La lluvia da una tregua al incendio de Vall d'Ebo mientras el de Bejís avanza sin control
- Un bombero de Aragón ha resultado herido en las tareas de extinción y otro municipio ha sido desalojado
- El de la Vall d'Ebo, declarado el sábado, sigue activo tras arrasar más de 11.500 hectáreas, pero ha empezado a llover en la zona
Los incendios forestales siguen golpeando la Comunidad Valenciana, donde la situación se ha vuelto más virulenta al comienzo de este miércoles en Bejís. En la localidad castellonense las llamas han llegado a la provincia de Valencia, donde afectan a la poblaciónde Alcublas tras haber calcinado al menos 11.500 hectáreas.
Mientras, en la Vall d'Ebo (Alicante), la superficie afectada por el fuego alcanza ya las 11.500 hectáreas, pero la lluvia caída durante la tarde ha dado una tregua y ha permitido que la situación haya mejorado y los 1.500 vecinos de la localidad hayan podido volver a sus casas durante la tarde.
En ambas zonas, la lluvia que ha comenzado a caer por la tarde podría facilitar su control. Un total de 50 medios aéreos y 400 efectivos desde tierra trabajan en la extinción de ambos fuegos.
En esta autonomía, además, se ha declarado este miércoles un nuevo incendio en Petrer (Alicante), para el que se han tenido que desviar medios desde la Vall d'Ebo. El Centro de Coordinación de Emergencias ha elevado la alerta al nivel 1 y ha desalojado de forma preventiva a un campamento en el que se encontraban alojadas diez personas.
El president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha explicado, tras presidir la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integral (CECOPI) para analizar la situación, que el fuego de Bejís abarca un perímetro de 50 kilómetros, mientras que en la Vall d'Ebo llega a 80 kilómetros. Puig ha advertido de la "disrupción tremenda" de los vientos, y ha indicado que es prematuro aventurar cómo van a evolucionar, ya que hay una meteorología "muy negativa" debido al viento que cambia de manera "muy dinámica".
Sin embargo, el president también ha expresado su esperanza en que a partir de la tarde las lluvias en la zona del incendio de Bejís, como ya apuntaba la previsión meteorológica, ayuden a "iniciar a la estabilización", y ha indicado que están pendientes de si las llamas pueden afectar a la autovía Mudéjar, la A-23, por la evolución del viento, aunque de momento no hay problema.
Puig ha explicado que el cambio de viento ha complicado las labores de extinción durante la noche en Bejís y las llamas se han descontrolado y han pasado a la provincia de Valencia, a Alcubles, pero ha asegurado que aún es pronto para hablar de nuevos desalojos.
Del mismo modo, la consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo, entrevistada en La Hora de La 1 de TVE, ha dado cuenta de la "potencialidad y virulencia" de las llamas. Tanto es así que hasta ese momento se notificaban unas 4.000 hectáreas quemadas y a media tarde la cifra ha aumentado hasta casi 10.000.
Además, la consellera ha explicado que el operativo desplegado está actuando de forma prioritaria en la protección de las poblaciones y en contener el fuego en dos flancos: hacia el sur para evitar que se extienda en dirección a Valencia, y hacia la autovía a Teruel, ya que estaría afectando a zonas "de altísimo valor ecológico".
En ese sentido, el alcalde de Teresa, una de las poblaciones evacuadas en Castellón, Ernesto Pérez, ha contado en el canal 24 Horas de TVE que en la zona continúan apareciendo focos nuevos y que los cambios de viento dificultan las labores de extinción del incendio.
"El problema la zona es que el terreno escarpado, tenemos monte y río, no tenemos zonas llanas, el fuego es difícil de contener", ha explicado. "Hace 10 años tuvimos un incendio similar, ya empiezo a dudar de si este es más duro, pero en el anterior se quemó el 70% del término de Teresa y ahora creo que lo superaremos".
Hasta 30 medios aéreos intervienen para controlar este fuego en Castellón, que presenta dos focos más virulentos, en la zona del Ragudo y en la de Sacañet, municipio que ha sido evacuado de forma preventiva pasadas las dos de la pasada madrugada por un cambio en la dirección del viento. La evacuación de esta localidad se suma a las de Bejís, Torás y Teresa, mientras Viver permanece confinado. Son en total unas 1.500 personas desalojadas.
Por su parte, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha señalado, tras visitar el Puesto de Manzo Avanzado, en Viver, que cuentan con "todos los medios necesarios" para dar respuesta a la emergencia. También ha expresado su solidaridad con todas las personas afectadas y su reconocimiento a la labor del personal del sistema nacional de protección civil con más de 1.000 efectivos desplegados entre ambos incendios (brigadas forestales, bomberos, Guardia Civil, Policia Nacional, policías locales, Cruz Roja y voluntarios).
Sobre el número de personas que han tenido que dejar sus municipios por los dos incendios, Puig ha expuesto que, al tratarse de zonas de veraneo, la mayoría de los desalojados ha regresado a sus casas en otros municipios. Por ello, solo un centenar de personas han pernoctado en los albergues que ha dispuesto Cruz Roja en Alcublas, Muro de Alcoy, Pego y Viver.
Un bombero de Aragón herido en las tareas de extinción
Cuatro comunidades autónomas apoyan a la Comunidad Valenciana en las tareas de extinción con el envío allí de equipos profesionales en la lucha contra incendios: Castilla-La Mancha, Aragón, Murcia y Cataluña.
Precisamente, en Bejís, la pasada madrugada un agente de protección de la naturaleza de Aragón resultó herido y se sumó así a otros dos bomberos heridos leves en las tareas de extinción, que ya han sido dados de alta.
Como consecuencia de las llamas, otras diez personas que resultaron heridas la pasada tarde, cuatro con quemaduras (tres de gravedad), cuando decidieron huir del tren en el que iban con destino a Zaragoza, al verse sorprendidos por la cercanía de las llamas.
Según ha explicado la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, el accidente se produjo cuando la maquinista del tren vio que caía ceniza y decidió volver con el tren en la dirección de origen. Entonces, un grupo de viajeros decidió abandonar el tren, y fue alcanzado por las llamas en algún punto a la altura de Torás. Algunos de ellos regresaron al tren y otros se desplazaron a pie hasta Caudiel, donde fueron recogidos.
El presidente de la Generalitat Valenciana ha explicado en declaraciones a los medios tras presidir esta mañana la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrada (CECOPI) que Renfe ha abierto una investigación que está judicializada y que se desconocen los motivos por los que no hubo un aviso a la operadora, pero que en cualquier caso parece que la actuación de la maquinista fue la correcta.
Tras el accidente, Renfe ha establecido un plan alternativo de transporte: el trayecto entre Jérica (Castellón) y Sarrión (Teruel) de los trenes de media distancia que unen València Nord y Zaragoza-Miraflores se realiza en autobús (en principio solo este miércoles) para evitar la zona del incendio.
El incendio en la Vall d'Ebo sigue activo y arrasa 11.500 hectáreas
Mientras, en Alicante, según informa el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat, el incendio declarado en la Vall d'Ebo, que comenzó el sábado, se encuentra estabilizado, pero continúa activo en todos los frentes.
Todos los medios aéreos se han retirado, de momento, a sus correspondientes bases debido a la lluvia y el granizo que están cayendo en la zona del incendio, según ha informado el 112 de la Comunitat a las 17:41 h.
Debido al aumento de la humedad, el incendio ha avanzado en las últimas horas de forma más lenta y se espera una evolución más favorable a lo largo del día.
Con todo, el fuego ha obligado al desalojo de 1.500 vecinos de casi una decena de poblaciones: Famorca, Facheca, Tollos, Beniaia, Benimassot, construcciones de la zona de la Garrotxa, Benirrama y Beniali (Vall de Gallinera), así como diez edificios en Castell de Castells.
En las labores de extinción trabajan 30 dotaciones de los bomberos de la Diputación de Alicante, 13 unidades de los bomberos forestales y 4 Brigadas de Refuerzo de los Bomberos de Valencia, además de una veintena de medios aéreos.
Puig se ha mostrado partidario de abrir un foro de debate específico que aborde el problema de los incendios y ha asegurado que "desde luego" ve en estos fuegos unos "efectos devastadores en una dinámica que ciertamente es diferente". La Conselleria de Transición Ecológica pedirá al Ministerio del ramo una dotación "importante" y extraordinaria para las zonas afectadas para la recuperación y restauración de las más de 22.500 hectáreas calcinadas de momento entre los tres fuegos.
En Aragón, se ha desactivado la situación de emergencia y protección civil por el incendio declarado el sábado en Añón de Moncayo (Zaragoza), que continúa estabilizado, y se ha autorizado este miércoles el realojo de los cerca de diez vecinos del Santuario de la Misericordia de Borja que todavía no podían volver por falta de suministro eléctrico.
El Gobierno aragonés preveía también que este miércoles pudieran volver las personas evacuadas de la residencia de mayores de Vera de Moncayo y de un centro de acogimiento de menores en Añón de Moncayo, según apuntó ayer la directora general de Interior y Protección Civil, Carmen Sánchez. De este modo, los cerca de 1.500 desalojados de ocho municipios por el incendio que ha arrasado unas 6.000 hectáreas han podido regresar a sus domicilios.