Muere el arquitecto Jordi Bonet, director de las obras de la Sagrada Familia, a los 97 años
- Ejerció una labor de divulgación de la obra de Antoni Gaudí en simposios y conferencias en todo el mundo
- Trabajó en la construcción de viviendas, en el ámbito de la arquitectura industrial y en la innovación con nuevos materiales
Jordi Bonet i Armengol, arquitecto y exdirector de las obras de la Sagrada Familia de Barcelona, ha fallecido este lunes por la noche a los 97 años de edad por causas naturales, según ha informado su hijo en un comunicado a través de las redes sociales.
Bonet ejerció como coordinador de las obras de la Sagrada Familia desde 1985 hasta el 2012. Dejó el cargo a los 87 años, aunque siguió vinculado a esa labor como director emérito. Durante su etapa como arquitecto del templo, en la que las obras registraron un gran impulso, se introdujeron las herramientas informáticas y de diseño asistido por ordenador. Además, ejerció una labor de divulgación de la obra de Antoni Gaudí en simposios y conferencias en todo el mundo, así como con la publicación de capítulos de obras especializadas, estudios y artículos.
El Patronato de la Junta Constructora de la Sagrada Familia ha señalado que Bonet llevó a cabo la construcción de las naves y la ejecución de las bóvedas del interior con bóveda de ladrillo plano, además de toda la investigación previa del proyecto de Gaudí. También ha destacado a Bonet "por sacar adelante las obras en momentos en que la continuación era polémica entre la sociedad catalana" y ha remarcado la labor de difusión de la Sagrada Familia y Gaudí como una de las constantes de su vida.
Influencia de Gaudí en sus obras
Nacido en Barcelona en 1925, Jordi Bonet fue un activista cultural y dirigente del movimiento escultista catalán e internacional. También fue académico numerario de la Reial Acadèmia Catalana de Bellas Artes de Sant Jordi y miembro de la Junta de Museos de Cataluña y de la Academia Pontificia del Panteón, en Italia. Formó parte de la Fundación Gala-Salvador Dalí, del Patronato de la Sagrada Familia, del Colàlegi d'Arquitectes de Catalunya y del Patronat dels Monestirs de Sant Cugat del Vallès, entre otros.
Se graduó como arquitecto en 1949 y proyectó la influencia de Gaudí en algunas de sus obras. Entre ellas, destacan las iglesias de Vinyoles d'Oris (1955), de Sant Emeteri (Barcelona, 1960) y de Santa María de la Fortesa (Piera, 1962).
Trabajó en la construcción de viviendas, en el ámbito de la arquitectura industrial y en la innovación con nuevos materiales y diseños. Fue autor de diversos conjuntos de viviendas, como la Cooperativa Sagrat Cor de Jesus, Caixa Postal o La Cantonada. También llevó a cabo en Barcelona las escuelas Regina Carmell y Sant Gregori y el edificio Aiscondel. En el Vendrell, en Tarragona, dirigió el Auditorio Pau Casals.
Dentro del movimiento escultista, fue el primer presidente del Movimiento Scout Católico de España y fue secretario general de la Conferencia Católica de Escultismo entre 1977 1981. Además, fue director general de Patrimonio Artísitico de la Generalitat de Cataluña desde 1981 hasta 1984.
Entre otras distinciones, recibió el Premio Lluís Domènech i Montaner de investigación arquitectónica, la Cruz de la Orden de Alfonso X el Sabio, otorgada por el Ministerio de Educación y Ciencia, y la Cruz de Sant Jordi, que le otorgó la Generalitat en 1990.