La ciudad francesa de Grenoble prohíbe el uso del burkini en las piscinas públicas "por motivos de higiene"
- El Consejo de Estado francés ha confirmado la prohibición de esta prenda usada en su mayoría por algunas mujeres musulmanas
- La ciudad votó a favor de su uso en mayo, pero el Tribunal Administrativo suspendió las medidas ante las críticas que suscitó
El burkini, el traje de baño de cuerpo entero utilizado por algunas mujeres musulmanas, no podrá llevarse en las piscinas públicas de la ciudad francesa de Grenoble, "por motivos de higiene y seguridad" y por suponer "una amenaza al principio de neutralidad de los servicios públicos". Así lo ha confirmado este martes el Consejo de Estado francés, órgano supremo de los contenciosos administrativos.
"El Artículo 1 de la Constitución prohíbe que prevalezcan las creencias religiosas por encima de las reglas comunes establecidas", ha dicho el Consejo de Estado en un comunicado. Defienden que el reglamento de las piscinas de Grenoble "atenta contra la igualdad de trato a los usuarios, por lo que la neutralidad del servicio público se ve comprometida".
Los jueces del Consejo de Estado se han pronunciado tras el recurso interpuesto por el Ayuntamiento de Grenoble, que había recurrido a esta instancia para levantar la prohibición decretada por un tribunal administrativo el pasado mayo.
El Ayuntamiento de la ciudad, considerada el laboratorio político de la "nueva izquierda" y gobernada por el ecologista Éric Piolle, votó a favor del uso de burkinis municipales el 16 de mayo. La medida suscitó, sin embargo, las críticas de políticos conservadores y de la extrema derecha. Finalmente, ante la queja del delegado de Gobierno del departamento de Isère, el Tribunal Administrativo de Grenoble ordenó suspender la medida.
La sentencia del Consejo de Estado ha sido aplaudida por el ministro del Interior, Gérard Darmanin, del ala más derechista del Gobierno de Emmanuel Macron."Una victoria para nuestra ley de separatismo, para el laicismo y sobre todo para la República", ha dicho Darmanin.
Un debate abierto en el país desde 2016
El debate sobre el burkini lleva candente en Francia desde el año 2016, cuando una ciudad del sur del país intentó prohibirlo en las playas públicas. Entonces, el Consejo de Estado anuló la prohibición por considerar alegando que vulneraba las libertades fundamentales. Después, varias ciudades lo prohibieron y, aunque no existe una medida a nivel nacional, no pueden usarse en muchas de las piscinas públicas del país.
La líder de Agrupación Nacional, Marine Le Pen, que este año ha obtenido resultados históricos, ha manifestado su deseo de introducir una ley que prohiba este tipo de traje de baño en las piscinas municipales francesas.
Por su parte, las organizaciones de derechos de los musulmanes en Francia defienden que las prohibiciones del burkini restringen las libertades fundamentales y discriminan a las mujeres musulmanas. Francia, que cuenta con la mayor minoría musulmana de Europa, estimada en 5 millones de personas, ya introdujo en 2010 la prohibición del uso del niqab y el burka en público.