Los agricultores, héroes contra el fuego
- El trabajo de los agricultores, clave para frenar el incendio que ha arrasado miles de hectáreas de monte y casi llega a Gallipienzo
- Piden a los gobiernos que en invierno se limpien los montes de maleza que propaga el fuego como gasolina
Todo el mundo coincide en que la actuación de los agricultores fue clave en la extinción del incendio que casi se originó en los montes cercanos a Ujué y San Martín de Unx y que casi llega a las casas de Gallipienzo. Con sus tractores y cosechadoras hicieron cortafuegos que resultaron vitales para salvar sus cosechas y sus hogares.
Acompañamos a cuatro agricultores de Gallipienzo, Cáseda y Sanguesa hasta el campo donde lograron retener las llamas. El cortafuegos que hicieron fue clave. Lo realizaron entre 25 agricultores de la zona que se presentaron voluntarios a ayudar. Otros compañeros de localidades vecinas como Tafalla o la aragonesa Sofuentes también llamaron para saber si necesitaban ayuda aunque no fue necesario que acudirían finalmente.
Amor a su tierra
El alcalde de Gallipienzo, Rubén Mateo, nos dice que la gente de los pueblos "quiere mucho a sus pueblos y en una catástrofe como ésta todos arrimamos el hombro". Además añade: "Somos chavales jóvenes que trabajamos el campo y vivimos del campo pero también somos amigos y pasamos el rato juntos y hasta nos vamos de vacaciones".
“Si no es por la UME se quema media Navarra“
Todos los agricultores de la zona elogian también el trabajo de los bomberos de la Unidad Militar de Emergencia. "Si no es por la UME, se quema media Navarra", explica Oscar, el hermano del alcalde, emocionado todavía al ver el monte quemado y al recordar las noches en vela intentando apagar un fuego que les invadía.
"A media tarde del martes el viento cambió a cierzo y el humo nos alcanzó. Bajamos llorando del monte porque pensábamos que no había nada que hacer y que el incendio iba a llegar a las casas de Gallipienzo", comenta Eduardo Beroiz, un joven agricultor de Cáseda que ayudó en las labores de extinción.
“Se te subían los huevos... “
Miguel Pérez de Larraya, agricultor de Sangüesa, recuerda entre lágrimas lo que vivió. "Pensábamos que se quemaba todo. Era un infierno. Unas llamas de 50 metros más grandes que el monte que te dejaban sin palabras". "Se te subían los huevos..."Miguel no termina la frase pero no hace falta, se le ve en la cara lo asustado que estaba.
Los cuatro agricultores culpan al Gobierno de Navarra, concretamente al responsable de Medio Ambiente que estaba en la zona, de reaccionar tarde y de no dejarles actuar antes. "No se porque motivos hasta las 11 y media de la mañana no nos dejaron entrar a intentar extinguir el fuego cuando estábamos listos desde las 6 de la mañana", explica Rubén Mateo. Su hermano Oscar añade que podrían haber "atacado un cortafuegos antiguo con un bulldozer y un montón de motosierras y haber parado el fuego mucho más lejos del pueblo".
“El fuego se apaga en invierno“
Además consideran que es erronea la política actual en los montes. "El fuego se apaga en invierno", repitan Oscar, Miguel y Eduardo. "En invierno hay que limpiar malezas, sacar madera vieja del monte, para que luego no pase lo que ha pasado este año, que casi se quema media Navarra por una gestión que no es ni medio normal", afimra Óscar Mateo.
Incendios-España vaciada
Los bomberos también están de acuerdo con esta última afirmación y relacionan la ola de incendios con la famosa "España vaciada". "Cada vez hay menos agricultores y menos ganaderos y eso se nota. El ganado, las ovejas, cabras, vacas, hacían una labor muy importante de limpieza en los montes. Pero ahora cada vez hay menos y los montes prenden como si estuvieran rociados de gasolina", comenta el sargento de Bomberos de Navarra Jon Diez de Ure. "En Australia o en Estados Unidos también han sufrido incendios enormes por la ausencia de ganado. Está demostrado", sentencia el sargento.
Ojalá todo el mundo tome nota para el futuro, pero el desastre medioambiental tardará mucho en recuperarse. Pasarán más de 30 años para volver a ver este monte como lo conocíamos.