Musk visita la sede de Twitter en la víspera de que termine el plazo para su compra

• El empresario ha dado a entender a través de un tuit el cierre de su acuerdo con la red social
• El personal de la empresa ha recibido con incertidumbre la llegada del magnate

Elon Musk con el simbólico lavabo en las oficinas de San Francisco

A 48 horas de que se cumpla el plazo para que Elon Musk se convierta en el propietario de Twitter, el empresario ha visitado las oficinas de la compañía. El magnate ha querido simbolizar su acercamiento a la red social con la publicación de un metafórico tuit en su cuenta personal, en lugar de comunicarse a través de otras redes como Facebook o Instagram.

Musk, consejero delegado de Tesla y Space X, continúa con el procedimiento para que Twitter pase a ser parte de su propiedad. Este miércoles, el empresario posteaba un vídeo en el que entraba entusiasmado y energético a la sede de Twitter con un lavabo a cuestas, lo que da a entender la consolidación de la compra de la red social.

En su cuenta de Twitter, el magnate escribía: “Entrando en la sede de Twitter, ¡asimílenlo!”. En la traducción original, el anuncio incluía la palabra “lavabo” en inglés, lo que connota cierto tono de humor durante su entrada al edificio.

El vídeo sugiere que la operación puede haber llegado a su fin tras varios obstáculos financieros. Horas antes de que el vídeo se viese la luz, Musk había escrito: "Una cosa bella de Twitter es cómo empodera el periodismo ciudadano, la gente puede diseminar noticias sin un sesgo del establishment".

Inquietud en el personal

La semana pasada Musk exponía los planes futuros ante los inversores de la sociedad, entre los que se encontraban recortar más de la mitad del personal de la red social. Según informa Bloomberg, el magnate ha modificado su postura durante la visita a la sede en San Francisco, donde ha afirmado ante los trabajadores de la compañía que finalmente esos ajustes no entraban en sus planes.

Según han señalado expertos consultados por este medio, la decisión final no solo es importante para la infraestructura de la compañía y los centros de datos vinculados a Twitter, sino que también es crucial para todos aquellos que poseen una cuenta de Twitter debido a que incrementaría la probabilidad de que sean pirateados y la exposición a material ofensivo ante la falta de personal.

Este viernes expira la fecha para que Musk finalice la compra de Twitter si quiere esquivar enfrentarse a un juicio contra ellos. Finalmente, el empresario ingeniero ha expresado su intención de volver al acuerdo original tras intentar negociar una rebaja del precio de la operación, pero Twitter no aceptó. Así pues, el jefe de Tesla compraría la Red Social por 54,20 dólares por acción, lo que implicaría un total de 44.000 millones de dólares (44.880 millones de euros). En cualquier caso, este viernes saldremos de dudas.