conmocionó a toda el país, ocurrió en 2019 y transcurrieron trece días desde la caída accidental de Julen hasta que los servicios de emergencia pudieron extraer su cuerpo sin vida. David Serrano, el dueño de la finca, fue condenado a un año de prisión y a indemnizar a los padres con 180.000 euros.
"Los padres sabían que no lo iban a cobrar"
Antonia Barba es la abogada de los padres de Julen: "Es algo con lo que contábamos, nosotros no nos hemos opuesto, ni hemos hecho una alegación en contra de la insolvencia. Sabemos que no tiene posibilidad de hacer frente a la indemnización. Sabían que no lo iban a cobrar, pero ellos querían depurar responsabilidades y que se esclarecieran los hechos que llevaron al fatal desenlace", explica en 'La Hora de la 1'.
Además, relata las medidas que se están tomando respecto a la finca donde murió el niño: "Me consta que la junta de Andalucía ha iniciado un expediente sancionador. Ella es la encargada de que se tomen las medidas oportunas en orden a que se tomen las medidas oportunas", afirma la abogada.
Para finalizar, explica el destino que cree que le esperará a la finca: "Me imagino que será embargada a por parte de la Junta para cubrir el importe de las sanciones", concluye.
Un caso que conmocionó a España
Quien aparta a los medios de comunicación de los padres de Julen es David Serrano. Se trata del propietario de la finca en la que muere el niño tras caer a un pozo. Fue condenado a un año de prisión por homicidio imprudente, finalmente extinguido por el juez el pasado mes de marzo.
El niño de dos años cayó al pozo, de 25 centímetros de ancho y 110 metros de profundidad, mientras jugaba en la finca de David Serrano durante la tarde del 13 de enero de 2019. Minutos después arrancó un operativo de rescate que se mantuvo durante casi dos semanas con la participación de más de 300 profesionales de distintas disciplinas.
Fueron los miembros de la Brigada de Salvamento Minero asturiana quienes, en la madrugada del 26 de enero, hallaron el cuerpo sin vida del menor a unos 70 metros de profundidad. La autopsia reveló que el niño había fallecido por los golpes sufridos durante su caída al vacío.
El propio David Serrano reconoció que no tomó las medidas de seguridad necesarias que hubiesen evitado la caída de Julen al pozo.