Los socios Ulma y Orona deciden abandonar la Corporación Mondragón
- La compañía pierde a dos de las empresas más importantes de su división industrial, que representan el 13% del empleo
- La decisión podría suponer una caída en ventas del 15%
Los socios cooperativistas Ulma y Orona han decidido este viernes abandonar la Corporación Mondragón, una propuesta adoptada con cerca del 70% de los votos en la Asamblea Extraordinaria celebrada en su sede central de Hernani (Gipuzkoa).
Con estas decisiones, la corporación cooperativa vasca pierde a dos de las empresas más importantes de su división industrial, que representan el 13% del empleo y el 15% en ventas. Ambas compañías pretenden desde este momento establecer un nuevo tipo de relación.
En el caso de Orona, la decisión ha salido adelante con 1.089 votos a favor y 470 en contra, lo que supone un apoyo aproximado del 70%.
La cumbre del fabricante de ascensores se ha prolongado más de cuatro horas y ha finalizado con el recuento de votos, la proclamación de los resultados y un fuerte aplauso por parte de los asistentes.
El hermetismo ha vuelto a ser casi total entre los socios que han acudido a la asamblea, algunos de los cuales han reconocido que se ha vivido algún momento "tenso", pero "nada fuera de lo normal" y que se han defendido "todas las posturas".
En el caso de Ulma, la propuesta ha sido avalada por el 80,52% de los votos emitidos por parte de los socios de las nueve cooperativas que integran el grupo. En todas ellas ha ganado el sí.
Ulma confirma su "deseo de reemplazar su vigente relación" con Mondragón
Tras la votación, el Grupo Ulma ha informado en un comunicado, de que los 2.789 socios de sus nueve cooperativas -que operan en diferentes campos industriales- han confirmado su "deseo" de "reemplazar su vigente relación don Mondragón Corporación Cooperativa por un nuevo modelo".
El acuerdo aprobado por la asamblea implica "la baja de las cooperativas de Ulma en Mondragón", aunque también incluye un mandato a la dirección del Grupo Ulma para que "trate de promover colaboraciones futuras con Mondragón para el desarrollo del movimiento cooperativo e impulse el desarrollo normativo necesario para que las aportaciones hasta ahora realizadas a los fondos gestionados por la fundación Mondragón se puedan seguir destinando al desarrollo del movimiento cooperativo".
La propuesta de Ulma, que también compartía Orona, consistía en establecer una nueva figura, la de la "cooperativa convenida", que le permitiese mantener relación con la Corporación Mondragón, pero sin pertenecer a ella, un planteamiento que no fue avalado por el último congreso de Mondragón.
El presidente del Grupo Ulma, Lander Díaz de Gereñu, ha aclarado que son los socios los que "determinan con su voto el camino que sigue la cooperativa". "Hoy, los órganos de las cooperativas de Ulma hemos recibido un mandato claro. Somos parte del modelo de éxito que representa el modelo cooperativo vasco. Y vamos a defender y apoyar siempre sus valores", ha afirmado Díaz de Gereñu.