Hallan restos de cuatro personas en el lugar del incendio de los depósitos de combustible en Matanzas

• Oficialmente 14 personas constan como desaparecidos en este desastre, principalmente bomberos
• El suceso ya ha sido calificado como el mayor desastre industrial en la historia de Cuba

Una imagen de los destrozos causados por el incendio de los depósitos de combustible en Matanzas, Cuba.

Los equipos especializados han encontrado este viernes restos óseos de cuatro personas, presumiblemente bomberos, en el lugar donde se produjo el grave incendio industrial de Matanzas (occidente de Cuba).

"Esta mañana siete equipos de Medicina Legal y otras especialidades afines entraron al lugar del incendio y fueron encontrados los primeros restos óseos pertenecientes a cuatro personas diferentes", ha precisado la Presidencia cubana.

La información, que cita al ministro de Salud Pública, José Angel Portal, no ofrece más detalles hasta el momento.

Oficialmente 14 personas constan como desaparecidos en este desastre, principalmente bomberos que trabajaban en la extinción de las llamas cuando se produjo un gran explosión.

Hasta el momento el Gobierno no ha dado a conocer sus identidades, pese al reclamo de activistas independientes y ONGs, quienes han afirmado que algunos eran jóvenes que hacían el servicio militar.

23 personas siguen hospitalizadas

Según el Ministerio de Salud Pública, hasta el momento se ha constatado la muerte de dos personas, bomberos de 60 y 24 años.

Asimismo, resultaron heridas 132 personas y otras 23 siguen hospitalizadas.

El mayor desastre industrial del país

El incendio se declaró el pasado viernes cuando un rayo impactó en uno de los ocho tanques del parque con una capacidad de almacenamiento cada uno de 50.000 metros cúbicos.

En los días siguientes las llamas afectaron a cuatro de estas infraestructuras, estratégicas para el país, provocando graves explosiones, con llamaradas de varias decenas de metros, y una columna de humo negro tóxico que alcanzó a La Habana, a 104 kilómetros.

Por el momento, el Gobierno cubano no ha difundido estimaciones sobre el costo económico de este suceso, calificado ya como el mayor desastre industrial del país.