Decenas de muertos en nuevos enfrentamiento en la frontera de Armenia y Azerbaiyán

• Ereván reconoce al menos 49 muertos, mientras Azerbaiyán admite pérdidas cifradas en 50 soldados
• Armenia solicita a Rusia la activación del Tratado de Amistad, Cooperación y Asistencia Mutua militar

La escalada de tensión por el Nagorno-Karabaj deja decenas de muertos

Armenia y Azerbaiyán se acusan mutuamente de los ataques que estallaron durante la noche del lunes y que continúan este martes en la frontera común, y que han causado ya decenas de muertos. Armenia ha solicitado a Rusia la activación del Tratado de Amistad, Cooperación y Asistencia Militar Mútua, y ha pedido también la intervención de la ONU.

Los enfrentamientos son la reanudación de las hostilidades de décadas vinculadas al territorio en disputa del Nagorno-Karabaj y a la zona limítrofe que Armenia ocupó en la primera guerra entre ambos países, en los años 90.

El primer ministro armenio, Nikol Pashinián, ha reconocido ante el Parlamento que al menos 49 de sus militares han muerto. "La cifra no es definitiva", ha añadido Pashinián, citado por el portal News.am.

Azerbaiyán también ha admitido pérdidas, confirmando 50 bajas mortales en las filas del Ejército. El número de víctimas convierte este enfrentamiento en el peor episodio desde 2020, con al menos 99 muertos en menos de 24 horas. El presidente azerbaiyano, Ilham Alíev, ha expresado en un mensaje de Twitter sus condolencias "a todo el pueblo azerbaiyano, a las familias y allegados de los militares que se convirtieron en mártires este 13 de septiembre".

Rusia ha pedido el cese de hostilidades y ha asegurado que su diplomacia ha logrado un principio de acuerdo para el cese el fuego, que espera que ambas partes cumplan.

Ereván y Bakú se acusan mutuamente de iniciar los enfrentamientos

Pashinián ha acusado a Azerbaiyán de atacarles desde siete posiciones distintas para hacer fracasar las negociaciones en marcha para definir las fronteras comunes.

El Ministerio de Defensa armenio ha asegurado los azerbaiyanos han bombardeado varias localidades en la frontera con artillería, morteros, vehículos aéreos no tripulados y armas de gran calibre, provocando daños en la infraestructura militar y civil.

Por su parte, Azerbaiyán acusa a las Fuerzas Armadas de Armenia de infiltrarse en su territorio para colocar minas entre las posiciones de su Ejército y las carreteras de suministro, lo que le ha obligado a responder.

Además, los soldados armenios "dispararon intensamente" contra posicines azerbaiyanas "con armas de varios calibres, incluidos morteros". Como resultado, ha asegurado Bakú, "hubo pérdidas entre el personal de las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán y la infraestructura militar también resultó dañada".

Armenia reclama la intervención de Rusia y la ONU

El primer ministro armenio ha llamado a los presidentes de Rusia y Francia, Vladímir Putin, y Emmanuel Macron, así como al secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, para informarles de la situación.

Pashinián ha pedido oficialmente a Rusia que active el Tratado de Amistad, Cooperación y Asistencia Mutua, así como la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) y que lleve el asunto al Consejo de Seguridad de la ONU.

El Tratado de Amistad entre Ereván y Moscú, vigente desde 1997, contiene la posibilidad de asistencia militar por parte de Rusia. En estos momentos, la postsoviética Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC), integrada por Rusia, Armenia, Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán y Uzbekistán, celebra una cumbre para debatir el conflicto entre Bakú y Ereván.

La UE y EE.UU. piden el cese de las hostilidades

La Unión Europea, a través de su máximo representante de Exteriores, Josep Borrell; y Estados Unidos, en voz del Secretario de Estado, Antony Blinken, han pedido el cese de hostilidades en la frontera entre Armenia y Azerbaiyán.

En un comunicado publicado esta mañana, Borrell ha detallado que "es imprescindible que paren las hostilidades y que se vuelva a la mesa de negociación. Todas las fuerzas deben volver a las posiciones que ocupaban antes de esta escalada y el alto el fuego debe respetarse completamente".

También el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha reclamado un alto el fuego "completo y sostenible" y ha afirmado que "no hay alternativa a la paz y la estabilidad" ni "alternativa a la diplomacia", según ha dicho en su cuenta oficial de Twitter, tras conversar por teléfono esta mañana con el primer ministro armenio.

Por su parte, Blinken llamó ya durante la noche al presidente de Azerbaiyán para pedir el fin de las hostilidades hacia Armenia, horas después de que el Ministerio de Defensa armenio denunciara nuevos ataques azerbaiyanos con artillería y drones.

"Blinken enfatizó que Estados Unidos presionará para que los combates cesen inmediatamente y para alcanzar un acuerdo de paz entre Armenia y Azerbaiyán", ha detallado sobre la llamada el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Ned Price, en un comunicado.

Un conflicto de 30 años

El conflicto entre Armenia y Azerbaiyán estalló en 1991, pocos días antes de que la URSS desapareciera oficialmente, y desde entonces se ha convertido en uno de los conflictos "congelados" que salpican el espacio ex-soviético. El motivo inicial fue la lucha por el control de la región de Nagorno-Karabaj o "Alto Karabaj", una zona montañosa ubicada en Azerbaiyán pero poblada mayoritariamente por armenios. Estos votaron unirse a Armenia en un referéndum que no fue reconocido.

Las claves del conflicto en Nagorno-Karabaj

La guerra provocó 30.000 muertos y terminó en 1994 con un alto el fuego precario. Armenia había ocupado no solo Nagorno-Karabaj sino una amplia región limítrofe, provocando el desplazamiento de miles de azerbaiyanos. Estas ganancias territoriales nunca han sido reconocidas internacionalmente.

Desde entonces se produjeron enfrentamientos de distinta gravedad hasta que en 2020 Azerbaiyán desencadenó una ofensiva y derrotó a Armenia, recuperando buena parte del territorio. Las autoridades armenias reclamaron la ayuda de Rusia, que solo intervino para facilitar un alto el fuego.

La tregua saltó de nuevo por los aires en 2021, con decenas de muertos, tras lo que se acordó un nuevo cese de hostilidades y ambos contendientes se comprometieron en Moscú a delimitar sus fronteras.