Enlaces accesibilidad
Paleontología

Descubren una nueva especie de dinosaurio enano herbívoro en Rumanía

  • Lo han denominado Transylvanosaurus platycephalus,  significa literalmente "reptil de cabeza plana de Transilvania"
  • Medía aproximadamente dos metros de largo, caminaba sobre dos patas y pertenecía a la familia de los Rhabdodontidae

Por
Ilustración de Peter Nickolaus que muestra lo que podría ser el Transylvanosaurus.
Ilustración de Peter Nickolaus que muestra lo que podría ser el Transylvanosaurus.

Un equipo internacional de investigadores ha descubierto una nueva especie de dinosaurio enano en la actual Transilvania, Rumanía. Lo han denominado Transylvanosaurus platycephalus, significa literalmente "reptil de cabeza plana de Transilvania", y habría vivido en el período Cretácico, hace más de 70 millones de años.

Este dinosaurio previamente desconocido medía aproximadamente dos metros de largo, caminaba sobre dos patas y pertenecía a la familia de los Rhabdodontidae. En Transilvania, al igual que otros dinosaurios locales, solo alcanzaron un tamaño corporal pequeño y, por lo tanto, se les conoce como 'dinosaurios enanos'.

Según han explicado sus descubridores, el Transylvanosaurus platycephalus habitó en la Isla de Hateg, situada en el desaparecido Mar de Tetis, dentro de las coordenadas de lo que es hoy es la región rumana de Hateg, donde los científicos encontraron en 2007 los huesos de un ejemplar de la especie. La cuenca de Hateg es uno de los lugares más importantes para los descubrimientos de vertebrados del Cretácico superior en Europa, donde ya se han identificado allí un total de diez especies de dinosaurios.

Los huesos craneales de Transylvanosaurus, que pudieron sobrevivir durante decenas de millones de años porque estaban protegidos por los sedimentos de un antiguo lecho de río, hasta que otro río los liberó nuevamente, ofrecen una visión más profunda de la evolución de las faunas europeas poco antes de la extinción de los dinosaurios hace 66 millones de años.

"Presumiblemente, un suministro limitado de recursos en estas partes de Europa en ese momento condujo a un tamaño corporal pequeño adaptado", explica el paleontólogo de la Universidad de Tubinga, Felix Augustin, líder del hallazgo, que ha sido presentado en 'Journal of Vertebrate Paleontology'.

Conviviendo con reptiles

Durante la mayor parte del período Cretácico, que duró desde hace 145 millones de años hasta hace 66 millones de años, Europa fue un archipiélago tropical. El Transylvanosaurus vivía en una de las muchas islas junto con otros dinosaurios enanos, cocodrilos, tortugas y pterosaurios voladores gigantes que tenían una envergadura de hasta diez metros. "Con cada especie recién descubierta estamos refutando la suposición generalizada de que la fauna del Cretácico superior tenía una baja diversidad en Europa", dice Augustin.

Durante el Cretácico Superior, los Rhabdodontidae fueron el grupo más común de pequeños y medianos herbívoros europeos. Especies relacionadas encontradas previamente en la misma área tenían cráneos mucho más estrechos que el Transylvanosaurus. Por otro lado, sus parientes más cercanos vivían en lo que hoy es Francia, lo que fue una gran sorpresa para los científicos.

¿Cómo llegó Transylvanosaurus a la "Isla de los dinosaurios enanos" en lo que ahora es Transilvania? En la investigación se reconstruyen varias posibilidades. Los hallazgos más antiguos asignados a Rhabdodontidae provienen de Europa del Este; los animales podrían haberse extendido hacia el oeste desde allí y, más tarde, ciertas especies podrían haber regresado a Transilvania.

Las fluctuaciones en el nivel del mar y los procesos tectónicos crearon puentes terrestres temporales entre las muchas islas y podrían haber alentado a estos animales a expandirse, conjeturan los científicos.

Además, se puede suponer que casi todos los dinosaurios podían nadar hasta cierto punto, incluido el Transylvanosaurus. "Tenían patas poderosas y una cola poderosa. La mayoría de las especies, en particular los reptiles, pueden nadar desde el nacimiento", dice Augustin. Otra posibilidad es que varias líneas de especies de rabdodóntidos se hayan desarrollado en paralelo en Europa oriental y occidental.