Francia vive la primera huelga salarial del curso con sindicatos divididos y reforma de pensiones en el horizonte
- El sindicato CFDT, más moderado, ha rechazado la convocatoria de huelga
- Macron quiere reformar las pensiones antes del verano próximo
Francia ha vivido este jueves la primera huelga salarial del nuevo curso político para reclamar subidas salariales y protestar contra la futura reforma de las pensiones del gobierno.
Aunque ha sido convocada por una sola parte de los sindicatos, las manifestaciones y protestas han provocado la interrupción del sector energético francés puntualmente.
"Miles de trabajadores están en huelga hoy", ha dicho el jefe del sindicato de extrema izquierda CGT, Philippe Martínez, mientras asistía a una marcha de protesta en París junto con varios miles de personas, muchas de ellas ondeando banderas sindicales rojas.
"Este es un mensaje para el gobierno, pero también para el Medef", ha añadido, refiriéndose a la patronal francesa.
La huelga ha sido seguida por aproximadamente una quinta parte de los trabajadores y ha provocado una reducción de la generación de energía nuclear en 3,5 gigavatios (GW) y en 470 megavatios (MW) en centrales hidroeléctricas, según EDF.
División en los sindicatos y poco seguimiento
A las protestas convocadas por la Federación Sindical Unitaria (FSU), Solidarios, así como varias asociaciones juveniles y de estudiantes, se han sumado una minoría de maestros y trabajadores ferroviarios. No se han unido a ellas las otras dos grandes centrales del país, la Confederación Francesa Democrática de Trabajadores (CFDT) y Fuerza Obrera (FO).
El sindicato CFDT, más moderado, ha rechazado la convocatoria de huelga, pero su responsable, Laurent Berger, también ha prometido protestas callejeras a finales de este año si el gobierno va demasiado lejos y demasiado rápido con la reforma de pensiones.
A pesar de la división en la convocatoria, miles de personas han acudido a la manifestación de París. "Estamos aquí por nuestros salarios, pero también por el tema de las pensiones", ha señalado una de las asistentes.
Macron quiere elevar la edad de jubilación
Las concentraciones también se han secundado en otras ciudades como Marsella o Montpellier y se han llevado a cabo un día después de la reunión del gabinete del presidente francés, Emmanuel Macron, quien ya ha manifestado su intención de reformar el sistema público de pensiones antes del próximo verano.
"Si no nos escuchan, no nos quedaremos en la mesa de negociación", han asegurado desde los sindicatos sobre los planes de reforma.
Macron, quiere reformar en los próximos meses para subir la edad mínima de jubilación de los 62 años actuales a 64 ó 65. Por su parte, la CGT quiere, por el contrario, bajarla a 60 años y conseguir el dinero que hará falta para su financiación en los próximos años con una limitación en las exenciones de cotizaciones de las que se benefician las empresas o con un incremento de la fiscalidad sobre los movimientos financieros.