La Justicia polaca rechaza de nuevo dejar en libertad al periodista español Pablo González
- El tribunal mantiene la prórroga de la prisión preventiva por tres meses hasta el 23 de febrero de 2023
- González permanece detenido en Polonia desde finales de febrero de 2022, acusado de espiar para Rusia.
El tribunal de apelaciones de la localidad polaca de Rzeszów ha rechazado este martes la apelación contra la prórroga a la prisión dictada contra el periodista español Pablo González, que permanece detenido en Polonia desde finales de febrero de 2022, acusado de espiar para Rusia.
"El tribunal estaba considerando las denuncias presentadas por dos de los tres abogados que representan a Pablo González ante la justicia polaca y ha confirmado la decisión sobre la prórroga de la prisión preventiva por tres meses hasta el 23 de febrero de 2023", ha explicado a EFE el juez Zygmunt Dudziski, portavoz del Tribunal de Apelación de Rzeszów.
La apelación fue presentada por la defensa de González después de que el pasado 24 de noviembre el tribunal regional de Przemyl decidiera prorrogar por tercera vez la detención del periodista.
En prisión sin juicio desde el comienzo de la guerra en Ucrania
González está en prisión sin haber sido sometido a juicio desde su detención el pasado 28 de febrero, cuatro días después del comienzo de la guerra en Ucrania, en Przemyśl por los Servicios de Seguridad Interior (ABW por sus siglas en polaco), el servicio polaco de contraespionaje.
Los ABW acusaron a González de usar su estatuto como periodista para viajar libremente por Europa y el mundo, incluidas áreas en conflicto militar, con el fin de desempeñar actividades para el servicio ruso de inteligencia militar (GRU).
Según el código penal polaco, trabajar para los servicios secretos de otro país puede estar penado hasta con diez años de prisión.
En Przemyśl, González cubría la crisis de refugiados junto a la frontera polaco-ucraniana.
Según la pareja de González, Oihana Goiriena, la detención del periodista se produjo por tener doble nacionalidad, ya que además del pasaporte español tiene uno ruso.
Pablo González nació en Moscú y es nieto de uno de los conocidos como "niños de la guerra", evacuados a la Unión Soviética durante la Guerra Civil española (1936-1939). Por eso, González recibió tras nacer el nombre de Pavel Rubtsov, aunque su madre se lo cambió por el actual cuando se trasladaron al País Vasco tras divorciarse del padre.
Hasta el pasado noviembre, González solo recibió una breve visita de su pareja y el periodista fue mantenido bajo estrictas normas que restringieron sus comunicaciones a cartas dirigidas a su familia.
El caso de González mereció la atención de numerosas instituciones internacionales y en noviembre pasado Antoine Bernard, responsable de la sección internacional de Reporteros Sin Fronteras (RSF) pidió a la Justicia polaca y al fiscal general, Zbigniew Ziobro, que no solicitaran más prórrogas de la prisión del periodista.