Von der Leyen planteará a los líderes de la UE limitar el precio del gas y generalizar la excepción ibérica
- El tope sería una medida temporal y un primer paso hacia "una reforma estructural del mercado"
- Quince países, entre ellos España, han pedido que se limite el precio, a lo que se opone Alemania
La presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, ha asegurado este miércoles que el Ejecutivo comunitario está "preparado para debatir" el establecimiento de un tope al precio del gas que se usa para generar electricidad, para reducir así la factura.
"Tenemos que limitar este impacto inflacionario del gas en toda Europa. Por eso, estamos preparados para debatir un tope al precio del gas que se usa para generar electricidad. Este tope sería un primer paso en el camino hacia una reforma estructural del mercado de la electricidad", ha declarado Von der Leyen ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo.
Insta a intervenir el mercado europeo del gas y establecer un límite al precio máximo de los contratos en el índice de referencia europeo, TTF (Title Transfer Facility) holandés y, en paralelo, aumentar los niveles de ahorro de consumo de gas a nivel comunitario a través de subastas de reducción de demanda. De esta manera, se extendería a toda la UE el sistema que ya aplican España y Portugal, y que se ha dado en llamar la "excepción ibérica".
El anuncio de Von der Leyen llega después de que una mayoría de países de la Unión Europea, con Italia, Francia, España y Bélgica a la cabeza, hayan solicitado la intervención el mercado del gas. Alemania, en cambio, se opone porque considera que afectaría a la seguridad del suministro.
Una medida temporal
Von der Leyen ha subrayado precisamente que el límite al precio "debe diseñarse correctamente para asegurar la seguridad del suministro" y que se trata de una medida temporal.
La presidenta de la Comisión considera que el índice TTF Dutch de Ámsterdam, que sirve de referencia del precio del gas en Europa, ya no representa correctamente el mercado europeo, que debido a la reducción del suministro de gas ruso a través de tubería tiene más presencia de gas natural licuado (GLN), que llega por barco.
Von der Leyen ha recordado que Bruselas ya había ofrecido esta opción en marzo para "enviar la señal de que la UE no pagará cualquier precio por el gas", y ha apuntado que ya entonces se evaluó que tendría "un impacto inmediato en los niveles de precios" y, en paralelo, "desventajas" en términos de seguridad del suministro.
"La situación ha evolucionado de manera crítica. Hoy, en comparación con marzo, más Estados miembros están abiertos a esto y estamos mejor preparados", ha declarado. También se trabajará junto a los Estados miembros para reducir la volatilidad y el impacto de la manipulación rusa de precios.
La presidenta del Ejecutivo comunitario ha advertido de que la crisis actual requiere "medidas de emergencia excepcionales" y que la UE actúe "más unida que nunca" y "con solidaridad". "Necesitamos proteger los fundamentos de nuestra economía, y en particular nuestro mercado único. Esta es la fuerza de la UE, de donde procede su riqueza. Sin una solución europea común, arriesgamos la fragmentación", ha añadido.
A la vez que se opone a establecer un tope al precio del gas, Alemania ha aprobado un paquete de 200.000 millones de euros en ayudas públicas para abaratar la factura energética de sus ciudadanos. El paquete de ayudas ha sido criticado por algunos países miembros y en las instituciones de la UE por su potencial impacto sobre la competencia en detrimento de los países más pobres del bloque, informa Efe.