Enlaces accesibilidad

Francia reabre la frontera de Irún tras cinco horas de cierre a los camiones por un incendio

  • Las restricciones, unidas a la gran densidad de tráfico en este punto, han originado retenciones de más de seis kilómetros
  • El fuego ha afectado a la autopista A-63 y ha arrasado ya 6.800 hectáreas en la zona de las Landas

Por
Los incendios en Francia obligan a cortar el paso a los camiones en la frontera con España

La frontera de Irún con Francia ha sido reabierta para los vehículos pesados de mercancías después de que permaneciese cerrada debido al gran incendio declarado en el departamento de las Landas, que ha afectado a la autopista A-63. Sin embargo, aún quedan retenciones en ambos sentidos y no se descartan nuevos cierres. Las restricciones a los camiones, unidas a la gran densidad de tráfico en este punto, habitual en el mes de agosto, han originado retenciones de más de seis kilómetros.

Los incendios en el suroeste de Francia han obligado a las autoridades de ese país a mantener este jueves cerrados tramos de la autopista A-63, que conecta la frontera con España, en Irún. La A-63 ha estado cerrada en dirección a Burdeos a la altura de Saint Geours de Marmne, mientras que los camiones debían desviarse antes, en Biriatou.

Los vehículos han sido desviados a la A-64 para rodear la zona afectada por los incendios, que según las autoridades han arrasado ya 6.800 hectáreas en esa zona, donde trabajan más de 1.100 bomberos para tratar de detener el avance de las llamas. Los bomberos han indicado que el avance de las llamas se ha detenido ligeramente con respecto a la víspera.

La Prefectura (delegación de Gobierno) ha explicado que en las próximas horas se espera la llegada de refuerzos, pero que las condiciones climáticas son "difíciles. "La vegetación del suelo está extraordinariamente seca tras más de un mes sin lluvia. Las temperaturas se esperan de 40 grados y deben seguir así hasta el sábado, junto con la sequedad del aíre, lo que genera un severo riesgo de que se avive el fuego", señala en un comunicado.

Unas 10.000 personas han sido evacuadas en la zona por precaución, ante el riesgo de que el fuego pueda afectar zonas habitadas. La zona ya fue pasto de un gran incendio hace dos semanas, que arrasó unas 12.000 hectáreas de bosque.