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Los "piratas" del gas: desviar barcos metaneros de sus destinos porque otro comprador paga más

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¿Cómo funciona el mercado de los metaneros? Cambian de destino en función de quien pague más

Los piratas del mar, no son piratas de verdad. Se denomina así a los marineros que van a bordo de barcos metaneros de gas y que son desviados de sus destinos porque otro comprador les paga más. Algo que está siendo muy habitual por la crisis energética.

Hasta varios días puede pasar un buque metanero esperando a descargar. Su labor es la de importar gas licuado y debido a estas "subastas en alta mar" su precio puede pasar de los 80 euros el megavatio hora a los 160 en tan solo 24 horas. Su rumbo cambia en favor del mejor postor.

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Una de las razones por las que esto sucede es debido a que la flexibilidad en los contratos hace que las grandes gasísticas puedan decidir a quien vender. Además, en ocasiones, se arriesgan a pagar las sanciones por no descargar en el puerto reservado, porque aun así obtienen grandes ganancias.

Es lo que está ocurriendo en Bilbao. Es el puerto de España donde más descargas de gas licuado se efectúan al año, hasta el punto de haberse incrementado casi un 50 %. Pero esto también hace que sufran las consecuencias de estos "mercenarios" del gas. En lo que llevamos de año, siete gaseros se han desviado y han cambiado el puerto de llegada. Además, otro más decidió descargar en otro lugar donde le pagaban mejor.

"Se trata de una práctica habitual"

Jorge Morales de Labra, experto y divulgador energético, afirma que es una práctica que se viene produciendo con mayor asiduidad en los últimos meses: "El barco es de su propietario, pero hay varios mercados internacionales. Lo que ocurre es que va a al mejor postor. Si una compañía China le ofrece 110 millones por lo que tiene, pues coge y se desvía. Hemos visto a través de una aplicación hasta cuatro cambios en el destino del barco antes de llegar a su destino", explica en 'La Hora de la 1'.

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) creó una sanción para evitar este tipo de prácticas: "Es algo habitual. La CNMC puso una sanción de seis millones de euros a los barcos metaneros de gas que no avisaran del cambio de destino con cinco días de preaviso como mínimo. Es el día a día", explica Morales de Labra.

¿Cuál es la solución?

La solución no pasaría únicamente por aumentar las sanciones: "Si subes la sanción, sube más el precio. China el año pasado dijo que compraría gas a cualquier precio y actualmente lo que ocurre es que lo está revendiendo. Nos está vendiendo gas. En el último año, se ha convertido en exportador indirecto y vende el gas que compró mucho más caro. Además, lo almacena fuera de China, en África, por ejemplo", relata el experto energético.

España no tendrá, según Morales de Labra, falta de gas, peor el problema podría ser otro: "Yo dije hace algunos meses que nuestro país iba a tener gas este invierno, lo que no sé es si podremos pagarlo. El gas viene por tubería y barco y cerramos la tubería de Argelia. El resto que entra en nuestro país entra por barco, pero es muy caro. Todos los países quieren comprar gas por barco".

"Por mucho que pongas sanciones es el mercado y al final el dinero se lo lleva por delante. La Comisión Europea sabe que el gas natural licuado es esencial, no podemos dejar de comprar gas. Todas las intervenciones que se vayan a hacer nos pueden llevar al desabastecimiento, hay muchos compradores y hay que tener cuidado en intervenir ese mercado", concluye el experto.