Stephen, un migrante que saltó la valla de Melilla: "No querían que murieran en España, les pegaban y les devolvían"

• Stephen llegó a España el pasado 24 de junio, durante el salto multitudinario a la valla de Melilla
• Asegura que no vio a compañeros morir en territorio español, porque les pegaban y les retornaban a Marruecos

14 horas - Así vivió Stephen la tragedia de la valla de Melilla

Stephen salió de Sudán del Sur con 16 años. Sonríe cuando tiene que contar los motivos de su huida, porque más del 80% de la población vive por debajo del umbral de la pobreza y la esperanza de vida en los hombres no supera los 57 años. La miseria y décadas de guerra e inestabilidad son los principales factores de expulsión de sus jóvenes.

Tras salir de su país, vivió y trabajó en Egipto, Túnez y Libia. A Marruecos llegó con 34 años, para malvivir en sus calles y en los Montes de Tetuán durante 10 meses, sin trabajo ni comida. Días antes del fatídico salto del 24 de junio, la gendarmería les había expulsado de sus asentamientos en los montes. En torno a 1.500 personas intentaron cruzar la frontera ese día, la mayoría eran jóvenes de Sudan. Lo que recuerda de ese día fue correr y correr, casi sin mirar atrás, hasta llegar al CETI (Centro de Estancia Temporal) de Melilla. "Entré rápido porque había mucha, mucha gente, pero yo crucé sólo. Salté la frontera por una parte en la que había sólo 7 guardias civiles".

Dice que en su desesperación solo quería salvar su vida y llegar a España, pero pudo ver los cuerpos amontonados y ensangrentados de sus compañeros de salto. "Vi a la gente tirada, había mucha sangre, nadie se podía levantar. Cuando se levantaban se caían de nuevo, estaban sufriendo, pero no estoy seguro de si estaban muertos, yo estaba corriendo, quería salvar mi vida, estaba corriendo", relata.

“No estoy seguro de si estaban muertos, yo estaba corriendo, quería salvar mi vida “

El joven sudanés, que ahora tiene 34 años, asegura que no vio a compañeros morir en territorio español. "No, la gente no murió en España, murieron al otro lado de la puerta, pero cuando llegaban a territorio español les pegaban y les retornaban a Marruecos. No querían que murieran en España, les pegaban y les devolvían", repite.

“No querían que murieran en España, les pegaban y les devolvían“

Fue uno de los 133 jóvenes que ese día consiguieron entrar en España. Stephen llegó al CETI ileso, no tuvo que recibir asistencia médica. Ninguno de los inmigrantes que entraron ese día en Melilla continúa en la ciudad autónoma. Stephen ha pedido asilo y es muy probable que se lo concedan. España resuelve favorablemente mas del 90% de las solicitudes de los sudaneses. Su sueño es viajar a algún país de habla inglesa para trabajar y vivir de forma digna.