Los autónomos podrán cobrar hasta dos años una prestación por paro parcial

• Así lo establece el nuevo sistema de cotización: no requiere cerrar el negocio, rescindir contratos ni darse de baja
• Un millón de autónomos que cotiza por la base mínima verá reducida su cuota un 32% en 2025, ha indicado Escrivá

La reforma de los tramos de autónomos baja las cuotas, pero el esfuerzo será mayor para los que menos ingresan

La reforma del sistema de cotización de los trabajadores autónomos incluye el reconocimiento de una nueva prestación por cese de actividad parcial, que será del 50% de la base reguladora, compatible con la actividad y se podrá cobrar por un periodo de cuatro meses a dos años. Esta es una de las novedades del nuevo régimen de trabajadores autónomos (RETA) acordado por el Gobierno y los agentes sociales, y presentada este jueves en el Congreso de los Diputados por el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá.

Supone un cambio con el modelo actual, ya que no requiere cerrar el negocio, rescindir todos los contratos ni darse de baja en el RETA, algo que sí exige el modelo actual, tal y como ha explicado el ministro en una sesión extraordinaria de seguimiento del Pacto de Toledo en el Congreso de los Diputados.

Tal y como indicó este miércoles, llevará este nuevo sistema, al Consejo de Ministros del próximo martes 26 de julio para aprobarse en un decreto ley y tramitarse posteriormente en el Congreso como proyecto. Con este mecanismo, que entrará en vigor en 2023, asegura que los autónomos cotizarán por su rentabilidad neta.

¿Quiénes podrán acceder a este tipo de cese?

Al cese parcial podrán acceder los autónomos con trabajadores y que reduzcan o suspendan la jornada al 60% de la plantilla, que vean recortados sus ingresos o ventas un 75% durante dos trimestres y que no tengan ingresos superiores al salario mínimo interprofesional (SMI).

Por otra parte, los autónomos sin trabajadores accederán si tienen deudas con acreedores no públicos durante dos trimestres que supongan una reducción del 75% del nivel de ingresos o ventas.

También se regula el cese temporal parcial por fuerza mayor cuando haya una declaración de emergencia y los autónomos pierdan el 75% de sus ingresos y se queden con una renta no superior al SMI.

Además, la norma adaptará a los autónomos el mecanismo de protección Red establecido en la reforma laboral para los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) cíclicos o sectoriales.

Un 50% de base reguladora hasta un año, si se activa el mecanismo Red cíclico

En el caso de que el Consejo de Ministros active el mecanismo Red cíclico ante una coyuntura macroeconómica general desfavorable, los autónomos podrán cobrar el 50% de la base reguladora hasta un año, sin consumir cese de actividad y con una exoneración del 50% de la cotización.

Para acceder a la prestación tendrán que acreditar una caída de ingresos del 75%, ingresos no superiores al SMI y que el 75% de la plantilla esté afectada.

En caso de que el Consejo de Ministros apruebe el mecanismo Red sectorial, se recibirá un pago único del 70 % de la base reguladora y el pago del 50 % de la cotización, siendo necesaria una caída de ingresos del 50 % con empleados o del 75 % sin empleados, que los ingresos no superen el SMI, que el 75 % de la plantilla esté afectada y que exista un proyecto de inversión y un plan de recualificación.

Un millón de autónomos en base mínima cotizará un 32% menos

Un millón de autónomos que cotiza por la base mínima verá reducida su cuota un 32% en 2025, según la reforma del sistema de cotización.

Ha destacado que esta reforma es "uno de los hitos del Plan de Recuperación" y que tiene como objetivo proteger a los autónomos, sobre todo a los que obtienen menores ingresos. Así, ha recordado que el 84% del los afiliados al RETA cotizan por la base mínima, lo que incide negativamente en la pensión que perciben cuando se jubilan, que es un 43% inferior a la del régimen general.

Además, ha detallado que en España hay un total de 3.400.00 autónomos, de los que casi 1.700.000 ingresan menos de 670 euros. Este grupo es el que verá reducidas sus cuotas al situarse en la base mínima. A los otros 600.000 autónomos que cotizan en la base mínima, entre los que se encuentran autónomos societarios, con rendimientos cero, religiosos o familiares colaboradores, se les va a modificar el tramo de cotización hacia uno en torno al SMI.

De esta forma, el ministro ha explicado que los autónomos con menores rendimientos, por debajo del SMI, pagarán cuotas entre 200 y 260 euros al mes en 2025, algo que afectará de manera importante a las mujeres y los jóvenes. Ha incidido en este dato porque uno de cada tres autónomos es una mujer, pero el 70% de las mujeres autónomas tiene ingresos inferiores al SMI.

Por encima, hay 400.000 personas con rendimientos netos entre 1.125,9 y 1.700 euros al mes, cuyas cotizaciones en 2025 serán iguales o ligeramente inferiores a las actuales. Por encima de los 1.700 euros de rendimientos netos mensuales se encuentran 800.000 autónomos.

Aquellos con rendimientos superiores a los 6.000 euros abonarán 590 euros de cuota y en esta situación se encuentran 132.000 autónomos, de los que dos tercios son societarios.

La reforma del RETA establece 15 tramos de cotización en función de la rentabilidad neta obtenida. El modelo comenzará a aplicarse en 2023, con una cuota mínima de 230 euros al mes para autónomos con rendimientos netos inferiores a 670 euros, una cantidad que va hasta los 500 euros para el tramo máximo, es decir, los autónomos que ingresen más de 6.000 euros netos mensuales. Estas cuotas se irán ajustando en 2024 y 2025.