Radiografía del voto: Hermanos de Italia triunfa entre las clases medias empobrecidas, los obreros y la gente mayor
- Hermanos de Italia recoge el voto del descontento y gana sobre todo en los sectores desfavorecidos, con alta abstención
La izquierda solo logra vencer a la coalición de derechas entre los jóvenes, los estudiantes y los graduados universitarios
El voto del desencanto propició el pasado domingo que un partido de extrema derecha ganara las elecciones en uno de los países fundadores de la Unión Europea. Hermanos de Italia, que venció con un holgado 26% de los votos, obtuvo sus mejores resultados entre la clase media-baja, así como entre los obreros (su mayor apoyo, con un 34,6% de los votos en ese grupo) y los comerciantes y autónomos, si bien no logró seducir a los votantes más jóvenes ni a los estudiantes, entre quienes apenas logró el 10%.
Así se desprende del análisis poselectoral realizado por la empresa demoscópica Ipsos, que apunta a que el voto de la formación que lidera Georgia Meloni se nutre en buena medida del descontento: los grupos de población en los que consigue sus mejores resultados están entre los más abstencionistas de unos comicios que han marcado el récord de abstención en Italia, con un 36,1%. Es un fenómeno que también se observa en algunos de los segmentos donde triunfa el Movimiento Cinco Estrellas, mayoritario entre la clase económica baja (su mejor caladero, con un 25%), los parados y los estudiantes.
El impulso de la ultraderecha permitió que la coalición de derechas -integrada por Hermanos de Italia, la Liga de Matteo Salvini y Forza Italia, de Silvio Berlusconi- superara a la de izquierdas -que reúne a verdes, poscomunistas y europeístas en torno al Partido Democrático- en casi todos los segmentos de población. Ya sea por género, edad, profesión o situación económica, su apoyo rebasa el 40% en prácticamente todas las categorías contempladas.
De hecho, la izquierda solo es la opción mayoritaria en tres grupos de población: los estudiantes (su mejor resultado, con un 44,5%), los graduados universitarios y los jóvenes de entre 18 y 34 años, si bien el partido más votado en este tramo es el Movimiento Cinco Estrellas, con un 20,9% de los votos.
Hermanos de Italia, por su parte, convence sobre todo a los votantes de entre 35 y 49 años, entre los que alcanza un 29,1%. Aunque también es la opción preferida para los más mayores, con un respaldo que rebasa el 28% a partir de los 50 años.
Las clases desfavorecidas dan la espalda a la izquierda
Por género, apenas se aprecia brecha: los posfascistas son el partido más votado tanto entre los hombres, con un 27,8%, como entre las mujeres, con un 24,2%. Tanto la Liga como el Partido Democrático y el Movimiento Cinco Estrellas tienen mejores resultados entre las mujeres que entre los hombres, aunque la diferencia no alcanza en ningún caso los dos puntos porcentuales.
Si se atiende al nivel educativo, Hermanos de Italia se impone claramente entre quienes tienen formación básica, media o ningún título, al atraer al 29% de los votantes. También es la opción preferida entre los diplomados, pero entre los graduados universitarios quien triunfa es el Partido Democrático con un 25%.
De la misma forma, la formación socialdemócrata es la preferida para los votantes de clase media-alta, aunque Hermanos de Italia gana vuelve a imponerse entre quienes disfrutan de una condición económica elevada, con un 23,1%, por el 22,1% del Partido Democrático.
La coalición de izquierdas, en este sentido, logra sus peores resultados entre los más pobres del espectro económico: apenas consigue el 14,4% de los votos en el segmento de clase baja, donde se hacen fuertes tanto los partidos de la derecha -los tres superan el 10%- como el Movimiento CInco Estrellas.
El Partido Democrático que lideraba Enrico Letta, el gran derrotado de los comicios, sí consiguió un notable respaldo de pensionistas y estudiantes, aunque entre los primeros le superó Hermanos de Italia (27,6%) y entre los segundos, el Movimiento Cinco Estrellas (24,8%).
El análisis por profesión y ocupación también revela que tanto los obreros como los comerciantes y autónomos han dado la espalda a la izquierda, que apenas recoge en torno al 16% del voto en ambos grupos, y han optado decididamente por Hermanos de Italia, que recibe más del 30%. A partir de ahora, Georgia Meloni deberá encontrar las políticas que satisfagan a esos descontentos, la base de su victoria electoral.