Las comunidades de vecinos temen que la factura de la calefacción se dispare en otoño e invierno
- Sus presidentes y los administradores de fincas piden poder acceder a la tarifa regulada
- En muchas de ellas hay personas mayores o enfermas que necesitan tener puesta la calefacción de forma continuada
La escalada del precio del gas está poniendo en apuros a muchas comunidades de vecinos que tienen caldera central. Sus facturas ya se están disparando y los administradores de fincas piden que puedan acogerse a la tarifa regulada, la denominada TUR, para poder pagar los recibos y que no les corten el suministro el próximo invierno.
En algunas de estas comunidades viven personas mayores o enfermas que necesitan tener puesta la calefacción de forma continuada. "Nos vamos a encontrar en una situación muy difícil" de cara los próximos meses, explica a TVE Pablo Gómez, presidente de su comunidad, que prevé que algunos vecinos no puedan pagar el recibo. "O paga el resto lo que otros no pueden, o nos cortan el gas", advierte.
Sus facturas han pasado de 12.684 euros en enero de 2021 a 43.000 euros un año después. Siguiendo esta línea, podrían alcanzar 95.000 euros este otoño, de manera que muchas comunidades se plantean encender la calefacción menos meses y reducir las horas.
El Gobierno, que ya había anunciado una rebaja del IVA del gas del 21% al 5% hasta de octubre a diciembre, ha adelantado que están estudiando otras medidas para aliviar su situación.
Piden poder acogerse a la tarifa regulada
El consumo conjunto de las calderas comunitarias sobrepasa el límite marcado para poder acogerse a la tarifa regulada y, por tanto, tienen que acudir al mercado libre, donde acaban pagando cinco veces más, teniendo en cuenta los precios actuales.
El problema es que este mecanismo no contempla a estas comunidades como una unión de pequeños propietarios por debajo del límite de 50.000 kilovatios, sino como un gran negocio o una gran industria, tal y como explica un administrador a TVE.
Además, instalar contadores individuales y reguladores de consumo tampoco evita el problema, ya que el sistema cuenta los metros cúbicos globales de gas de la caldera comunitaria, y no los de cada hogar.
En medio de esta crisis del gas, es probable que también aumenten otros gastos, como la cuota mensual de la comunidad, que puede subir hasta un 40%, según el Colegio de Administradores de Fincas de Madrid.
La amenaza es mayor en provincias del norte de España, donde la cuota de la calefacción central ha sufrido importantes incrementos en Navarra, donde ha habido derramas de hasta 1.000 euros. Por ello, el escenario actual plantea una situación complicada de cada al próximo otoño e invierno.