Simpatizantes y opositores de Pedro Castillo se enfrentan ante su centro de detención

• Los defensores del expresidente han lanzado piedras, adoquines y otros objetos a los cuerpos policiales
• No se han reportado incidentes mayores en el resto del país

Protestas frente al centro de detención en el que se encuentra Pedro Castillo.

Un pequeño grupo de simpatizantes y detractores del expresidente peruano Pedro Castillo se han enfrentado este miércoles frente al centro donde está detenido en Lima el exmandatario, acusado de haber dado un golpe de Estado.

Los cuerpos de la Policía Nacional de Perú (PNP) han tenido que intervenir con gases lacrimógenos y arrestar a algunos de los manifestantes para poder liberar la céntrica avenida Alfonso Ugarte.

Con palos, banderas y otros objetos, un reducido grupo se ha enfrentado a golpes y empujones frente a la comisaría donde se encuentra detenido el expresidente, tras su intento de cierre y disolución del congreso peruano. Según ha confirmado la Fiscalía, Castillo está detenido por la presunta comisión del delito de rebelión y quebrantar el orden constitucional tras el anuncio de este de disolver el Congreso.

Partidarios de Castillo contra las autoridades

Los simpatizantes de Castillo han lanzado piedras, adoquines y otros objetos a los cuerpos policiales de la Policía Nacional de Perú (PNP) en el centro de la capital peruana en protesta por la detención del expresidente.

Los medios locales no han reportado incidentes mayores en el resto de ciudades del país, donde solo pequeños grupos han lamentado la detención del expresidente.

Un simpatizante de Pedro Castillo lanza una piedra a la Policía peruana. AFP/ERNESTO BENAVIDES

Protestas a la puerta del Congreso

Momentos más tarde del anuncio de Castillo de disolver el Congreso, defensores y detractores del expresidente se han manifestado a las puertas de la cámara.

Muchos de los ciudadanos se han adherido al Congreso y han mostrado su rechazo a Castillo. Con gritos de "no era un Presidente, era un delincuente", han celebrado la caída del expresidente.

Por otro lado, los simpatizantes de Castillo consideraban legítima la decisión de disolver el Congreso y lanzaban mensajes de apoyo al exmandatario.

Tras horas de protestas, las autoridades han conseguido desplazar a los manifestantes y despejar la avenida para poder restablecer el tráfico.

Castillo ha dictado este miércoles disolver temporalmente el Congreso e instaurar un Gobierno de emergencia nacional, horas antes de que el Parlamento debatiera una moción de censura en su contra que podría haberle apartado de la jefatura del Estado.

Tras la medida, tildada mayoritariamente como golpe de Estado y no respaldada ni tan siquiera por su gobierno, ha sido destituido y remplazado por la que era vicepresidenta, Dina Bolaurte, como nueva jefa de Estado