Hallado en Navarra "el texto más antiguo en lengua vasconia" inscrito en una mano de bronce del siglo I a.C.
- Se ha podido identificar la palabra "sorioneku" (de buena fortuna) que confirmaría el uso de la escritura en esa época
- Utilizaban para ello una variante específica del signario íbero conocida como “signario vascónico”
Una excavación llevada a cabo en un poblado de la Edad del Hierro ubicado en el monte de Irulegi, en el valle de Aranguren (Navarra), ha permitido localizar, según un equipo de investigadores, "la inscripción en lengua vascónica más antigua que se conoce hasta la fecha": una mano de bronce con un texto del que se ha podido identificar una palabra, "sorioneku", parecido al vocablo en euskera zorioneko (de buena fortuna, de buen agüero).
Su antigüedad, primer tercio del siglo I a.C., la convierte en un hallazgo "excepcional", ya que se trata del documento más antiguo y también el más extenso escrito en lengua vascónica que se conoce hasta la fecha. El resto de la inscripción no ha podido ser descifrada hasta el momento.
La “mano de Irulegi” fue hallada el 18 de junio de 2021, junto a la entrada de una de las viviendas excavadas en el yacimiento. Pero la inscripción no fue descubierta hasta el pasado 18 de enero de 2022, cuando se iniciaron las labores de limpieza y restauración de la pieza. La excavación ha sido realizada por la Sociedad de Ciencias Aranzadi. Durante la presentación, han explicado el hallazgo los arqueólogos Mattin Aiestaran, director de la excavación de Irulegi; y Berta Balduz, restauradora del Gobierno de Navarra, en un acto que ha contado con la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite.
La pieza en cuestión es una lámina de bronce. La lámina es lisa en el lado de la palma, pero en el lado del dorso presenta la forma de las uñas, aunque no se han conservado, debido a su fragilidad, las correspondientes a los dedos anular, corazón e índice. En el centro del extremo cercano a la muñeca presenta una perforación y el lugar en el que se encontró, su morfología y decoración, así como la inscripción confirman que se trata de un objeto ritual que se colgaba en la puerta de entrada de la vivienda, con el fin de que protegiera el hogar.
Certificaría el empleo de la lengua vasconia hace más de 2.000 años
La importancia lingüística de este hallazgo ha sido abordada por Joaquín Gorrochategui, experto en paleolingüistica y catedrático de Lingüística Indoeuropea en la Universidad del País Vasco, y por Javier Velaza, experto en epigrafía y catedrático de Filología Latina en la Universidad de Barcelona. Junto a otros hallazgos, viene a confirmar el uso de la escritura por parte de los antiguos pobladores de esta zona. Estos utilizaban para ello una variante específica del signario íbero conocida como “signario vascónico”.
Además, han señalado que la “mano de Irulegi” introduce novedades significativas en el mundo arqueológico y lingüístico. Por un lado, confirma la existencia de un sistema gráfico específico, derivado del signario Ibérico, llamado “signario vascónico”. Además, certifica el empleo de la lengua vascónica en el área geográfica en el que ha sido descubierta a inicios del siglo I a.C.; es decir, hace más de 2.000 años.