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Desarticulan una organización que introducía cocaína a gran escala en España a través de veleros

  • Los traficantes disponían de una tonelada de cocaína y una embarcación valorada en 700.000 euros
  • El líder controlaba la red desde un pequeño municipio asturiano

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Cocaína incautada por la Policía
Cocaína incautada por la Policía

Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y la Policía Nacional han desarticulado una organización criminal que traficaba con cocaína a gran escala mediante veleros procedentes de Sudamérica. Durante esta operación conjunta, han detenido a doce personas en Asturias, Gran Canaria, Madrid, Málaga y Valencia.

Según ha informado policía, la estructura criminal era manejada desde un pequeño municipio asturiano. La organización contaba con un alto grado de seguridad y hacía uso de tecnología puntera para evitar ser detectados. En la operación se ha interceptado más de una tonelada de cocaína que viajaba en velero y una cifra superior a 200.000 euros en efectivo. Además, han localizado cerca de 50 empresas que blanqueaban el dinero de la venta de estupefacientes y han bloqueado más de 100 cuentas bancarias.

El modus operandi del grupo criminal

La investigación comenzó en 2018 cuando los expertos descubrieron un entramado criminal asentado en España, que introducía cocaína en el país desde puntos de Sudamérica. Las primeras averiguaciones permitieron localizar a varias personas que desde Gran Canaria adquirían veleros para cruzar el Atlántico y volver al país con la droga.

Para blanquear el dinero, la red dificultaba la identificación real de los verdaderos responsables a través de 50 empresas tapaderas repartidas por territorio español, Panamá, Colombia y otros países de Europa. Además, la operación ha incluido más de una docena de registros en España, entre los que llegaron a desmantelar un laboratorio en Valencia donde separaban la droga de materias legales.

Entre las sustancias estupefacientes intervenidas se encuentran 1.275 kilogramos de cocaína. También se han requisado tres embarcaciones, una de ellas de 27 metros de longitud valorada en 700.000 euros, nueve vehículos de alta gama, 223.000 euros en efectivo, diverso material informático, 44 teléfonos móviles, dos armas de fuego y multitud de artículos de joyería y relojes de gama alta.