Tres hombres son declarados culpables de apoyar el intento de secuestro a la gobernadora de Michigan
- Los responsables podrían afrontar una pena de 22 años de prisión por dar respaldo material y por delito con armas de fuego
- "Se implicaron en una operación para secuestrar a funcionarios gubernamentales", según la fiscalía.
Tres hombres han sido declarados culpables este miércoles por un jurado estatal por apoyar los planes para secuestrar en 2020 a la gobernadora de Michigan (EE.UU), la demócrata Gretchen Whitmer, según medios locales.
Los acusados Joe Morrison, su yerno Pete Musico y Paul Bellar son culpables de proporcionar "apoyo material" a un acto terrorista, en calidad de miembros del grupo paramilitar The Wolverine Watchmen.
Los tres podrían afrontar una pena de hasta 22 años de prisión: 20 por el cargo de dar respaldo material y dos más por un cargo de delito con armas de fuego. La lectura de la sentencia se ha fijado para el 15 de diciembre.
Los acusados llevaron a cabo ejercicios con armas de fuego en el condado de Jackson (Michigan) con un líder de la trama, Adam Fox, que quería secuestrar a la gobernadora por su descontento con sus políticas para contener la pandemia de covid.
Según la fiscalía, los tres hombres "se implicaron en la planificación y entrenamientos para una operación para atacar el edificio del Capitolio estatal y secuestrar a funcionarios gubernamentales", incluida Whitmer.
Conspiración para capturar a la gobernadora como rehén
El veredicto se produce después de tres semanas de un juicio en que la oficina de la fiscal general de Michigan ha intentado probar que los acusados proporcionaron ayuda bien a Fox o a Barry Croft, los líderes de la trama para raptar a la gobernadora.
Los fiscales han apuntado que las restricciones impuestas por Whitmer para contener la pandemia de covid-19 espolearon el alistamiento de voluntarios en The Wolverine Watchmen. Precisamente, el pasado agosto un jurado federal halló a Fox y a Croft culpables de conspirar para capturar a Whitmer como rehén.
Durante los meses más duros de la pandemia, Whitmer fue objeto de críticas por parte de grupos conservadores y milicias de ultraderecha, e incluso del entonces presidente, Donald Trump (2017-2021), por imponer el cierre de la actividad comercial y de las aglomeraciones en el estado.