El 16% de los votantes del PSOE en 2018 cambió al PP en las elecciones andaluzas, según el CIS
- La candidatura de Moreno recibió también apoyo de un 64,7% de antiguos votantes de Cs y un 31,4% de votantes de Vox
- Una vez conocido el resultado, el 95% de los andaluces dice que habría votado lo mismo
Las elecciones andaluzas del pasado 19 de junio desembocaron en la primera mayoría absoluta del PP en esta comunidad, un resultado histórico para el partido del actual presidente de la Junta, Juanma Moreno, cuyo partido creció del 28% de los votos al 43%, y de 26 escaños a 58, al tiempo que el PSOE profundizaba en su suelo electoral, al bajar del 28 al 24% de los votos. Y los datos del CIS permiten señalar, casi tres semanas después, que tras este resultado se halla un trasvase de votos entre ambos partidos.
Casi el 16% -en concreto, el 15,6%- de los andaluces que afirman que en 2018 votaron al PSOE de Susana Díaz en las autonómicas de 2018 habrían votado en esta ocasión al PP de Juanma Moreno, según la encuesta preelectoral del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicado este miércoles.
Aunque el espectacular crecimiento electoral del PP se sustentó también en el 64,7% de votantes de Ciudadanos que cambiaron de papeleta, el 31,4% de votantes de Vox en 2018 que optaron por los 'populares' y el 22,1% de andaluces que no votaron en las pasadas elecciones autonómicas y en estas lo hicieron por el PP, siendo la candidatura que más animó a los abstencionistas.
Según las transferencias de voto que dibuja este sondeo, solo el 56,1% de los votantes del PSOE en 2018 habrían mantenido fielmente su voto y habrían optado de nuevo por esta candidatura, liderada por Juan Espadas. Casi el 11% de estos votantes socialistas se habrían abstenido, y en torno a un 9% se fueron a otras candidaturas de izquierda (Por Andalucía y Adelante Andalucía), por encima del 9% de votantes de Ciudadanos en 2018 que en esta ocasión no votaron y el 7,2% de votantes de Vox en las últimas autonómicas que no ejercieron su derecho al voto en estas.
En la izquierda, el voto de Adelante Andalucía en 2018 se redistribuyó fundamentalmente entre los partidos de este bloque ideológico: el 46,3% votó a Por Andalucía, el 23,9% a Adelante Andalucía y el 12,7% al PSOE. El 6,7% de quienes afirman haber votado a la coalición que en 2018 lideraba Teresa Rodríguez se habría quedado en casa sin votar en esta ocasión, según los datos del CIS.
Y estas tendencias son similares si se tiene en cuenta como referencia a qué partido se votó en las últimas elecciones generales, en noviembre de 2019. En ese caso, el 16,7% de quienes votaron al PSOE de Pedro Sánchez votaron al PP de Juanma Moreno en las elecciones autonómicas; del mismo modo, el 62% de quienes votaron a Ciudadanos y el 31,7% de quienes lo hicieron por Vox prefirieron al PP para la Junta de Andalucía.
No obstante lo anterior, hay que señalar que estos trasvases de voto se registran a partir del recuerdo de voto expresado espontáneamente por los entrevistados, cuyas cifras sufren sesgos y no se ajustan a los resultados reales, en especial en el caso de los tres partidos más votados. Así, el 35,6% de los encuestados afirma haber votado al PP el pasado 19-J, cuando su resultado superó el 43% en las urnas; el 15,2% contestó haber votado al PSOE, cuando en realidad cosechó el 24,09% de los votos, y Vox también aparece infrarrepresentado (el 7,1% dijo haberlo votado, pero en las urnas llegó al 13,46%). Y en la encuesta, quienes no votaron, no lo recuerdan o no contestan suman el 23,2%, pero la abstención superó el 41%.
El sondeo se realizó entre el 21 y el 27 de junio, justo la semana después de los comicios, mediante 3.909 entrevistas telefónicas en 467 municipios, con un margen de error del ±1,6% para el conjunto de la muestra.
El 95% de los andaluces no cambiaría su voto
El CIS también pregunta a los entrevistados si mantendrían igual su voto ahora que se conoce el resultado de las elecciones. El 95% de quienes ejercieron su derecho al voto afirman que habría votado al mismo partido por el que lo hizo, por un 3,8% que sostiene que habría votado a otro partido. Cuando se tiene en cuenta al conjunto de la población, votaran o no, el porcentaje de quienes elegirían al mismo partido es del 71,3%.
Este porcentaje solo varía de manera apreciable entre quienes afirman haber votado a Ciudadanos (el 17,7% afirma que habría votado a otro partido) y, en menor medida, los votantes de Por Andalucía (el 91,6% afirma que habrían votado al mismo partido, frente a la media del 95%).
En general, entre todos los encuestados, el 62% afirma que decidió votar al partido por el que lo hizo antes del inicio de la campaña electoral. El 9,9% lo decidió al comienzo de la campaña, el 15,7% unos días antes de las elecciones, el 4,3% en la jornada de reflexión y el 7,9% el mismo día de las elecciones.
¿Las encuestas afectaron al voto?
En otro apartado, el CIS indaga en el efecto movilizador o desmovilizador de las encuestas electorales que se realizan durante la campaña, y que por ley dejan de publicarse cinco días antes de que concluya esta. Según esto, las encuestas previas a las elecciones, que auguraban la victoria del PP, tampoco influyeron significativamente en la decisión del voto de los andaluces. Tres de cada cuatro entrevistados (75,2%) tuvieron conocimiento de los resultados de alguno de los sondeos que se hicieron, pero de estos, el 65,4% afirma que no les influyó nada, el 18,1% reconoce que los tuvo en cuenta "poco", y el 15,5% admite que los tuvo en cuenta "mucho" o "bastante".
¿Y cómo utilizaron esta información? El 40,7% afirma que reforzaron su decisión de votar por el partido que tenía pensado, el 8,8% dice que le animaron a votar a otro partido distinto, el 14% dice que le animaron a ir a votar y al 4,3%, por el contrario, le animaron a abstenerse. Al tener en cuenta el partido por el que se votó, el efecto movilizador fue mayor entre los electores de partidos de izquierda, pero sobre todo en Ciudadanos, cuyos votantes también se sintieron más reforzados en su decisión del partido por el que iban a votar (22,1%).
Sí hubo en cambio cierto efecto de palanca para impulsar un voto de reacción frente a la anunciada victoria de Juanma Moreno. En concreto, el hecho de que las encuestas previas a las elecciones dieran claro ganador al PP animó al 23,5% a votar por otro partido, al 17,4% le impulsaron a votar al PP y a un 3,2% le desmovilizaron, de modo que no fueron a votar porque estaba claro que ganaría él.
Como es previsible, ese efecto de las encuestas de movilizar el voto en contra del partido que se vaticina como ganador fue más agudo en el caso de los votantes de partidos de izquierda (PSOE, Por Andalucía y Adelante Andalucía), pero también en el de Ciudadanos, un 54,3% de cuyos votantes se sintieron animados por las encuestas a cambiar su voto. La clara victoria del PP en las elecciones también hizo que muchos abstencionistas decidieran no votar (35,5%), aunque no influyó en la mayoría de los abstencionistas (al 48,3% dice que no le influyó en nada)