¿Por qué el aceite de oliva está tan caro, y por qué seguirá subiendo?
- Ni Ucrania ni Rusia producen aceite de oliva, pero la guerra ha disparado el precio del "oro líquido"
- Desde febrero cuesta un 25% más y seguirá subiendo
Todos los factores se han dado en contra para que el precio se dispare. La guerra de Ucrania, la sequía y los sobrecostes de producción hacen prever que este año el aceite de oliva sobrepasará el récord de precio registrado en 2015. Encontrar un litro de aceite por menos de cinco euros en el supermercado es complicado, lo habitual es que oscile entre los seis y siete euros cada botella de litro, sin atender ofertas o promociones. Y todo apunta a que los precios van a seguir al alza.
Guerra, sequía e inflación
La invasión rusa de Ucrania dejó el girasol bloqueado en los puertos del Mar Negro, y la demanda mundial de grasas vegetales se desvió hacia otros aceites como los de palma, soja, colza y también de oliva... "De la noche a la mañana vimos cómo se disparaban los precios de los aceites de semillas, e inmediatamente nos vino un aumento de la demanda en el aceite de oliva, y una subida impresionante de precios”, asegura a RTVE Rafael Sánchez de Puerta, el responsable de aceite de oliva de las Cooperativas Agroalimentarias de España.
Este efecto se mantuvo entre febrero y junio, hasta que los la ONU logró que Kiev y Moscú suscribieran la iniciativa de Granos del Mar Negro desbloqueando parte del cereal ucraniano que, de forma simultánea, coincidía con las nuevas cosechas mundiales de palma, soja y colza que empezaron a estabilizar un mercado tensionado.
A partir de julio, todos los aceites, excepto el de oliva, bajaron su precio un 35% según la FAO, tras el récord alcanzado en marzo. "Con el verano el efecto de la guerra desapareció completamente, y ya nos quedamos exclusivamente con el efecto de la sequía" matiza Rafael Sánchez de Puerta.
Del “efecto guerra” al “efecto sequía”
Un nuevo efecto que impide que el “oro líquido” reduzca su alto precio en origen y de venta al público. Según las cooperativas, a corto plazo no parece que vaya a bajar el precio del aceite de oliva sino más bien todo lo contrario.
La sequía y las olas de calor de este verano han mermado el fruto del olivo -especialmente en el olivar tradicional de secano- y el sector espera una cosecha muy corta, inferior al millón de toneladas; lo que supone entre un 30% y un 40% menos que la campaña del año pasado.
"Es una lástima cómo está la aceituna. El problema que tenemos es el tamaño del fruto y lo arrugado que está. La prueba está en que, si cortamos, es solamente piel... entonces ¿dónde va a estar el aceite si no hay pulpa?", se lamenta José Luis Toledano, oleicultor de secano en Fernán Núñez, Córdoba.
A la cosecha corta se suman los sobrecostes, que superan de media el 40% en la fase de producción, y que también afectan a las cuentas de la industria y la distribución…
La inflación llega también al olivar
"El coste de la energía nos está subiendo también a nosotros, el plástico está subiendo, el cartón está subiendo, las etiquetas también... todo lo que necesitamos para poner un litro de aceite de oliva en manos del consumidor, tiene una subida más que notable en lo que va de año", según Primitivo Fernández, director de la Asociación de Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (ANIERAC).
Pese al elevado precio, el consumo mundial de aceite de oliva se mantiene estable, y este año superará a la producción... Las cosechas cortas en el Mediterráneo reducirán un 11% la disponibilidad de "oro líquido" en el mercado global.
Las almazaras y cooperativas españolas tienen almacenadas cerca de medio millón de toneladas de aceite de oliva desde la campaña anterior, es lo que se conoce como enlace de campaña, y con el que se aseguran las existencias para que no falte producto antes de que esté disponible el de la campaña 2022/2023. "Yo creo que va a haber suficiente aceite de oliva para cubrir tanto la demanda de consumo nacional como la de exportación, lo que hay que ver es a qué precio", asegura Rafael Pico, director de la Asociación de Exportadores de Aceite de Oliva (ASOLIVA).
Por ahora, según los índices de referencia de precios -PoolRed e Infaoliva- todas las categorías de aceite (virgen extra, virgen y lampante) ya rondan los 4 euros por kilo en almazara, y según el sector, esta cifra podría seguir aumentando y rebasar el récord histórico de 4 euros y 20 céntimos alcanzado en 2015.