Un chat de Facebook, usado como prueba en EE.UU. en una acusación de aborto: ¿son realmente privados los mensajes?
- La red social asegura que en la orden que recibieron no se mencionaba que se investigara un aborto
- En España un juez puede autorizar intervenir en comunicaciones privadas en casos de terrorismo y organización criminal
La plataforma Facebook se ha visto implicada en una acusación de aborto en Estados Unidos, después de que una orden judicial obligara a la compañía a entregar un chat privado entre las dos personas acusadas y de que este sirviera para incriminarlas.
Las dos acusadas son Jessica Burgess, de 41 años, y su hija Celeste, que en el momento tenía 17 años. Según la Fiscalía, la madre compró y dio píldoras abortivas a la adolescente y después la ayudó a enterrar el feto.
La investigación fue lanzada en abril en Nebraska, donde la interrupción voluntaria del embarazo es ilegal a partir de las 20 semanas, e incluye dos páginas de una conversación mantenida entre ambas en Facebook Messenger sobre la compra y el uso de esas pastillas.
Tras la reciente decisión del Tribunal Supremo de no considerar el aborto un derecho a nivel federal, en Estados Unidos las grandes tecnológicas están en el centro de la polémica como una posible fuente de información delatora para las mujeres. Este sería uno de los primeros casos. Meta, matriz de Facebook, se defiende diciendo que en la orden que recibieron de las autoridades no se mencionaba que se investigara un aborto.
Prueba clave de la investigación
“Una píldora frena las hormonas y luego tienes que esperar 24 horas para tomar la segunda”, le dice la madre a la joven, precisando antes que ya había recibido el encargo efectuado un mes antes.
“Acuérdate de que quememos las pruebas cuando todo esté fuera”, le contesta la hija, que poco después le expresa su alegría por poder volver a llevar pantalones vaqueros en breve. Las dos fueron imputadas en julio y se declararon “no culpables”.
Las pesquisas comenzaron después de que una mujer que dijo ser amiga de Celeste señalara a la Policía que había visto a la joven tomar la primera píldora en abril. Según el detective Ben McBride, de la Policía de Norfolk, el aborto se produjo cuando la adolescente estaba embarazada de 23 semanas, poco después de ingerir las pastillas.
Policía y Fiscalía cursaron una orden legal a la compañía para que proporcionara las conversaciones. Según NBC News, este es uno de los pocos casos conocidos en los que Facebook ha entregado información a las autoridades judiciales en un caso de aborto.
¿Sería posible en España?
En España un juez puede autorizar que se acceda a conversaciones privadas y las empresas tienen la obligación de aportarlas, pero esta intromisión en la intimidad no puede ser indiscriminada.
Solo es válida si se está investigando un delito relacionado con el terrorismo, organización criminal o, en general, si está penado con al menos tres años de prisión. En España, el aborto voluntario fuera de plazo no conlleva pena de prisión, solo multa.
“Tal cual ha pasado, en este supuesto concreto, no podría darse”, afirma la jueza y miembro de la Asociación Judicial Francisco de Vitoria, Carmen Gámiz. “En España ese delito se considera como menos grave y, por lo tanto, no estaría dentro de los supuestos que la ley permite que el juez autorice la intervención de las comunicaciones”, añade.