Más de 4.000 hectáreas quemadas en Galicia por siete incendios activos, la mitad por el de Boiro
- El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha visitado este sábado el Centro de Coordinación Central
- En Santa Cruz del Valle (Ávila) crecen las sospechas de que el fuego sea intencionado
Un total de 4.032 son las hectáreas quemadas en Galicia por siete incendios, la mitad de esa extensión en el fuego que se inició el pasado jueves en Cures, en Boiro (A Coruña), el cual se ha extendido por parte de la sierra del Barbanza.
La situación dos sigue declarada a modo preventivo por la cercanía a núcleos de población, especifica Medio Rural en su comunicado final de este sábado.
Las llamas originadas en Cures, catalogada como parroquia con una alta actividad incendiaria, han afectado a los municipios colindantes a Boiro, que son los de Ribeira - en donde el viernes 700 personas fueron desalojadas de un camping - y A Pobra do Caramiñal.
El alcalde de este último pueblo, Xosé Lois Piñeiro, ha escrito en las últimas horas en redes sociales un mensaje tranquilizador, después de noticias funestas por los desalojos vividos, los múltiples focos declarados, el viento del nordeste, la sequedad de la vegetación y la niebla tupida.
"Sin que sea un comunicado oficial ni mucho menos, el mensaje hacia la noche es tranquilizador. Con seguridad (el fuego) reavivará en varios puntos, se verán zonas con ascuas y mucho humo. Hay mucha gente vigilando y alerta. Lo peor ya ha pasado. Aunque para mí lo peor está por venir. Será cuando suba a A Curota", ha comentado el regidor en alusión a una de las zonas más devastadas.
Rueda visita el Centro de Coordinación Central
En el resto de Galicia, el fuego de Verín (Ourense), originado en diez focos simultáneos y diferentes, está estabilizado después de arder 600 hectáreas. En O Pereiro, en A Mezquita, en esa misma provincia, está controlado otro que quemó 150. Ya en Pontevedra, en Xustáns, en Ponte Caldelas, son 350 las hectáreas ardidas por un incendio todavía activo y con nivel de alerta 2 por la cercanía a núcleos habitados. En Saiar, en Caldas, sigue activo otro fuego que ha quemado 450 hectáreas y que, según detalla la Xunta, evoluciona favorablemente hacia su estabilización. En Arbo, están controlados tanto el fuego de Mourentán (400 hectáreas calcinadas) como el de Barcela (82).
La evolución de los incendios empieza con los fuegos activos, que después pasan a estabilizados, siguen a controlados y concluyen cuando están extinguidos.
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha visitado este sábado el Centro de Coordinación Central de Incendios para hacer seguimiento de los trabajos de lucha contra los incendios.
"Como siempre, todo mi apoyo a las personas que los sufren y a los profesionales que los combaten", ha comentado el mandatario autonómico en su cuenta oficial de Twitter.
En esa misma red social, su antecesor y líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha pedido que "todo el peso de la ley" caiga sobre los responsables de los fuegos, "que en un gran porcentaje son intencionados". "La colaboración ciudadana es imprescindible para esclarecer los ataques a nuestro patrimonio natural, que ponen en peligro vidas", ha completado Feijóo su observación.
En Galicia se encuentra a disposición de la ciudadanía el número de teléfono gratuito 085, al que se debe llamar en caso de detectar algún fuego forestal.
Además, existe un teléfono anónimo y gratuito, el 900 815 085, para denunciar cualquier actividad delictiva incendiaria de la que se tenga sospecha o conocimiento.
Crecen las sospechas de que el incendio en Ávila sea intencionado
Por otro lado, el operativo de extinción de incendios desplazado a Santa Cruz del Valle (Ávila), integrado por más de 400 personas y 26 medios aéreos, espera que tras la retirada de estos últimos la próxima noche sea "dura" y de "muchísimo trabajo".
Y ello, para tratar de "sujetar" las llamas "en algún sitio" de esta zona situada al sur de la provincia abulense, en el Valle del Tiétar, dentro de una zona muy complicada desde el punto de vista orográfico y con unas temperaturas muy elevadas, según ha explicado a los periodistas el director técnico de extinción del dispositivo gestionado por la Junta de Castilla y León, Carlos Mendiguchía.
"Todo lo que puede ir mal, está yendo mal", ha señalado de forma gráfica, respecto a la labor realizada este sábado para tratar de controlar este incendio que, según los primeros indicios, ha podido ser intencionado y puede haber arrasado, hasta el momento, en torno a 400 hectáreas, aunque no hay aún estimaciones precisas.
Este fuego, declarado de Nivel 2 en una escala de peligrosidad de 0 a 3 por la posible afección a la población, se encuentra por el momento alejado de las poblaciones de la zona.
El incendio se declaró a las 16.18 horas del viernes en este municipio del Barranco de las Cinco Villas, en la comarca abulense del Valle del Tiétar, una de las zonas más sensibles de la Comunidad desde el punto de vista medioambiental, situada a unos 70 kilómetros de la capital.