El gasoducto Nord Stream 2 sufre una fuga frente a la costa de Dinamarca
- Se ha detectado a unos 20 kilómetros al sureste de la isla danesa de Bornholm
- Las autoridades han prohibido el tráfico marítimo y aéreo en la zona
Dinamarca ha informado de una fuga de gas cerca de la isla de Bornholm, en el mar Báltico, próxima al inactivo Nord Stream 2 ruso y después de que Alemania confirmarse una importante caída de presión en el gasoducto. La fuga, confirmada por su operador (propiedad de Gazprom), se ha detectado a unos 20 kilómetros al sureste de la isla danesa, justo fuera de las aguas territoriales danesas, y "es peligrosa para el tráfico marítimo", ha indicado la autoridad marítima danesa en un aviso a los barcos.
"Se prohíbe la navegación en un radio de cinco millas náuticas de la posición notificada", han establecido las autoridades danesas. También han prohibido el sobrevuelo de aviones en la zona. Justo antes del anuncio del incidente por el lado danés, el Ministerio de Economía alemán había anunciado que estaba investigando una inesperada y rápida "caída de presión" en el gasoducto Nord Stream 2.
"De la noche a la mañana, el despachador del Nord Stream 2 en tierra registró una rápida caída de la presión del gas en la línea A del gasoducto Nord Stream 2", ha informado el operador en un comunicado. La presión en el gasoducto submarino, que contenía cierta cantidad de gas sellado en su interior a pesar de que nunca ha llegado a estar operativo, bajó de 105 a 7 bares durante la noche. "Se notificó inmediatamente a las autoridades marítimas de Alemania, Dinamarca, Suecia y Rusia", ha asegurado el operador.
La certificación del Nord Stream 2, que va desde Rusia a Alemania, fue bloqueada por Berlín como respuesta al reconocimiento por parte de Moscú de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, en Ucrania, el pasado febrero. La construcción del segundo tramo de ese gasoducto se había decidido en 2011, el mismo año en que entró en funcionamiento el primero, Nord Stream 1.
La controversia en torno al gas ruso
Este oleoducto ha sido uno de los puntos álgidos de la guerra energética entre Europa y Moscú desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania, que ha disparado los precios del gas.
El gasoducto Nord Stream 2, de propiedad rusa, pretendía duplicar el volumen de gas que fluye desde San Petersburgo bajo el Mar Báltico hasta Alemania. Acababa de ser completado y llenado con 300 millones de metros cúbicos de gas cuando el canciller alemán Olaf Scholz lo canceló poco antes de que Rusia invadiera Ucrania.
Los países europeos se han resistido a los llamamientos rusos para permitir el Nord Stream 2 y han acusado a Moscú de utilizar la energía como un arma. Rusia, en cambio, niega haberlo hecho y culpa a Occidente por la escasez de gas.
El Kremlin ha cortado el suministro de gas a varios países europeos por negarse a realizar el pago en rublos y también ha interrumpido el flujo del gasoducto Nord Stream 1, culpando a las sanciones occidentales por obstaculizar las operaciones.