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Lo que el COVID cambió: del rastreo de las aguas residuales a las nuevas estadísticas de mortalidad

  • Los pacientes de COVID persistente piden que se invierta más dinero en investigar su enfermedad y un mínimo de empatía
  • Las aguas residuales aportan datos sobre infecciones y posibles epidemias incluso antes de que afloren en análisis clínicos

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Informe Semanal - Covid, fin del principio

Hay que meterse en los colectores para saber algunas cosas de la salud de una población. Las aguas residuales aportan datos incluso antes de que afloren en análisis clínicos. En Valencia ya lo estaban haciendo antes de que empezara la pandemia de COVID. Pero fue entonces cuando aprovecharon su gran potencial.

Un equipo de Informe Semanal graba como toman muestras en el colector de aguas residuales de Valencia.

Un equipo de Informe Semanal graba como toman muestras en el colector de aguas residuales de Valencia. RTVE

Tanto los sintomáticos como los asintomáticos excretan el virus desde el primer día de infección

"Tanto los sintomáticos como los asintomáticos excretan el virus desde el primer día de infección. En eso consiste realmente el adelanto", explica a Informe Semanal el epidemiólogo Raimundo Seguí, de Global Omnium Grupo de Aguas de Valencia. "Tú, el día que estás tomando la muestra, estás monitorizando una cantidad de infecciones que de llegar a ser constatados por el sistema sanitario, lo van a hacer varios días después", asegura el experto.

En Global Omnium supieron con antelación de la gravedad de la tercera ola, después del puente de octubre de 2020, de las fiestas supercontagiadoras en los colegios mayores y de las residencias con riesgo altísimo. Y no sólo COVID. El campo a explorar es muy amplio. "Somos la primera ciudad de España que está analizando ya el virus de la viruela", dice Seguí refiriéndose a Valencia y a la búsqueda de la viruela del mono en las aguas residuales de la ciudad.

El análisis de aguas residuales, clave para detectar coronavirus

"El futuro a corto medio plazo pasa por secuenciar absolutamente todo lo que esté circulando por una muestra de agua residual y poder servir de alerta, precisamente como hemos vivido con el SARS Cov 2", adelanta el epidemiólogo. Las aguas residuales serán las que digan cuándo acabará esta pandemia, si es que eso llegara a ocurrir. Pero también nos hablan de otras amenazas.

El caso de la peluquera

Pueden analizar las aguas de toda la ciudad o las de un edificio. Eso les permitió descubrir el caso de la peluquera. Tenían varias residencias que un día daban resultados positivos y al día siguiente negativos. Un misterio hasta que averiguaron que era la peluquera. Una mujer contagiada y asintomática que iba dejando su rastro por todas las residencias en las que iba a trabajar. La empresa de aguas de Valencia pudo hacer todo esto gracias a las investigaciones previas del Instituto de Tecnología de los Alimentos y a su colaboración.

Gloria Sánchez es la primera persona en España que estudió el virus del COVID en aguas residuales. Dirigía un pequeño equipo de investigación en el Instituto de Tecnología de los Alimentos del CSIC, en Valencia. Llevaban años analizando en aguas residuales virus que se transmitían a través de los alimentos. Y cuando estalló la pandemia aplicaron el método al COVID.

Esta pandemia ha permitido esa interacción entre los grupos de investigación, las entidades públicas y las empresas

"Yo creo que esta pandemia ha permitido algo que a veces cuesta mucho y es esa interacción entre los grupos de investigación y las entidades públicas y las empresas. Es un claro ejemplo de colaboración y que yo espero que haya venido para quedarse", declara la investigadora a RTVE. Lo cierto es que este sistema se ha extendido y ahora existe una red de laboratorios por todo el país. El foco puesto ya en otra amenaza.

Sánchez explica que "en todo lo que es el tema de genes, de resistencia al antibiótico que se habla que será la próxima a pandemia, las aguas residuales te dan una información de lo que está pasando en la población: qué antibióticos o qué resistencias a antibióticos son las más mayoritarias, y esto te permite, a nivel clínico, poder cambiar los usos de antibióticos que se estén utilizando".

Siete olas y el final del principio

Pero antes de ocuparnos de la próxima pandemia, habrá que mirar el estado de esta en la que todavía nos encontramos. Hemos atravesado siete olas, y de la última estamos saliendo. Todos los indicadores están bajando. "Estamos en el final del principio de la pandemia ahora vamos a entrar en otra dinámica esta pandemia de grandes oleadas con hospitales llenos se va a tranquilizar mucho", dice a Informe Semanal el epidemiólogo del Centro de Investigación Fisabio, Salvador Peiró.

Ni siquiera hospitales situados en zonas turísticas se han visto desbordados en la última ola

"Ni siquiera hospitales situados en zonas turísticas, como el de Torrevieja, en Alicante, se han visto desbordados en la última ola. Lo que nos permite afrontar el futuro con más tranquilidad es la menor letalidad de la variante dominante y las vacunas. A partir de septiembre, se extenderá la cuarta dosis y podría haber una quinta", apunta Vicente García Román, Jefe de Medicina Preventiva en el Hospital de Torrevieja.

"Parece que la pandemia va a seguir al menos un valor residual y por tanto, no es descabellado pensar que esa quinta dosis o que dosis adicionales vendrán en el futuro", asegura García Román. Un objetivo inmediato es aumentar la tasa de vacunación en la población pediátrica y completar la pauta del 15 % de la población.

Todo hace prever que las bivalentes estarán a partir de finales de septiembre o principios de octubre. Y son necesarias porque es un virus respiratorio que muta. E igual que pasa con la vacunación antigripal, que todos los años se modifica la composición vacunal, estaremos ante un escenario muy similar al que al que vivimos con la campaña antigripal.

Cambio estadístico de mortalidad

El número de muertos que nos deja la COVID a estas alturas solo podemos estimarlo. La cifra oficial a 26 de agosto de 2022 es de 112.454 muertos. "Tras la COVID hay incremento de mortalidad por diversas causas, fundamentalmente cardiovascular, infartos, ictus, trombosis...", recuerda el epidemiólogo Salvador Peiró.

Son los muertos indirectos de la pandemia. Pacientes con dolencias graves que no pudieron ser atendidos en el momento. Enfermos crónicos a los que no se mantuvo el seguimiento, que han empeorado y muerto de forma prematura.

Hubo un aumento de mortalidad porque por la presión asistencial sanitaria no pudieron ser atendidas

La catedrática de Salud Pública, María Teresa Ruiz Cantero, explica a Informe Semanal que "esto está bastante reconocido" y que además del aumento de la mortalidad por COVID, lo que hubo es un "aumento de mortalidad por enfermedades letales, que por la presión asistencial sanitaria no pudieron ser atendidas". O bien porque los sujetos no fueron los pacientes a demandar atención sanitaria, o bien porque por la presión que conocimos y que no pudieron ser atendidos a tiempo.

Un estudio reciente de la Sociedad Española de Salud Pública avisaba de que no se habían alcanzado los niveles de atención anteriores a la pandemia. A todo esto se ha unido el calor. En los primeros siete meses del año, el sistema de vigilancia de la mortalidad que utiliza el Instituto de Salud Carlos III, MoMo, ha estimado un exceso de defunciones superior a todo el registrado el año pasado.

Calor y COVID, posibles causas del aumento de la mortalidad

"Hasta ahora llevamos un exceso de mortalidad algo mayor de 29.000 defunciones, que ha sido mayor de todo el que se dio en 2021. Lo primero que tenemos que decir es que la mortalidad por COVID ha disminuido muchísimo desde el 2021 a 2022", apunta Amparo Larrauri, de la Unidad de Vigilancia par la Gripe y Otros Virus.

Por tanto, se han buscado las causas en el calor extremo que hemos tenido este verano. Pero el modelo que utiliza el instituto atribuye a las altas temperaturas solo el 20 % de ese exceso. Por eso estudian cambiar el sistema de tal forma que pudiera recoger de un modo más preciso esa "mortalidad indirecta que sin duda alguna está produciendo esta ola de calor y que potencialmente podría estar relacionada con aspectos sociales y sociosanitarios que tienen que ver con un acceso más difícil a recursos energéticos o sanitarios", explica Larrauri.

Este año batiremos récord. Hemos tenido el julio más cálido y el año será el de mayor exceso de mortalidad por altas temperaturas. Más incluso que el 2003, el año de la gran ola de calor que dio origen a este sistema de estimación de defunciones. "Sus hallazgos podrán ser muy relevantes en salud pública, por ejemplo, para establecer medidas de prevención o determinados cambios en los sistemas sanitarios o incluso en la planificación de recursos sanitarios", aeguran desde la Unidad de Vigilancia de la Gripe y Otros Virus.

Investigación y atención al COVID persistente

En Barcelona se creó la primera asociación de afectadas por COVID persistente. Silvia y Lara estaban en el grupo fundador. Han vivido un calvario, que todavía no tiene fin. Nadie les creía. El sistema achacaba todo a la ansiedad y pretendía resolverlo con ansiolíticos. Para Silvia "es muy importante la perspectiva de género en el colectivo de los enfermos de COVID persistente, porque la mayoría de personas afectadas son mujeres".

Entrevista con miembros de la asociación de COVID persistente

Un momento de la entrevista con miembros de la asociación de COVID persistente para Informe Semanal. RTVE

El acompañamiento a las personas con COVID persistente tiene que ser desde la primaria

Silvia y Lara explican a sanitarios que están investigando el tema cuáles son sus demandas: "un acompañamiento desde la primaria. Si hay que derivar a una especialización por alguna patología concreta derivada de la COVID persistente, de acuerdo, pero el acompañamiento tiene que ser desde la primaria", dice Lara.

Silvia ha estado 18 meses de baja. Le hacen el seguimiento en la unidad especial de COVID persistente del hospital Can Ruti, la primera que se creó en Barcelona. Su experiencia con el sistema sanitario no es muy alentadora: "Sí, me he sentido abandonada y maltratada por la comunidad médica. No por todo el mundo, pero sí que nos hemos sentido maltratados y abandonados. Ha estigmatizado a las mujeres, sobre todo por el hecho de ser mujeres y tener una enfermedad nueva que nadie conoce".

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Los pacientes piden que se invierta más dinero en investigar su enfermedad. Y más empatía. "Porque de momento no hay cura, pero hay muchas enfermedades incurables que reciben acompañamiento y nosotros recibimos incredulidad o falta de empatía", recalca Lara. "Necesitamos este acompañamiento y evidentemente que se investigue porque la pandemia no ha terminado, porque han terminado los casos graves, las muertes, afortunadamente. Pero hay una segunda pandemia de miles y miles de personas que estamos incapacitadas", reclama esta persona con COVID persistente.

Mujer y COVID persistente

Un estudio, dirigido por el Instituto de Salud Carlos III, ha concluido su primera fase con una definición y una relación de síntomas. Una de las autoras de este estudio sobre COVID persistente es Vicky Serra, que recita cuáles son algunos de ellos: "Los más frecuentes en este estudio, y en consonancia con la mayoría de estudios publicados, son los sistémicos, es decir, tener fatiga. O los neurocognitivos, como por ejemplo el concepto de niebla mental o falta de concentración. Y los respiratorios: tener problemas para respirar. Hay otros como los neuromusculares, es decir, tener fatiga muscular; los cardiorrespiratorios y también neurológicos y psicológicos, por ejemplo, la ansiedad". La investigadora recuerda que "a partir de tres meses podría considerarse COVID persistente".

El COVID persistente cuenta ya con una definición oficial en España

Ser mujer es un factor de riesgo para sufrir COVID persistente. Sobre COVID y género sabemos esto y poco más, porque a estas cuestiones no se les ha prestado mucha atención. Los datos indican mayor tasa de mortalidad en hombres, lo que resulta poco creíble para algunas investigadoras del tema.

Ha habido muertes fuera de los hospitales y han sido con mayor frecuencia de mujeres

Para la catedrática de Salud Pública, María Teresa Ruiz Cantero. "o bien no tenemos buenas estadísticas sanitarias, o bien las muertes que están recogidas son las que han sido en los hospitales. Sin embargo, ha habido muertes fuera de los hospitales. Que han sido con mayor frecuencia de mujeres, dado que ellas han sido ingresadas menos que los hombres".

Atención primaria y seguros privados

El sistema sanitario ha acabado maltrecho, especialmente la atención primaria. Con poco personal, pocos recursos y menos accesible para los pacientes. La gerente de salud de Torrevieja, Pilar Santos Fuster, explica que aproximarse a los pacientes con enfermedades crónicas y volver a desarrollar los programas de salud previos a la pandemia "es uno de los grandes retos" que tienen que afrontar. Aunque el más importante es "volver a ser accesibles".

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Mucha gente cree que es más fácil ir a urgencias que ir a atención primaria y probablemente en este momento sea verdad

El epidemiólogo Salvador Peiró constata que "mucha gente cree que es más fácil ir a urgencias que ir a atención primaria y probablemente en este momento sea verdad". Y vaticina que "es un problema importante en España que esta dando pie a que la gente se vaya buscando seguros privados".

Siempre estuvo claro que algo tan tremendo como la pandemia de COVID nos iba a cambiar. Algunas novedades ya las estamos viendo. Pero muchas cosas dependerán de lo que quiera y decida la gente.