Los conservadores del CGPJ piden tiempo para valorar a Bandrés, el candidato elegido por los progresistas
- La ruptura de las negociaciones entre Gobierno y PP para renovar el CGPJ ha dado un nuevo impulso a las negociaciones del TC
- Los conservadores insisten en que no encuentran candidatos pero ven "imprescindible" reactivar la negociación
La reunión celebrada este jueves entre el sector progresista y el conservador del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para acordar la renovación del Tribunal Constitucional ha vuelto a concluir sin acuerdos. Según fuentes del Consejo a RTVE, los vocales conservadores no cuentan aún con candidatos para el Constitucional y necesitan tiempo para valorar la idoneidad del de los progresistas, que este jueves han elegido al magistrado del Tribunal Supremo José Manuel Bandrés.
Todo ello tras más de dos horas de reunión de la comisión negociadora, la primera desde el pasado 5 de octubre, y cuando se cumple mes y medio del plazo legal para realizar los nombramientos de dos magistrados para el tribunal de garantías.
Según fuentes del Poder Judicial a RTVE, los negociadores progresistas y conservadores volverán a reunirse el próximo 16 de noviembre. Hasta entonces, el grupo de vocales conservadores procederá a la búsqueda de sus posibles candidatos.
Los magistrados progresistas, que pidieron a los conservadores reunirse a lo largo de la tarde, han llegado a la cita con el nombramiento de su candidato, elegido mediante votación interna en una reunión celebrada en Madrid.
Bandrés era el favorito en todas las quinielas por delante de Pablo Lucas, ambos compañeros de la Sala de lo Contencioso del Supremo, precisamente una de las más afectadas por las vacantes de magistrados ante la imposibilidad de hacer nombramientos con el Consejo en funciones.
Ahora, falta que los conservadores propongan al otro candidato que debe designar el CGPJ para la renovación del TC (al Gobierno le corresponde nombrar a otros dos magistrados para solventar las cuatro vacantes que hay en total y que debían haberse renovado como tarde el pasado 13 de septiembre, según el plazo legal).
Cambio de postura en los conservadores
La cita entre ambos sectores del CGPJ ha llegado con el candidato progresista ya en la mesa y tras el cambio de postura del sector conservador, que ahora ve "imprescindible" reactivar con los progresistas la renovación del Constitucional un mes y medio después de vencer el plazo legal, tras constatar la ruptura de las negociaciones entre PSOE y PP para renovar el órgano de gobierno de los jueces. Hasta ahora, los conservadores habían dilatado la renovación, molestos con las dos reformas del Gobierno de la ley del Poder Judicial, insistiendo en que no tenían candidatos y a la espera de que los progresistas consensuaran al suyo.
Todavía insisten los conservadores en que no encuentran candidatos en el Supremo, aunque en los últimos días han vuelto a preguntar a magistrados como Pablo Llarena y Julián Sánchez Melgar para tantear si ahora sí ven viable postularse habida cuenta de que "la ruptura de esas negociaciones fija un nuevo escenario".
Para nombrar a los dos magistrados se precisa un mínimo de 11 votos, lo que requiere el pacto entre conservadores y progresistas, que cuentan con ocho vocales por cada bloque, si bien luego están los moderados Vicente Guilarte y Wenceslao Olea que completan los 18 vocales actuales.
Bandrés, en la carrera judicial desde 1980 y desde 2003 en el Supremo
El magistrado Bandrés lleva en la carrera judicial desde 1980 y desde el 2003 en el Tribunal Supremo, donde ha ejercido en la Sala Tercera, la de lo Contencioso-Administrativo. Es doctor en Derecho, ha sido profesor de Constitucional en la Universidad de Barcelona y ha cursado estudios en distintas facultades y academias europeas en Francia, Italia y Países Bajos.
Miembro fundador de Juezas y Jueces para la Democracia (JJpD), dio sus primeros pasos como juez en los juzgados de Guernica y Luno (País Vasco), Vilanova y la Geltrú (Cataluña), y en Calamocha y Calatayud (Aragón), hasta que en 1985 fue nombrado magistrado de la Sala de lo Contencioso de la Audiencia Territorial de Barcelona, precedente del Tribunal Superior de Justicia catalán.