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Debate sobre el estado de la nación

Sánchez pedirá unidad y anunciará nuevas medidas y Feijóo ofrecerá una "alternativa" basada en la "moderación"

  • Es el primer debate en siete años y el Gobierno llega a la cita tras haber protagonizado tensiones en la coalición y con sus socios
  • De martes a jueves, el Gobierno y la oposición harán balance de la legislatura y abordarán propuestas para salir de la crisis

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Siete años sin debate del estado de la nación: ¿por qué se ha retrasado?

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se enfrenta desde este martes y hasta el jueves en el Congreso a su primer debate sobre el estado de la nación como jefe del Ejecutivo, en el que se espera que defienda la utilidad de la coalición, pida unidad y anuncie nuevas medidas para afrontar la crisis por la guerra de Ucrania, precisamente cuando Unidas Podemos y los socios parlamentarios de la coalición están pidiendo más políticas de izquierdas. Y es que el Gobierno está "convencido del trabajo realizado en favor del bienestar de los españoles y españolas”, según La Moncloa.

Se trata del primer debate de estas características de los últimos casi siete años y se prevé que sirva para hacer balance de toda la legislatura. El último tuvo lugar en 2015, con Mariano Rajoy como presidente del Gobierno y Sánchez como líder de la oposición. Y en esta cita se estrenan Unidas Podemos, Vox y Ciudadanos, que no tenían representación parlamentaria en 2015.

El Ejecutivo llega a este debate en un momento complicado. PSOE y Unidas Podemos han tratado de rebajar la tensión tras unas últimas semanas de duros choques por el aumento del gasto en Defensa. El partido morado ha hecho una advertencia: si Sánchez no "cambia el rumbo" y "protege" a la gente con más medidas progresistas puede perder el Gobierno. Mientras, sigue pendiente la reunión de la comisión de seguimiento del pacto de coalición. Y el resto de socios parlamentarios ha pedido también al PSOE que no vire hacia políticas de derecha tras el batacazo electoral que sufrió en Andalucía el mes pasado, una derrota que se suma a la que los socialistas vivieron en Castilla y León y Madrid.

El debate sobre el estado de la nación llega en un momento delicado

Moncloa espera que la cita sea un revulsivo para el Gobierno tras esta última derrota, si bien son conscientes de que el debate no será nada fácil porque, más allá de las diferencias internas, esperan que los socios de investidura, y especialmente formaciones como ERC, sean también duros con el Gobierno ante asuntos como el espionaje por "Pegasus" al soberanismo, la relación con Marruecos y las muertes en la valla de Melilla tras el giro histórico en la postura sobre el Sáhara Occidental. Precisamente, el Debate sobre el Estado de la Nación terminará un día antes de la reunión este viernes entre Sánchez y el presidente catalán, Pere Aragonès, para tratar de reconducir las relaciones entre ambas administraciones.

Las Mañanas de RNE con Íñigo Alfonso - Debate sobre el estado de la nacion: el pulso de la opinión pública - Escuchar ahora

Por su parte, desde el Ejecutivo esperan recibir una “visión apocalíptica” que dan por descontada por parte del PP, cuya intervención correrá a cuenta de su portavoz, Cuca Gamarra, mientras que su líder, Alberto Núñez Feijóo, se sentará en el hemiciclo por su condición de senador, pero no podrá intervenir en la sesión al no ser diputado. Las formaciones del espectro de la derecha (como PP, Vox o Ciudadanos), han sido también muy críticos por el apoyo y el pacto de EH-Bildu para la futura Ley de Memoria Democrática.

Sánchez defenderá su gestión e insistirá en agotar la legislatura

El debate comenzará este martes a las 12.00 con una primera intervención del presidente del Gobierno en la que los ejes principales serán la gestión de la legislatura, las medidas que ha adoptado el Ejecutivo y los "grandes desafíos" que quedan por afrontar en materia económica y social.

"El presidente no se dirige exclusivamente a la oposición, a la que queremos escuchar, sino a todo el país para trasladar lo que hemos hecho, lo que estamos haciendo y lo que resta por hacer", resumió este lunes la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Rodríguez dijo que el “momento” actual precisa de “unidad” y “unión” y así lo demandará Sánchez este martes.

Se espera también que el presidente insista en que terminará la legislatura y las elecciones serán a finales de 2023. “Tenemos una oportunidad histórica en lo que resta de legislatura”, porque aún queda “mucho por hacer” en el “año y medio” que falta de mandato, “pero teniendo claro que vamos a proteger a la clase media y trabajadora”, ha incidido Rodríguez.

El jefe del Ejecutivo explicará la hoja de ruta diseñada para terminar la legislatura marcando cuáles son sus "señas de identidad", según la comunicación enviada por el Gobierno al Congreso en la que solicitaba el debate de política general. Hará un repaso de situaciones inéditas a las que ha hecho frente, como la pandemia, la guerra o el volcán de la Palma, y las pondrá como ejemplo del reforzamiento del estado del bienestar mediante medidas como el ingreso mínimo vital, la subida del salario mínimo interprofesional, la revalorización de las pensiones o la reforma laboral. También destacará, pese a la incertidumbre, los datos alentadores como los relativos a la creación de empleo, y llamará a apoyar los próximos presupuestos generales del Estado.

Unidas Podemos: Sánchez debe "reorientar el rumbo"

Unidas Podemos ha exigido a Sánchez que anuncie medidas ambiciosas para recuperar la iniciativa política y ha demandado iniciar pronto la negociación presupuestaria, porque si "defraudan" a la gente en las futuras cuentas públicas serán "las últimas de la coalición", según ha explicado este lunes en rueda de prensa el coportavoz estatal de la formación morada, Javier Sánchez Serna. El partido ha vuelto a dejar patente su rechazo en el aumento del gasto defensa y exige más medidas sociales para combatir la inflación, blindar el poder adquisitivo de las familias y una reforma fiscal para que las grandes fortunas y empresas paguen lo que les corresponde.

Previsiblemente, su portavoz parlamentario, Pablo Echenique, aprovechará para exigir a Sánchez que cumpla ya con la derogación de la 'ley mordaza' y con la ley de vivienda, dos demandas claves para Podemos y aún pendientes. Así, pedirá recuperar el ritmo de las reformas para que los votantes de izquierda se sientan amparados por el Ejecutivo.

El PP analizará "la situación real" de España y ofrecerá una alternativa

Por su parte, el PP "va a analizar la situación real" de España y a "ofrecer a los españoles una alternativa política, económica y social basada en la moderación con la que la gran mayoría se puedan sentir identificados", ha expuesto su líder, Alberto Núñez Feijóo, en un mensaje de Twitter.

Gamarra, que será quien protagonice el 'cara a cara' con Sánchez, ha avisado en una entrevista en El Confidencial: "Vamos a poner al presidente del Gobierno ante el espejo de la realidad de los españoles". El PP reprochará previsiblemente a Sánchez el bloqueo en la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) tras el rechazo del Gobierno a la propuesta que los 'populares' plantearon este lunes y la falta de acuerdo en una reunión posterior entre el Ejecutivo y el PP. El vicesecretario de Institucional del PP, Esteban González Pons, ha comparado la crisis actual con la de 2008 y ha asegurado que Sánchez y el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero comparten "la temeridad, la falta de responsabilidad y el negacionismo a la hora de enfrentar la crisis". En cambio, el PP tiene previsto hacer "propuestas constructivas" como la deflactación del IRPF, que se baje el IVA del gas y rebajar el gasto "ineficiente".

Vox, por su parte, pondrá el foco en la economía cotidiana y su líder, Santiago Abascal, también denunciará la "corrupción moral" del Gobierno de coalición. Así, Abascal hablará de las "cosas del comer" y hará un "buen retrato" de los asuntos que preocupan a los ciudadanos en su día a día, como la subida de la inflación o la pobreza energética, según ha avanzado en rueda de prensa su portavoz parlamentario, Iván Espinosa de los Monteros. Pero además, ha dicho, planteará medidas que se podrían haber tomado.

Mientras, Ciudadanos también llevará la economía y las alternativas naranjas como eje vertebrador de su discurso.

Los socios de Sánchez le pedirán más políticas de izquierda

Se prevé que la inflación y los precios disparados de los alimentos y la energía sean también un eje principal en los discursos de los socios parlamentarios del Gobierno, que pedirán más políticas de izquierdas y harán valer sus apoyos para lo que queda de legislatura. Pero otras polémicas de los últimos meses seguirán estando presentes en los debates.

En concreto, ERC espera hechos concretos por parte de Sánchez para "restablecer los lazos de confianza" rotos tras la "brecha enorme" que ha supuesto la crisis de Pegasus o la reducción de las inversiones en Cataluña. También confía en que el Gobierno de Sánchez siga avanzando en cuestiones "fundamentales", como la ley de vivienda o medidas "estructurales" para hacer frente a la crisis económica, entre ellas una reforma fiscal: "Hacen falta políticas de izquierda que sean percibidas por la gente, porque con cheques no arreglas nada", señalan fuentes del partido a Efe, y advierten de que "si el PSOE hace de PP" la gente va a votar a Alberto Núñez Feijóo en las próximas elecciones.

EH-Bildu, que ante la negativa de ERC a apoyar las últimas medidas del Ejecutivo, ha ido ganando peso como socio prioritario dentro del Gobierno, echará previsiblemente en cara a Sánchez las decisiones "erróneas" que asegura ha tomado con el Sáhara o Melilla, y le reclamará igualmente que "deje a un lado la tentación de un giro a la derecha". "Pediremos medidas que profundicen en políticas sociales de izquierda para dar una salida a la crisis en la que no paguen sus consecuencias los de siempre, los más vulnerables", añaden fuentes de la formación.

Otro socio parlamentario clave para el Gobierno de Sánchez es el PNV, que no ha querido adelantar nada sobre la postura del debate, aunque su portavoz, Aitor Esteban, comentó hace unos días que convendría abordar el tema de Melilla.

Tras el debate habrá votaciones

Terminados los duelos parlamentarios, que se desarrollarán entre este martes y miércoles, se abrirá un plazo de 30 minutos para que los grupos presenten sus propuestas de resolución, un máximo de 15 propuestas por cabeza. Eso implica un total máximo de 150 textos que pueden ser objeto de enmiendas, pero que en ningún caso se pueden votar por puntos porque se haría eterno.

El jueves se reanudará el Pleno del Congreso con el debate de esas 150 propuestas. Cada grupo dispondrá de quince minutos para defenderlas y la votación se realizará al final del Pleno, junto con el resto de asuntos del orden del día. El resultado de esas votaciones servirá para medir la fortaleza o debilidad de las alianzas parlamentarias del Gobierno de coalición.

Moncloa ha querido que el Pleno sirva para votar otros proyectos legislativos, además de la reforma para la renovación del TC. Así, en el orden del día se ha incluido también para ese jueves la Ley de Memoria Democrática, el decreto anticrisis aprobado el 25 de junio, y el decreto ley de esta semana que limita la temporalidad en el sector público sanitario.