Cancelación de festivales de música: ¿me devuelven el dinero de la entrada? ¿Qué puedo reclamar?
- Ya sea por irregularidades del organizador o problemas del artista, los usuarios tienen derecho a recuperar el dinero de la entrada
- Facua señala que las organizadoras no pueden impedir acceder al recinto con comida y bebida comprada fuera
En verano, numerosos festivales de música se reparten por toda la geografía española. Sin embargo, recientemente ha habido cancelaciones de última hora, como las ocurridas en el Madrid Puro Reggaetón y el Diversity València Festival, que estropean los planes de muchos usuarios que, en ocasiones, ya habían pagado vuelos y reservado hoteles. En este escenario, miles de personas aún están esperando a que les devuelvan el importe de sus entradas.
Los consumidores tienen derecho a un reembolso de sus entradas, así como los costes de alojamiento y viajes. Además, hay actuaciones que también son ilegales, como la prohibición de entrar con comida y bebida comprada en el exterior, según indica Facua en un documento con las 10 principales irregularidades cometidas en estos eventos. Consultamos con los expertos cuáles son los derechos de los consumidores en estas situaciones.
¿Qué puedo reclamar si se cancela el evento por una mala gestión?
Uno de los principales motivos de cancelación es que la administración competente no otorgue los permisos porque la empresa no ha acreditado las medidas de seguridad necesarias. A esto se suman los accidentes o enfermedades de los artistas que les impiden participar.
Ya sea por las irregularidades del organizador o por problemas de los artistas, los usuarios tienen derecho a recuperar el importe de las entradas, tanto si la cancelación es definitiva como si se anuncian nuevas fechas, ya que supone una modificación sustancial en las condiciones del contrato. En este caso, los afectados también pueden reclamar los daños y perjuicios derivados de la cancelación.
Además, si el evento se suspende con solo unas horas de antelación, de manera que los afectados ya estuvieran en la ciudad donde se iba a celebrar el evento porque habían viajado a con la finalidad principal de acudir a él, además del pago del transporte y el alojamiento, también pueden exigir el de la comida durante su estancia.
¿Cómo hacer el trámite?
La organizadora es quien tiene la obligación de devolver la entrada, por lo que lo primero es contactar con la empresa por teléfono, email o a través de sus páginas oficiales para comenzar el trámite. Desde la OCU también recomiendan contactar con el intermediario, así como acudir a organismos de consumo. Si no se consigue nada por estas vías, queda la opción de los juzgados.
No pueden establecer plazo máximo para reclamar
Facua recuerda que no pueden limitar el plazo para devolver el dinero. Las distintas leyes autonómicas de espectáculos públicos plantean plazos para devolver el importe de las entradas cuando los eventos se cancelan, pero no establecen el plazo máximo que tienen los usuarios para reclamar. Hay empresas que fijan plazos muy reducidos, como ha ocurrido con el Madrid Puro Reggaeton Festival y el Dream Summer Fest de Talavera la Real.
Tampoco pueden impedir pagos en efectivo, según Facua. "El truco de imponer que las compras en los recintos de los festivales se realicen exclusivamente mediante una pulserita cashless que previamente hay que adquirir y cargar con dinero es una práctica ilegal", según la entidad. Estas pulseras son el único método de pago para poder comprar comida y bebida en algunos festivales, "una práctica contraria a la normativa de consumo, que obliga a los empresarios a aceptar siempre el efectivo como medio de pago", señalan desde la OCU.
Cambios de ubicación
Un aspecto principal es el cambio de ubicación sin derecho a reembolso. Tras vender un determinado número de entradas para la celebración del evento en un recinto, hay organizadores que deciden trasladarlo a otro.
En todos los casos, el usuario tiene derecho a recuperar el dinero de la entrada si no le gusta o le causa problemas desplazarse al nuevo lugar. Esto ha ocurrido, por ejemplo, en el finalmente cancelado Madrid Puro Reggaeton Festival, anunciado inicialmente en la Caja Mágica y después en el Wanda Metropolitano, que tiene casi seis veces más aforo.
Si termina antes de lo previsto, también se puede exigir reembolso
Desde Facua recuerdan que si el evento finaliza antes de lo previsto, los espectadores pueden exigir el reembolso de una parte del importe de las entradas. De extraordinaria gravedad ha sido el caso del Medusa Festival, que se iba a celebrar en Cullera. En el caso de que el evento se celebre, si la empresa ha puesto en riesgo la seguridad de los usuarios vendiendo un número de entradas superior al aforo máximo permitido, también puede haber reclamaciones.
Según Facua, en estos casos, las consecuencias no solo pueden ser las debidas sanciones por parte de la administración, sino la reclamación del reembolso de una parte o la totalidad del importe, en función de la gravedad de los hechos.
¿Y si son los artistas quienes suspenden el evento?
Si los artistas suspenden actuaciones sin compensar a los afectados, sus fans tienen derecho a reclamar la devolución del importe de las entradas con el argumento de que ya no les interesa asistir, además de una indemnización por los perjuicios económicos al no poder recuperar el dinero gastado en transporte y hoteles que ya no van a aprovechar. También pueden plantear a la empresa el reembolso de una parte del precio.
Compensaciones por no dejar introducir comida y bebida en el recinto
Según Facua, no permitir la entrada con comida ni bebida es la irregularidad más frecuente con la que las organizadoras pretenden apropiarse de la misma potestad que tienen bares y restaurantes. Esto "es una trampa, un fraude, porque provoca que la gente tenga que gastar muchísimo dinero", explica a La Hora de La 1 Rubén Sánchez, secretario general y portavoz de la organización.
Como la hostelería no es su actividad principal y no son bares ni restaurantes, "no pueden impedir que los usuarios acudan a estos eventos habiendo comprado comida y bebida fuera del recinto", señala la organización. Esto resulta contrario a la legislación en materia de espectáculos públicos y los afectados pueden reclamar que se les compense el gasto que tengan que realizar en los recintos tras no dejarles entrar con los productos que traían consigo.
Sánchez explica que, aunque en el momento no podemos hacer nada porque no podemos forzar la entrada, sí se puede denunciar el abuso para que interpongan una multa a la organizadora. Además, también exigir una compensación del dinero que los usuarios se ven obligados a gastar dentro del recinto porque no les han dejado entrar con su comida y bebida. Por ello, recomienda conservar los tickets porque podrían reclamar la devolución de todos esos importes.
Facua ha presentado varias denuncias contra los organizadores del Festival Interestelar, celebrado el 25 de julio, y el concierto de Red Hot Chili Peppers, que tuvo lugar el 4 de junio. En ambos casos, las sanciones anunciadas son de 12.000 euros, "muy por debajo del tope de 30.000 previsto en la ley andaluza de espectáculos públicos".
La organización también ha puesto denuncias contra organizadores de una veintena de festivales, entre ellos, el Reggaeton Beach Festival, por no dejar acceder con comida ni bebida. Otros de los eventos fueron el Marenostrum de Fuengirola, el Canela Party de Torremolinos y Puro Latino Fest de El Puerto de Santa María, entre otros.
Compensación por saturación en las colas de entrada al recinto
En cuanto a la saturación en las colas, la inexistencia de una operativa en condiciones para garantizar que no se provoquen tapones en los accesos al recinto puede derivar en que muchos se pierdan parte del comienzo del evento. Por esto podría reclamarse la devolución de una parte del importe de la entrada.
Esto ocurrió en el concierto de Marc Anthony en Madrid el 21 de junio, donde hubo quienes entraron con hasta una hora de retraso.