La reforma de la sedición en el Código Penal aumenta la tensión entre el Gobierno y la oposición
- Patxi López califica al PP de "reaccionario" y dice que es "la gasolina para la vida política en Cataluña"
- Cuca Gamarra advierte de que ninguna democracia europea "hace una ley a medida de los propios delincuentes"
La reforma del Código Penal para suprimir el delito de sedición, cuyo proyecto fue registrado el viernes en el Congreso por PSOE y Unidas Podemos, ha abierto una brecha aún mayor entre el Gobierno y la oposición. Así, mientras los socialistas califican de "reaccionario" al PP y de ser "gasolina para la vida política en Cataluña", los populares afirman que ninguna democracia europea "hace una ley a la medida de los propios delincuentes".
Los socialistas han vuelto a defender la iniciativa este sábado durante un acto en la sede del PSC en Barcelona, donde el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, ha afirmado que la sustitución de la sedición por "desórdenes públicos agravados" es una medida "valiente y muy de sentido común" y que ayuda a romper el "victimismo" del independentismo.
Para Patxi López, "el PP ha sido y es la gasolina para la vida política en Cataluña, y los socialistas somos el extintor en todo lo que ha pasado" y ha afirmado que no tienen "sentido de Estado, ni visión de país, ni cultura democrática".
El portavoz socialista ha asegurado que la reforma tiene como objetivo "ayudar a la justicia", puesto que en 2017 los juristas mantuvieron "un debate enorme" porque "no tenían claro ni qué delito ni qué penas" debían aplicarse: "Bueno, pues ahora lo aclaramos con esta reforma".
A esta cuestión también se ha referido el primer secretario del PSC, Salvador Illa, quien ha recordado a los independentistas que su formación "ha contribuido a que algunos no estén hoy en la cárcel" tras los hechos del 1-O, y ha destacado que no obstante hay muchos líderes "instalados en el resentimiento".
Y al PP le ha recordado que con la reforma de la sedición "no se despenalizan conductas que se dieron en 2017 ni se desprotege a España", puesto que la rebelión sigue vigente, se penalizan los desórdenes públicos graves y se mantiene el artículo 155 de la Constitución.
PP: "Ninguna democracia premia a quien la ataca"
Por su parte, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha afirmado en un acto en Medrano (La Rioja) que "en ninguna democracia europea se premia a quien la ataca y se hace una ley a la medida de los propios delincuentes" ni se somete "el derecho penal a las necesidades del presidente del Gobierno".
Gamarra, que ha criticado que el Gobierno ponga "precio a las reglas de convivencia", ha asegurado que "no podemos esperar nada del sanchismo para afrontar los retos que tenemos por delante porque Pedro Sánchez no gobierna para los españoles, sino para sí mismo y solo está volcado en asegurarse el poder, al precio que sea".
En esa dinámica, ha dicho, "lo más reciente, duro y lamentable tiene que ver con el delito de sedición, donde se constata una grandísima mentira". "Porque Sánchez, al pedir el voto, dijo que traería a Puigdemont -expresidente de la Generalitat de Cataluña- y lo pondría ante la Justicia y que agravaría las penas por sedición y ha propuesto lo contrario", ha afirmado.
La reforma propuesta para el delito de sedición, ha asegurado, "se ha redactado en la sede de ERC", partido en el que su líder, Oriol Junqueras, "está feliz y habla de éxito" porque "se pone alfombra roja a la impunidad".
Mientras, la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, le ha pedido al PP que presente una moción de censura contra el Gobierno para evitar que apruebe la reforma. "Pedro Sánchez, en una demostración más de qué es la persona con menos escrúpulos de este país, va a eliminar el delito de sedición para contentar a sus socios; los indulta y ahora les pones un Código Penal fetén para la próxima vez que quieran dar un golpe de Estado que encima ni los molesten", ha dicho.
Junqueras cree que la reforma es "un gran éxito"
El líder de ERC, Oriol Junqueras, por su parte, ha considerado como un "gran éxito" la reforma del Código Penal y la disminución de las penas por el delito de desórdenes públicos ya que con esto, "los aparatos antidemocráticos del Estado tendrán menos instrumentos" para desempeñar su labor.
Junqueras se ha mostrado convencido de que "será más fácil que las tesis republicanas democráticas e independentistas ganen espacio" y ha desvinculado el acuerdo alcanzado sobre la reforma de las negociaciones de los Presupuestos del Estado. En este sentido, ha indicado que lo que ocurra con estos últimos "ya se verá" porque primero "hay que ver exactamente cuándo se aprueba esta eliminación de la sedición".
La reforma propuesta por el Gobierno no ha sido bien recibida en todos los sectores del independentismo. Así, la Asamblea Nacional Catalana (ANC) ha convocado para el próximo 6 de diciembre, día de la Constitución, una manifestación en Barcelona para mostrar su rechazo.
Según ha manifestado la entidad independentista a través de un comunicado, la reforma legal tiene "un doble objetivo no disimulado como es castigar la movilización independentista en las calles y penalizar más cómodamente hechos como los del 1-O por ocupar instalaciones o edificios".