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Identifican por primera vez a una familia neandertal: el estudio del ADN nos acerca a su vida en comunidad

  • El Instituto Max Planck alemán estudia el genoma de 13 individuos neandertales que habitaron dos cuevas en Siberia
  • Las comunidades estaban conectadas principalmente a través de la migración femenina

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Ilustración de un padre neandertal y su hija.
Ilustración de un padre neandertal y su hija.

Investigadores internacionales ha logrado identificar por primera vez a una familia neandertal, formada al menos por un padre y una hija, dentro de una comunidad de 13 individuos. El avance ha sido posible gracias a la secuenciación del ADN de unos restos hallados en una cueva en Siberia y nos acerca a conocer mejor la organización social de estos homínidos extinguidos, según han publicado en la revista 'Nature'.

El equipo del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva, en Alemania, ha estudiado el genoma de 17 restos procedentes de 13 individuos neandertales: siete hombres y seis mujeres, de los cuales ocho eran adultos y cinco niños y adolescentes. Entre ellos estaba dicho padre y su hija adolescente, así como otra pareja de parientes de segundo grado: un joven y una mujer adulta que pudo ser una prima, una tía o una abuela.

"Nuestro estudio ofrece una imagen concreta de cómo pudo ser una comunidad neandertal", destaca Benjamin Peter, autor del estudio. "Hace que los neandertales me parezcan mucho más humanos".

Se trata del mayor número de restos neandertales jamás secuenciados en un solo estudio, aunque el primer borrador del genoma neandertal se publicó en 2010. El hito ha valido el premio Nobel de Medicina de 2022 para Svante Pääbo y, desde entonces, su equipo del Instituto Max Planck ha secuenciado otros 18 genomas procedentes de 14 yacimientos arqueológicos diferentes de toda Eurasia. Si bien estos genomas han proporcionado información sobre las líneas generales de la historia de los neandertales, todavía se sabe poco de las comunidades neandertales individuales.

Relaciones de parentesco

En este último estudio, los investigadores se han centrado en los restos neandertales de las cuevas de Chagyrskaya y Okladnikov, que estos homínidos ocuparon brevemente hace unos 54.000 años.

Las relaciones de parentesco se han establecido por su ADN mitocondrial. Los investigadores encontraron que compartían varias de las llamadas heteroplasmias, es decir, un tipo especial de variante genética que solo persiste durante un pequeño número de generaciones. La combinación de heteroplasmias e individuos emparentados sugiere fuertemente que los neandertales de la cueva de Chagyrskaya debieron vivir -y morir- más o menos al mismo tiempo.

"El hecho de que vivieran al mismo tiempo es muy emocionante. Esto significa que probablemente procedían de la misma comunidad social. Así que, por primera vez, podemos utilizar la genética para estudiar la organización social de una comunidad neandertal", afirma Laurits Skov, primer autor de este estudio.

Ellas migraban entre comunidades

Otro hallazgo sorprendente para los investigadores es la bajísima diversidad genética dentro de esta comunidad neandertal, consistente con un tamaño de grupo de 10 a 20 individuos. Esta cifra es mucho más baja que las registradas en cualquier comunidad humana antigua o actual, y se asemeja más al tamaño de los grupos de especies en peligro de extinción.

Sin embargo, los neandertales no vivían en comunidades completamente aisladas. Al comparar la diversidad genética del cromosoma Y (que se hereda de padres a hijos) con la diversidad del ADN mitocondrial (que se hereda de las madres) los investigadores han descubierto que la diversidad genética mitocondrial era mucho mayor que la del cromosoma Y, lo que sugiere que estas comunidades neandertales estaban vinculadas principalmente por la migración femenina. Eran ellas las que se desplazaban.

¿Cómo vivían?

La cueva de Chagyrskaya ha sido excavada durante los últimos 14 años por investigadores del Instituto de Arqueología y Etnografía de la Academia de Ciencias de Rusia. Además de varios cientos de miles de herramientas de piedra y huesos de animales, también recuperaron más de 80 fragmentos de huesos y dientes de neandertales, uno de los mayores conjuntos de estos humanos fósiles del mundo.

Los neandertales de Chagyrskaya y Okladnikov cazaban íbices, caballos, bisontes y otros animales que migraban por los valles fluviales a los que dan las cuevas. Recogían materias primas para sus herramientas de piedra a decenas de kilómetros de distancia, y la aparición de la misma materia prima tanto en la cueva de Chagyrskaya como en la de Okladnikov apoya también los datos genéticos de que los grupos que habitaban estas localidades estaban estrechamente vinculados.

Estudios anteriores de un dedo fósil de la cueva de Denisova demostraron que los neandertales también habitaron las montañas de Altái mucho antes, hace unos 120.000 años. Sin embargo, los datos genéticos muestran que los neandertales de las cuevas de Chagyrskaya y Okladnikov no son descendientes de estos grupos anteriores, sino que están más relacionados con los neandertales europeos. El material arqueológico también corrobora esta afirmación, de que las herramientas de piedra de la cueva de Chagyrskaya son las más parecidas a la llamada cultura micoquiana conocida en Alemania y Europa del Este.

Sin rastro de los denisovanos

Para explorar la estructura social de los neandertales, los investigadores del Instituto Max Planck se han centrado en sur de Siberia, una región que ha sido muy fructífera para la investigación del ADN antiguo. Allí descubrieron los restos de otros homínidos, los denisovanos, en la famosa cueva de Denisova.

Gracias a los trabajos realizados en ese lugar, sabemos que neandertales y denisovanos estuvieron presentes en esta región durante cientos de miles de años, e interactuaron entre sí, como ha demostrado el hallazgo de un niño de padre denisovano y madre neandertal.

Pero, aunque la cueva de Chagyrskaya se encuentra a menos de 100 kilómetros de la cueva de Denisova, los investigadores no han encontrado pruebas de flujo genético denisovano en los neandertales de este lugar en los últimos 20.000 años antes de que vivieran estos individuos.