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Sánchez y Feijóo protagonizarán un nuevo 'cara a cara' con la renovación del CGPJ en el aire

  • Sánchez comparece a petición propia para mantener un nuevo duelo parlamentario con el que tratar de frenar el 'efecto Feijóo'
  • Sigue en directo en RTVE a partir de las 16:00 el segundo debate entre el presidente y el líder del PP en el Senado

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el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo
el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, se dan cita este martes en el Senado, donde volverán a medir fuerzas en un debate marcado por las medidas fiscales y de respuesta a la crisis, pero también con los Presupuestos para 2023 y las negociaciones sobre el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) como telón de fondo.

Tras el primer 'cara a cara' del mes de septiembre, en el que tanto el Gobierno como el PP se erigieron como vencedores, Sánchez comparece a petición propia para mantener un nuevo duelo parlamentario con el que tratar de frenar el 'efecto Feijóo', a quien los últimos sondeos continúan dando una amplia ventaja.

En el anterior encuentro, Sánchez intentó sembrar dudas sobre la capacidad del presidente 'popular' al tratar de vincularle con los intereses de las grandes compañías eléctricas. Feijóo, por su parte, le acusó de "improvisar", de copiar las medidas de su partido y de estar a "merced de las encuestas" electorales.

Ahora, desde La Moncloa señalan que Sánchez vuelve a las Cortes para "da la cara" y han manifestado que les gustaría encontrar "alguna propuesta seria" por parte del PP, que a su vez dice estar preparado para responder "con argumentos" frente a la "batería de descalificaciones".

Subir o bajar impuestos: dos modelos fiscales contrapuestos

Si las medidas económicas y energéticas fueron las grandes protagonistas en el anterior debate, esta vez estará marcado por la batalla de modelos fiscales. Así, el jefe del Ejecutivo tratará de contraponer sus propuestas a la de los 'populares', adoptando una posición de defensor de la "clase media y trabajadora" y de un estado de bienestar en el que "los que más tienen más aporten".

En este sentido, Sánchez tendrá que explicar su plan para frenar la inflación o el nuevo gravamen a las grandes fortunas, a la vez que buscará desacreditar la rebaja de impuestos por parte de las comunidades autónomas gobernadas por el PP, a las que ha acusado de 'dumping fiscal', si bien otras regiones del PSOE también se han sumado a ellas.

Frente al modelo del Gobierno, Núñez Feijóo abogará por su modelo económico basado en más control del gasto público y en menos impuestos, denunciando el afán recaudador de los socialistas, a quienes acusan de "castigar a los mileuristas". Así, pondrá de nuevo sobre la mesa medidas como la rebaja del IVA en alimentos básicos, la bonificación en los recibos de la luz o deflactar el IRPF para las rentas menores de 60.000 euros.

El PP pondrá el acento, por otro lado, en los Presupuestos Generales que acaba de presentar el Gobierno y que incluirán el mayor gasto público e inversión de la historia. Sin embargo, a ojos del principal partido de la oposición, las cuentas públicas dejan atrás a las clases medias, a las que considera "las grandes olvidadas" por parte del Ejecutivo. "Sus presupuestos son puro cálculo electoral", han asegurado en las últimas semanas desde Génova.

Además, los 'populares' también quieren que en esa comparecencia de Sánchez informe de la gestión de los fondos europeos porque consideran que el Tribunal de Cuentas de la UE "le ha sacado los colores a España" por la mala ejecución de esas ayudas.

Las negociaciones del CGPJ como telón de fondo

Más allá de los aspectos económicos, también se colarán en el debate las negociaciones para la renovación del Poder Judicial, especialmente tras la dimisión del presidente del CGPJ, Carlos Lesmes. Tras cuatro años de bloqueo y de reproches mutuos, el PP y el PSOE han acordado hacer "un último intento" para renovar el órgano de gobierno de los jueces y poner fin, así, a la crisis en la institución.

Sin embargo, aunque han manifestado que las negociaciones "progresan adecuadamente", desde ambos partidos han pedido prudencia, sobre todo tras las grandes discrepancias de los últimos meses: mientras el PP pedía una reforma en la elección de los vocales del CGPJ, el PSOE consideraba que el sistema actual "ya era bueno" y llamaba a "cumplir con la Constitución".

El líder del PP finalmente ha dicho estar dispuesto a renovar el Consejo y asume que se haga con el modelo actual, pero ha pedido que el Gobierno se comprometa por escrito a que haya una reforma de la ley para la elección de los vocales "en los próximos meses". Pese a su petición, el presidente del Gobierno ha descartado un compromiso negro sobre blanco y ha instado al PP a "asumir su responsabilidad".

PSOE y PP avanzan en la renovación del CGPJ

Por otra parte, desde 'Génova' han emplazado a Sánchez a explicar en la Cámara Alta si acordó con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, no aplicar el 25% de castellano en las aulas. "No quiero pensar que se conchabaran para prevaricar en comandita", ha apuntado el coordinador general del PP, Elías Bendodo, quien cree que el Gobierno debe explicar "si existió o no ese acuerdo de mesa camilla con el independentismo catalán para no aplicar la sentencia de un tribunal".

Un debate parlamentario con menos representación

En este debate el jefe del Ejecutivo no tiene límite de tiempo para responder a los grupos parlamentarios, pero sí que está tasado para el PP y los demás partidos: 15 minutos en la primera intervención y otros cinco en la réplica.

En Génova consideran "desproporcionada" la diferencia de tiempos entre ambos y se quejan de que no se haya aceptado su petición de poder tener un discurso de mayor duración. "Necesitar seis veces más de tiempo que Feijóo para explicar sus propuestas denota cierta debilidad", aseguran a Europa Press fuentes 'populares'.

A ello se suma que Vox y Ciudadanos no pueden contar con sus jefes de filas y, de hecho, carecen de grupo propio, con lo que deben repartir sus tiempos con otras formaciones, mientras que Unidas Podemos ni siquiera podrá intervenir, ya que no tiene representación en esta Cámara desde hace más de un año y medio.