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Ahorro de energía: una obligación económica que beneficia al planeta

  • Los expertos señalan que el ahorro de energía supone una ventaja en los aspectos económicos, climáticos, de salud y de contaminación
  • Una parte muy importante de los planes de ahorro de energía tiene que ver con las ciudades y su diseño

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Informe Semanal - Energía, ahorrar para el invierno

Antes de que Rusia decidiera invadir Ucrania el pasado 24 de febrero, la Unión Europea se hallaba inmersa en el debate sobre un uso eficiente de la energía. Los tres ejes del debate estaban en la descarbonización para luchar contra el cambio climático, la transición con la vista puesta en el agotamiento de los yacimientos de combustibles fósiles y la obtención de la independencia energética a través de las fuentes renovables. La guerra en Ucrania añadió un elemento coyuntural y Bruselas comenzó a planificar el invierno a través del ahorro en el consumo de energía, principalmente del gas.

Luces en Europa vistas desde el espacio

Bruselas ha comenzado a planificar el invierno a través del ahorro en el consumo de energía. INFORME SEMANAL

Ahorrar energía siempre supone una ventaja en todos los aspectos: económicos, climáticos, de salud, de contaminación...

“Ahorrar energía siempre supone una ventaja en todos los aspectos que se puedan valorar, tanto económicos, climáticos, de salud, de contaminación”, afirma Eloy Sanz, Doctor en Ingeniería Química, investigador en Energías Renovables y Profesor titular de la Universidad Rey Juan Carlos. “Estamos en una coyuntura especial ahora, con esta invasión de Rusia, en la que necesitamos reducir el consumo de gas natural. Pero aparte tenemos una emergencia climática que se viene avisando desde hace por lo menos tres décadas, en la que nos dicen que no solo hay que reducir este gas fósil, sino todo el resto de combustibles fósiles”, explica Sanz.

Un plan de contingencia más amplio

Por su parte, Emilio Santiago Muiño, Científico del CSIC en el Departamento de Antropología, añade: “Si dejamos de lado las distorsiones que introduce en el mercado más generalista el precio de la energía, que es un problema estructural pero fácilmente solucionable con una reforma del mercado eléctrico, tenemos, por un lado, el agotamiento de los mejores yacimientos de combustibles fósiles y, por otro lado, los imperativos de descarbonización que impone la crisis climática”.

Teníamos que actuar ya. Pero estamos trabajando en un plan un poco más amplio

En España, todos los expertos coinciden en que las medidas de ahorro energético incluidas en el Decreto aprobado por el gobierno a principios de agosto, son insuficientes para alcanzar el 7 % de disminución en el consumo de gas solicitado por la Unión Europea. Según Joan Groizard, Director General del Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDEA), dependiente del Ministerio de Transición Ecológica, el plan que se ha aprobado y convalidado en el Congreso de los Diputados.

Son unas primerísimas medidas. Eran importantes y eran urgentes porque Europa nos obliga a ahorrar energía desde el pasado 1 de agosto. Por lo tanto, teníamos que actuar ya. Pero estamos trabajando en un plan un poco más amplio”. Un plan denominado de Contingencia que será presentado a Europa el próximo 9 de septiembre durante la reunión del Consejo de Ministros de la UE. Para ello, según nos asegura Groizard, Transición Ecológica ha solicitado a sectores económicos, partidos políticos y comunidades autónomas “propuestas concretas para configurar un plan de contingencia más amplio”.

Las medidas incluidas en el Decreto, y rechazadas por la oposición, incluyen limitaciones en las temperaturas de los edificios públicos y comercios, reducción de la iluminación de los escaparates, e incentivos al uso del transporte público. Con la política energética en el centro del debate, el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, respondió a la petición que le hizo el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, solicitando comparecer a petición propia en el Senado el martes 6 de septiembre. Y ya adelantó una medida que también le habían solicitado desde la oposición: la bajada del IVA del gas desde el 21 al 5 %.

El suministro de gas, garantizado para este invierno

Un gas cuyo suministro, en cualquier caso, está garantizado para el próximo invierno. Así lo afirma Arturo Gonzalo, Consejero delegado de Enagás: “El nivel de llenado de los almacenamientos subterráneos en España actualmente es ya del 85 %, esto es aproximadamente cinco puntos por encima de la media europea. Pero es que además, España tiene el 44 % de la capacidad de almacenamiento de gas licuado en tanques de toda Europa y el nivel de llenado de nuestros tanques es también del 80 %. Además, tenemos una gran capacidad de seguir abasteciendo porque con nuestra infraestructura de plantas de gasificación podemos importar gas desde prácticamente cualquier lugar del mundo”.

El suministro de gas para España no peligra debido a la guerra en Ucrania

A todo esto, desde Bruselas llegaba la semana pasada una importante novedad. La Comisión Europea se abría por primera vez, y tras resistirse durante meses, a intervenir el mercado de la electricidad, debido al aumento vertiginoso de unos precios disparados por culpa del gas. Unos precios que, de hecho, impulsan la disminución del consumo doméstico y que suponen un grave problema para la industria, abriendo, además, el debate sobre el ahorro forzado.

Sala de control de Enagás

El almacenamientos subterráneo de gas en España actualmente es del 85 %. INFORME SEMANAL

“El mercado puede conseguir perfectamente, aumentando los precios, que se reduzca la demanda y ya lo estamos viendo -afirma Eloy Sanz-. La pregunta es si es deseable que en una casa se pase frío o que una empresa tenga que cerrar porque no puede pagar los precios del combustible. Obviamente esto no es deseable”.

Efectos de la subida de precios

Desde la administración, Joan Groizard asegura que son conscientes pero “la cuestión es si entendemos que un país, un estado de bienestar, lo que tiene que hacer es que esas señales de precios no sean a costa de los más vulnerables”. Para él, las señales del mercado pueden ayudar a tomar conciencia en el uso de los recursos, pero son necesarias las ayudas públicas para que “no se conviertan en que a su vez expulsamos y generamos problemas de confort, de bienestar, incluso de salud en algunos casos”.

Alemania o Francia van a estar quemando mucho carbón, van a estar quemando fuel, van a estar haciendo cosas que no querríamos

La crisis coyuntural abierta por la guerra ha hecho que algunos países vuelvan su mirada hacia fuentes de energía que, siguiendo los planes de la Unión Europea, se estaban abandonando. “Una situación urgente en la que, por ejemplo, Alemania o Francia van a estar quemando mucho carbón, van a estar quemando fuel, van a estar haciendo cosas que no querríamos que estuvieran haciendo” dice Eloy Sanz, “lo urgente es tener las casas calientes este invierno y el siguiente. Esto no nos debe despistar de lo importante. Lo importante es ese objetivo final. Es ir a una situación en la que lleguemos a ese 100 % renovable”.

Y es que las energías renovables se presentan como la solución a todos los problemas, ya sean coyunturales como la guerra, o estructurales como el cambio climático y el agotamiento de los combustibles fósiles. España es el país europeo con mayor recurso solar y cuenta con una avanzada industria en el sector de las energías renovables.

La producción eólica representa un 25 % del total de electricidad que se genera en España - Ver ahora

Ahora mismo los objetivos que tenemos es de un 74 % de renovables en el sistema eléctrico en 2030 en nuestro país y llegar al 100 % antes del año 2050

Por eso, según Joan Groizard, exporta más tecnología fotovoltaica que vino. “Aparte de ser viables técnicamente, aparte de ser la forma más barata, es que además generan empleo local. Por lo tanto, la foto es clarísima, la apuesta es clarísima. Ahora mismo los objetivos que tenemos es de un 74 % de renovables en el sistema eléctrico en 2030 en nuestro país y llegar al 100 % antes del año 2050. Pero con lo que estamos viendo, seguramente podamos adelantar esos objetivos”.

Y entre esos objetivos, tendrá también su papel el hidrógeno, tal y como señala Arturo Gonzalo, CEO de Enagás: “Estamos planteando, como es sabido, nuevas interconexiones por gasoducto con Francia o con Italia, que van a permitirnos transportar más gas hacia Europa en estos próximos años, pero que serán ya una infraestructura decisiva para transportar hidrógeno renovable en el entorno del año 2030”.

Emergencia climática

El cambio climático pone en peligro las bases mismas de nuestra civilización

Para la ciencia, sin embargo, conseguir los objetivos de la transición ecológica no sólo depende del desarrollo de las energías renovables. “Todos los modelos de descarbonización para enfrentar la emergencia climática, -asegura Emilio Santiago- además de la sustitución de los combustibles fósiles por renovables, incluyen importantes reducciones en el consumo de energía. Sin esto, no logramos cuadrar las cuentas climáticas. Y esto es fundamental porque el cambio climático pone en peligro las bases mismas de nuestra civilización.

En España, en este verano terrible, hemos comprobado que con solo una subida de temperatura de 1,1 grados, pues hemos conocido incendios devastadores, afecciones a las cosechas, un problema de salud pública tremendo por las olas de calor. Y de no poner remedio, todo esto solo irá a más”.

Según datos de Naciones Unidas las ciudades producen el 70 % de las emisiones contaminantes, y consumen el 78 % de los recursos de la Tierra ocupando sólo un 2 % de la superficie del planeta. Además, sólo en la Unión Europea, más de un tercio de los edificios se construyeron hace más de medio siglo y tres de cada cuatro son ineficientes desde el punto de vista energético. Así pues, los planes de reducción en el consumo de energía mediante un uso más eficiente de la misma implican, entre otras cosas, volver la mirada hacia el desarrollo urbanístico.

Arquitectura y urbanismo eficientes y sostenibles

Alfonso Vegara, arquitecto y urbanista, es el Presidente de la Fundación Metrópolis. En ella están diseñando, con criterios medioambientales, una ciudad nueva llamada Lampa y situada a diez kilómetros de Santiago de Chile. También participan en el diseño de la nueva capital de Indonesia que sustituirá a Yakarta. “Hoy día vivimos en un mundo de ciudades y las ciudades son, no solo el problema, sino son las soluciones”, explica Vegara.

Si somos capaces de hacer arquitectura sensible con la naturaleza, podemos reducir una parte significativa del consumo energético

“Si somos capaces de hacer arquitectura bioclimática, arquitectura sensible con la naturaleza, podemos reducir una parte significativa del consumo energético. Y si organizamos mucho mejor el tema del transporte, una mayor proporción de transporte público y de transporte sostenible, pues también habremos contribuido mucho. Dentro de la ciudad la arquitectura y los temas de movilidad son fundamentales en materia de consumo energético y en materia de sostenibilidad", apunta el urbanista.

En 1998 Alfonso Vegara participó en el diseño de la primera “ecociudad” fundada en España. Sarriguren, muy cerca de Pamplona, fue un proyecto impulsado por la Comunidad Foral de Navarra que, desde el principio, se fijó objetivos que entonces eran absolutamente innovadores y que hoy se han incorporado a las normativas urbanísticas por todo el país. Ángel Ibáñez fue uno de los arquitectos que llevaron el proyecto al terreno, y recuerda cómo se creó lo que él llamó una “matriz climática”. Una serie de criterios para la concesión de los terrenos a las promotoras urbanísticas.

El Gobierno de Navarra no vendió los terrenos al que pagaba más sino al que mejor respondía a la idea de matriz bioclimática

“La idea era que se pudiera valorar conjuntamente en esa matriz todos esos componentes: el ahorro energético, las energías renovables y un tipo de construcción sana” -nos dice Ibáñez- . “Y entonces, el Gobierno de Navarra no vendió los terrenos al que pagaba más, los adjudicó a aquel que mejor respondía a la idea de esa matriz bioclimática”, apunta este arquitecto pionero.

Sarriguren, la "ecociudad" que cumple veinte años

Sobre el terreno, Sarriguren hoy aparece como un barrio más, con problemas de movilidad e infraestructuras que han envejecido, tal y como transmiten en sus quejas algunos de sus vecinos. Pero la mayoría, sin embargo, creen que habitar una ciudad nacida con las sostenibilidad como bandera les ha ayudado a ser más conscientes de las causas que nos obligan al ahorro energético.

Vivimos un cambio climático antropogénico y potencialmente catastrófico

Más allá de la localidad navarra, Emilio Santiago afirma que “todas las encuestas vienen a decir que la población ya es consciente de que vivimos un cambio climático antropogénico y potencialmente catastrófico. Y lo que hace falta son políticas que faciliten los cambios. Es decir, a veces el cambio se bloquea no porque falte conciencia sobre la necesidad del cambio, sino porque faltan herramientas que permitan compatibilizar ese cambio con vidas. Y ahí es el terreno de la política”.

Alejandro Caballero entrevista a un vecino de Sarriguren

Sarriguren, cerca de Pamplona, es una ciudad nacida con la sostenibilidad como bandera. INFORME SEMANAL

Desde la administración Joan Groizard, coincide en que el diseño de las ciudades tiene un gran impacto sobre cómo se consume la energía: “si hablamos de ciudades, pues el modelo de la ciudad de los 15 minutos, ese concepto por el cual tú diseñas la ciudad para que todo esté a una distancia caminable, o tienes un sistema de transporte público regular, fiable, que te permite no usar el transporte privado en tu día a día. Si tienes unos edificios bien aislados, bien construidos, si tienes generación renovable a mano. Con todo eso, tienes un sistema que consume menos energía y donde probablemente no es que vivas igual, vives mejor, vives en una ciudad más tranquila, edificios con más confort, con menos humedades. Por lo tanto, la calidad de vida yo no creo que tenga que venir sacrificada por ese ahorro energético”.

La crisis que está sufriendo el planeta es una falta de diálogo entre el hombre y la naturaleza

Tras más de dos décadas de vida, Sarriguren muestra un camino que no sólo contribuye al ahorro de energía, también nos enseña una forma de vida más respetuosa con el medio ambiente. Y es que, concluye Alfonso Vegara, “la crisis que está sufriendo el planeta es una falta de diálogo entre el hombre y la naturaleza. Esa es una gran aspiración. Y cuando se producen diálogos satisfactorios, encontramos entornos urbanos..., a veces en el mundo rural e incluso a veces en el mundo urbano..., entornos mágicos”.