De Cos cree que los tipos seguirán subiendo y defiende el pacto de rentas para "repartir las pérdidas" por la inflación
- El gobernador del Banco de España justifica la subida de los tipos de interés en la subida de la inflación "mayor de lo esperado"
- "El objetivo del Banco Central Europeo es mantener una inflación en el medio plazo en el 2 %", asegura De Cos
El Banco Central Europeo ha anunciado el jueves la mayor tipos de interés -0,50%-, en una decisión que pone fin a una era de dinero 'gratis' que impactará en las hipotecas de las familias y la financiación de las empresas y el Estado. Y para explicar las claves de esta decisión tomada en el máximo órgano de poder del Banco Central Europeo, entrevistamos al gobernador del Banco de Españaque ha estado en esa reunión.
Pregunta.- Empezando con esa decisión tan importante. ¿Por qué esa subida, que ha duplicado lo que se esperaba en las últimas semana? ¿Tan sombrío es el panorama?
Respuesta.- Es importante contextualizar el porqué de esos 50 puntos básicos en comparación con los 25 puntos básicos que habíamos preanunciado en nuestra reunión de junio, la que tuvo lugar en Ámsterdam. Recordaréis que hemos estado siempre señalando que estamos ante un momento de gran incertidumbre y que el Banco Central Europeo tiene que actuar sobre la base de los datos que va recibiendo. La realidad es que los datos que hemos recibido desde esa reunión de junio, en particular en términos de la evolución de la dinámica de la inflación, que es el mandato fundamental que tiene el Banco Central Europeo, han sido peores, es decir, más elevados de los que inicialmente estábamos esperando. Este es el primer argumento que justifica este mayor incremento. Pero el segundo, que también es muy importante, es que aprobamos un nuevo instrumento de protección de la transmisión de la política monetaria. Y esto nos hace estar más confiados ante esos episodios de fragmentación financiera que provocan que, en algunas ocasiones y ante determinadas circunstancias, la política monetaria no tenga los mismos efectos en todos los países de la zona euro. Ahora estamos en mejor situación de combatirlo. Lo que hicimos es anticipar nuestra salida de los tipos de interés negativos.
P.- Del depósito, ¿no? que son los tipos que se aplican a los bancos por dejar durmiendo su dinero en las arcas del Banco Central Europeo.
R.- Efectivamente. Pero, sin embargo, y esto es muy importante, no cambia en absoluto nuestra intención de proseguir con la normalización de la política monetaria hasta que los tipos de interés estén en lo que nosotros consideramos neutrales.
P.- ¿De que depende que esos tipos de interés se vayan acercando de forma más rápida o más lenta a ese objetivo neutral que tenemos entendido puede estar en el entorno del 2 % o incluso más, dadas las condiciones de la inflación? Ha dicho la presidenta Christine Lagarde que van a ir reunión a reunión, mes a mes, y en base a los datos. Pero ¿de qué depende que el Banco Central Europeo pise el acelerador o el freno en esa subida de los tipos de interés que ya ha comenzado con una sorpresa, con un giro de guión?
R.- Depende de la evolución económica y de la dinámica de la inflación. También de la situación macroeconómica, del crecimiento económico, porque el crecimiento económico también tiene implicaciones económicas sobre la inflación. Ese va a ser el principal determinante. Cómo son esas condiciones de la inflación en el corto plazo, cómo es la evolución macroeconómica que vamos a ir observando, los riesgos que vamos identificando en cada momento, cómo determinan nuestras perspectivas de evolución de la inflación en el medio plazo, que es al final el objetivo del Banco Central Europeo. Mantener una inflación en el medio plazo del 2 %.
P.- Y esta subida se ha añadido a otro de los grandes anuncios en el día de ayer. El Banco Central Europeo ha puesto en marcha y ha dado luz verde a ese mecanismo antifragmentación cuyo objetivo es intentar disipar cualquier tipo de duda sobre los países y, sobre todo, con el foco puesto en los países del sur de la zona del euro: España, Italia..., y evitar una nueva crisis con el repunte de las primas de riesgo. Este mecanismo ¿va a venir acompañado de algún tipo de condicionalidad para aquellos países sobre los que el Banco Europeo decida aplicar ese instrumento contra la fragmentación dentro de la zona del euro?
R.- Lo más importante que hay que subrayar en este momento, tras la aprobación ayer de la creación de ese instrumento, es la importancia de su creación. Con esto estamos reconociendo en el Banco Central Europeo que, mantener unas condiciones homogéneas en todo el área del euro, es un prerrequisito para la estabilidad financiera. Es decir, que es una preocupación y una ocupación del Banco Central Europeo mantener esas condiciones financieras de manera homogénea en todo el área del euro. Y efectivamente, hay unos criterios de elegibilidad que están definidos en la nota de prensa que publicamos ayer. Pero yo creo que lo más importante ahora mismo es la creación del instrumento y la seriedad que esto significa en términos de cómo se va a tomar el Banco Central Europeo luchar contra posibles disrupciones en la transmisión de nuestra política monetaria en todos los países del área del euro.
P.- Entre esos criterios está que se incluye dentro del déficit excesivo, que siga las recomendaciones de la Comisión Europea en materia de reformas, sobre todo dentro del marco del Plan de Recuperación y una evaluación que haga el Banco Europeo sobre la sostenibilidad de la deuda. Son tres cualidades entre las que podría estar perfectamente Italia. Una decisión que se adoptó con el telón de fondo de la crisis de nueva inestabilidad política allí. ¿Hasta qué punto ha influenciado esa nueva ronda de tensiones políticas en Italia y esa crisis de inestabilidad en aplicar de forma urgente y que esté disponible ya ese instrumento contra la fragmentación para evitar un repunte de las primas de riesgo de forma injustificada, como ha dicho en alguna ocasión Chrstine Lagarde en los mercados?
R.- No ha tenido ninguna influencia. La primera señal que nosotros hemos transmitido de que íbamos a crear un instrumento como el que finalmente hemos aprobado, la vimos hace ya bastante tiempo. Las decisiones del Banco Central Europeo se toman con total independencia de los acontecimientos políticos.
P.- Y, para terminar, estamos viendo un panorama en el que no se descarta una recesión a la vuelta de verano. Una desaceleración económica, si acaso, en un contexto de inflación elevada de hasta el 10 % en España, de casi el 9 % de la zona euro, de más del 20 % en países bálticos. En este contexto tan complicado y que el Banco Europeo adopte la decisión de subir los tipos de interés al doble del ritmo previsto hasta ahora, ¿cómo pueden ustedes convencer a los ciudadanos de que se están dando todas esas circunstancias? Aumento de los tipos de interés, aumento continuado de la inflación, desaceleración económica latente en los próximos meses, y que se les diga: no podemos subir mucho más los salarios. Es decir, que los salarios tengan un tope de subida porque si no se podría caer en lo que ustedes denominan "efectos de segunda ronda en la inflación". ¿Cómo pueden ustedes convencer a los ciudadanos de que no se pueden subir más los salarios, como ya están exigiendo en muchos sectores?
R.- Lo que me estás preguntando es lo que nosotros hemos denominado un pacto de rentas. Yo creo que hay que explicar bien el porqué y en qué consiste un pacto de rentas. Y esto se deriva, esencialmente, de reconocer que para los países del área del euro -también para la economía española- una buena parte de las perturbaciones que estamos sufriendo tienen que ver con un incremento de un bien, que son los precios energéticos como consecuencia, no solo, pero en particular de la guerra de Ucrania. Resulta que este bien tan indispensable para nuestras vidas y para las actividades productivas diarias ni España ni la mayor parte de los países del euro dispone del mismo y necesita importarlo. Si aumenta el precio de un bien que necesitamos y que necesitamos importar, significa que nos hemos empobrecido. Este reconocimiento del empobrecimiento derivado del incremento de los precios energéticos es absolutamente fundamental para luego derivar de ahí la necesidad de un pacto de rentas. Si lo único que podemos hacer es repartir esa pérdida que se genera como consecuencia del incremento de los precios energéticos, de tal manera que si todos los agentes económicos, las empresas, los hogares, las familias, el sector público tratan de eludir esa pérdida, lo único que vamos a provocar es una espiral inflacionista: un incremento de los márgenes empresariales, un incremento de los salarios indiciados con la inflación, un incremento también en el caso del sector público, de las distintas variables que se indician habitualmente con la inflación, que en último término lo que nos va a llevar es a una pérdida de competividad de la economía, que se añadiría a sus efectos negativos, esa pérdida de continuidad sobre el empleo, sobre el crecimiento económico, sobre el bienestar de los ciudadanos, a la perturbación negativa que ha supuesto el incremento de los precios energéticos. Por eso nosotros llevamos defendiendo en el Parlamento, en el Congreso, en octubre del año pasado, lo que se denomina un pacto de rentas, que no es ni más ni menos que acordar un reparto de esa perdida en las empresas vía reducción de los márgenes empresariales; en los trabajadores vía un incremento de los salarios por debajo de la inflación. Es decir, que no se indicen con la inflación. Y por supuesto, también en el sector público, tanto salarios como pensiones.
P.- En septiembre la próxima reunión, en la que veremos si suben o no los tipos de interés, ¿no se descarta, no?
R.- Hemos dicho que somos dependientes de los datos. Esa es la frase textual que hay que repetir hasta la saciedad. En septiembre veremos. Analizaremos la evolución económica de las próximas seis semanas, de todo el mes de agosto. En el mes de septiembre recuerdo también que tendremos nuevas proyecciones macroeconómicas, que para nosotros son muy importantes, porque es la forma en que nuestros economistas analizan de manera conjunta todo el eurosistema, los bancos centrales nacionales, el Banco Central Europeo... Nos proporcionan un análisis muy detallado de la situación y estaremos en mejores condiciones de determinar cuál es la pauta de normalización de la política monetaria que tendremos que impregnar en ese mes.