El presidente del CGPJ frena el intento de los conservadores de renovar el Constitucional antes de la reforma del Gobierno
- Los conservadores hicieron la solicitud tras los cambios legislativos para desbloquear el tribunal por parte del Gobierno
- Rafael Mozo alega que no han acompañado su solicitud con el nombre de al menos dos candidatos al TC
- En directo las reacciones a la decisión del Tribunal Constitucional
El presidente en funciones del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Rafael Mozo, no va a convocar por el momento el pleno extraordinario que solicitaron el pasado viernes nueve de los vocales del bloque conservador para votar a los dos candidatos del Tribunal Constitucional (TC) antes de que salga adelante la reforma legal propuesta por el Gobierno para desbloquear la situación.
Según la comunicación enviada por Mozo a los vocales, la petición no puede ser atendida por el momento en aplicación del artículo 35 del reglamento del CGPJ, que exige la aportación de todos los documentos relacionados con el orden del día del pleno. En este caso, se requiere los nombres de dos candidatos.
La petición de los conservadores llegó poco después de que los socios de Gobierno, PSOE y Unidas Podemos, registrasen dos enmiendas a la proposición de ley de reforma de la sedición en el Código Penal para desbloquear la situación del tribunal.
En concreto, la propuesta del Gobierno es pasar de una mayoría de tres quintos a una simple para que el CGPJ designe a los dos candidatos al TC que le corresponden y que, en caso de que el órgano de gobierno de los jueces siga incumpliendo, se puedan exigir a sus vocales responsabilidades.
De convocar el pleno extraordinario, supondría adelantar el calendario fijado, porque estaba previsto que en el pleno ordinario del 22 de diciembre se votara por primera vez los dos candidatos al TC. Así, podría permitir hacer los nombramientos antes de que la citada reforma quede aprobada y entre en vigor.
Las reglas del procedimiento señalan que la convocatoria del pleno tendrá lugar cuando lo acuerde el presidente por propia iniciativa o lo soliciten al menos cinco vocales. Esa solicitud de convocatoria del Pleno, sin embargo, deberá incluir los nombres de los magistrados propuestos.
Tras el comunicado de Mozo, los vocales conservadores incluirán el nombre de su candidato a magistrado del Constitucional en una nueva petición al presidente. Fuentes del bloque conservador han informado a EFE de que "es cierto que hay un defecto formal" porque de acuerdo a las reglas del procedimiento fijadas el pasado 8 de septiembre "había que aportar nombres y eso no se hizo" el pasado viernes.
Por ello, este miércoles se reunirán para consensuar la fórmula a elegir, si presentar un escrito de subsanación de error o bien realizar una nueva solicitud, en ambos casos ya con el nombre incluido.
Los conservadores ven las enmiendas como una "injerencia demoledora"
Según fuentes del CGPJ a Europa Press, el bloque conservador del órgano cree que la modificación se trata de una "injerencia demoledora", un "chantaje" y hasta una amenaza que tiene por objetivo no tanto garantizar que el Consejo nombre a sus dos aspirantes al TC como que se admita el nominado por el sector progresista: el magistrado del Tribunal Supremo José Manuel Bandrés, que no es del agrado de los conservadores porque ven en él un perfil próximo al Gobierno.
Desde el ala conservadora llaman la atención sobre el hecho de que la reforma contempla que, en lugar de que cada uno de los 18 vocales proponga y vote a dos candidatos, propongan y voten solo a uno, lo que –según explican– garantizará que los dos más votados sean los aspirantes elegidos por cada bloque.
Las negociaciones en el seno del CGPJ llegaron a punto muerto después de que los vocales progresistas ratificaran la candidatura de Bandrés y ofrecieran a los conservadores aceptar también sin objeciones al candidato que seleccionaran. Pero los conservadores rechazaron ese sistema insistiendo en que ambos aspirantes deben elegirse conjuntamente.
Por el momento, los conservadores siguen sin desvelar el nombre de su candidato de entre una lista de cinco magistrados, que apunta al presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo, César Tolosa, y al magistrado de la Sala de lo Penal, Pablo Llarena, como los favoritos en las quinielas de los conservadores.