Madrid - Londres, un vuelo teñido de luto: "Estoy muy triste. Isabel II era la reina de todos"
- Los ciudadanos que vuelven se emocionan al imaginar un país sin su reina
- Los turistas ven como una oportunidad viajar a Londres en un momento histórico, aunque temen que el luto afecte a su viaje
- Directo: última hora sobre la muerte de la reina | Especial: Muere Isabel II
Amanece en Madrid, y el ajetreado aeropuerto de Barajas-Adolfo Suárez empieza a recibir a los viajeros que salen o llegan a la capital. En uno de los primeros trayectos con destino a Londres viajan más de 350 personas, que vuelan a un país que anoche conocía la muerte de la reina Isabel II.
Cada viajero tiene su propia historia: aquellos que van por primera vez a Reino Unido, los que llegan al aeropuerto de Heathrow de paso para ir a su hogar, los que comienzan una nueva vida en Londres o los que vuelven de vacaciones. También hay periodistas que van a cubrir un acontecimiento histórico para Reino Unido y el mundo. El cansancio se percibe en la puerta de embarque -la mayoría ha tenido que madrugar mucho para llegar al vuelo o llevan ya varias horas de avión-, pero también tensión y nervios. Llegan a un país que en tan solo un día ha cambiado por completo y algunos incluso se emocionan solo de pensar en la muerte de Isabel II, la reina más longeva de su historia.
"Estoy muy triste. Considero a Reino Unido mi país. Era mi reina", asegura a RTVE.es entre lágrimas Santi, un portugués que vuelve a Londres, donde ha estado trabajando durante cinco años, después de visitar a su familia. La mera idea de la muerte de la reina inunda sus ojos de lágrimas. "No me preguntes por eso", pide con la voz entrecortada, mientras se levanta para evitar más preguntas.
El regreso a un país totalmente cambiado
Hannah, una joven de 24 años, viajó hace ocho días a Marruecos de vacaciones. Cuando salió de su casa, Reino Unido continuaba con Boris Johnson en el número 10 de Downing Street e Isabel II como reina en su residencia vacacional en el castillo de Balmoral, en Escocia.
Pasada poco más de una semana, después de haber disfrutado de sus vacaciones, Hannah regresa a un país totalmente cambiado. Ahora hay una primera ministra, Liz Truss, y ya no hay reina, sino rey, Carlos III.
"Siento que han pasado muchas cosas desde que me fui de vacaciones. Vuelvo y ahora todo ha cambiado", asegura la joven británica. "Habrá muchos cambios. Van a cambiar todos los billetes en los que aparece la reina y va a ser chocante tener a Carlos", admite Hannah, quien señala que le resulta "un poco raro" decir "larga vida al rey", en lugar de "larga vida a la reina". "Nos estamos acostumbrando y todavía hay mucha gente que se confunde", puntualiza entre risas.
Para Hannah, su país atraviesa estos días "un momento agridulce". Le asusta, además, la muerte de la reina: "Ha pasado todo muy rápido", dice. "Siento que es chocante porque era de la familia real y nadie se espera que algo así llegue a pasar porque ha sido nuestra reina durante 70 años", detalla.
En el mismo vuelo viajan Bocar, un senegalés que acude por primera vez a Londres para reunirse con su mujer. Cree que Isabel II "no solo era la reina de Reino Unido, sino la reina de todos". "Le deseo todo lo mejor", dice el senegalés con las pocas palabras que conoce en inglés. Confía en que con la muerte de la monarca británica habrá cambios "en los próximos meses o en el próximo año, pero después todo volverá a la normalidad".
Periodistas preparados para cubrir unos días históricos
Son muchos los periodistas que han cogido uno de los primeros vuelos a la capital británica para cubrir este evento histórico. Isabel II tenía 96 años y todos coinciden en que su muerte era algo que se esperaba desde hace muchos años, aunque era una noticia "que nadie quería dar", según explica Sara, una periodista española de televisión.
"Creo que es algo que todos sabíamos que iba a ocurrir, porque la reina tenía una edad muy avanzada, pero no sabíamos exactamente cuándo iba a llegar el momento. Todos los años había un aviso, una previa, pero ha llegado y lo ha hecho muy de repente", opina la reportera.
Igual que Sara, Marie Giffard, periodista de la agencia de noticias AFP, dice sentirse "muy ilusionada" por viajar a Londres y poder cubrir esta noticia. "Para mí es uno de los mejores momentos de mi trabajo, porque te da mucha adrenalina. Entiendes tu papel dentro de la sociedad", admite Giffard. "Estás en la primera fila para asistir al espectáculo, después tienes que retransmitirlo al público y es un placer poder hacer eso. Sobre todo en las primeras horas y los primeros días, que es lo que más intensidad lleva", explica a RTVE.es.
Los periodistas coinciden en que las redacciones llevaban tiempo preparándose para la muerte de la reina. Es el caso del cámara de la televisión nacional chilena Michael Brierley, que explica que en su canal "teníamos el obituario hecho desde hace años y cada año se iba actualizando". "Algunos me preguntaron cómo habíamos hecho un reportaje tan largo y tan rápido sobre la muerte de la reina, pero hace años que está hecho", admite.
En este sentido, la periodista francesa detalla que "este es un acontecimiento que estaba previsto" y en su redacción "teníamos todo listo: las noticias las tenemos escritas desde hace mucho tiempo, los análisis, los perfiles…".
Para la reportera de AFP, la muerte de la reina Isabel II es uno de los acontecimientos más importantes de las últimas décadas para Reino Unido, aunque cree que "el Brexit . "Fue algo muy fuerte porque la cosa es que la muerte de Isabel II siempre ha sido algo que sabíamos que iba a ocurrir, mientras que nadie esperaba el Brexit", añade.
Turistas preocupados por cancelaciones
En el vuelo viajan además los turistas que tenían previstas sus vacaciones en la capital y se encuentran con una ciudad hundida por la muerte de la monarca. Drew Edwards, un estadounidense de 32 años, viene a pasar una semana a Londres y cree que la muerte de Isabel II supone "el final de una era". "Sacaré tiempo para poder ver" los diferentes eventos que se llevarán a cabo. Drew considera una "oportunidad" el hecho de que su viaje haya coincidido con este "histórico momento", aunque admite que también se siente "un poco intruso".
Julieta Martin, de 52 años, llega a Londres desde Argentina con el resto de su familia para ir a una boda en el norte de Inglaterra. Explica que cuando llegó al aeropuerto de Buenos Aires se enteró de que la reina estaba mal. "Después me subí al avión y tuve 12 horas de vuelo. Al llegar me enteré de que se había muerto", relata. "La verdad es que es muy triste. Tenía una vida tan interesante y era una persona tan generosa", opina.
Tanto a Julieta como a Ariana Anaya, una estadounidense que viaja a Londres solo para volver a Estados Unidos, les preocupa el hecho de que el luto nacional declarado en Reino Unido pueda afectar a su viaje.
"Estoy intentando volver a casa, a Estados Unidos, y estoy un poco nerviosa porque ya se están retrasando algunos vuelos", afirma Anaya. "He oído que tienen varios días de luto y no sé si habrá aerolíneas que cierren o negocios que cierren. Espero poder volver pronto a Estados Unidos", explica preocupada.
Y es que, de una forma u otra, la muerte de la reina Isabel II afecta a todo tipo de personas en el mundo. Como el vuelo matinal a Londres, donde ya se percibe el luto en el que se sumirán los británicos en los próximos días.