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Aborto

Gobierno y PSOE califican las medidas antiabortistas en Castilla y León de "hostigamiento" a las mujeres

  • La Comisión Ejecutiva Federal muestra su "frontal oposición" a las medidas anunciadas por la Junta para prevenir abortos
  • Montero anuncia que iniciarán acciones legales para evitar la coacción a las mujeres que quieran abortar

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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (i), la ministra de Hacienda, María Jesús Montero (c), y el secretario Organización del PSOE Santos Cerdán León (d) durante la foto de familia de la reunión especial de la Ejecutiva Federal del PSOE.
Pedro Sánchez preside la reunión especial de la Ejecutiva Federal del PSOE.

Los ministros socialistas del Gobierno, el PSOE y la formación socialista en Castilla y León han mostrado este viernes su "frontal" oposición al "hostigamiento" y su condena a la "limitación de los derechos" de las mujeres en Castilla y León tras las medidas antiabortistas anunciadas por el gobierno de la comunidad liderado por PP y Vox.

La Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, encabezada por Pedro Sánchez, y a la que acuden todos los ministros socialistas, ha aprobado una declaración conjunta con el PSOE de Castilla y León en la que advierten de que las medidas anunciadas el jueves por la Junta "destinadas a restringir" la interrupción voluntaria del embarazo "pueden suponer la institucionalización en la sanidad pública de medias que coaccionarían y limitarían la libertad de las mujeres en el ejercicio de sus derechos".

Entre las medidas anunciadas para prevenir abortos por el vicepresidente, Juan García-Gallardo (Vox), para aquellas mujeres que lo soliticen, están la escucha del latido fetal, ofrecer una ecografía 4D y proteger la objeción de conciencia para los profesionales sanitarios.

También la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha anunciado este viernes que va a poner en marcha un teléfono de información a la mujer embarazada.

"Terrible retroceso de derechos" para las mujeres

En el comunicado conjunto, el PSOE asegura que la puesta en marcha de estas estrategias supondría "un terrible retroceso para los derechos de las mujeres y también en términos de calidad democrática y libertades para toda España", así como un aumento de la "inseguridad para los profesionales sanitarios".

Además, los socialistas consideran que son un "afrenta jurídica", ya que estos plateamientos contravienen los postulados de la Ley de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo, conocida como 'ley del aborto'.

El PSOE ha recordado que grupos de ultraderecha "acudían a las inmediaciones de los centros, donde, además de rezos e insultos, ofrecían escuchar el latido del corazón del bebé con equipamiento médico disponible en furgonetas, además de entregar panfletos con fotos de bebés, fetos y recursos de organizaciones ultracatólicas".

"Es fácilmente observable que las medidas antiabortistas anunciadas por la Junta de Castilla y León tienen como objetivo introducir dentro del sistema de sanitario público el control y el hostigamiento que antes se producía en los alrededores de los centros sanitarios", han señalado desde la Ejecutiva del PSOE, desde donde se consideran estas medidas como estrategias de "la ultraderecha más reaccionaria en el sistema de salud de Castilla y León"."El PSOE va a combatir la respuesta reaccionaria impulsada por el PP y Vox" con esta reforma que "devolverá el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo a las mujeres de 16 y 17 años que fue eliminado por el gobierno del Partido Popular en 2015" y eliminará el periodo de reflexión de tres días.

La declaración socialista advierte de que "el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo en Castilla y León ya se encuentra muy limitado y, con este nuevo paso atrás, llevaría a las mujeres castellanas y leonesas a épocas muy oscuras".

Montero anuncia acciones legales

Tras la celebración del comité, la vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha anunciado que su partido ejercerá las "acciones legales oportunas" cuando consideren que, con estas medidas, se vulneren los derechos de las mujeres o que su derecho a interrumpir el embarazo se vea "alterado, coaccionado u hostigado por alguna administración o persona".

Montero ha señalado que los anuncios de los gobiernos de Castilla y León y Madrid suponen "un ataque a la libertad de las mujeres" y ha indicado que "una vez más, el PP se abona a las tesis más reaccionarias" porque suponen "una auténtica falta de respeto a la mujer".

La dirigente socialista ha considerado "inasumible" que se ponga en cuestión este tipo de decisiones y ha señalado que estas prácticas supondrían "un retroceso que no tiene precedentes".

Antes de su participación en el comité, la ministra de Educación y portavoz del PSOE, Pilar Alegría, ha advertido que las medias anunciadas por el Gobierno de Alfonso Fernández Mañueco son "absolutamente vergonzosas y bochornosas, porque atentan claramente hacia la igualdad de derechos y sobre todo a la igualdad de la mujer".

En la misma línea, la ministra de Justicia, Pilar Llop, ha señalado a su llegada a Ferraz que aún tiene que ver en detalle en qué consisten las medidas anunciadas pero ha subrayado que el Gobierno Central está a favor de los derechos reproductivos de la mujer porque conllevan "libertad y emancipación".

"Estamos muy preocupados. Es una situación muy desagradable y contraviene la ley del aborto", ha señalado también la secretaria de Igualdad del PSOE, Andrea Fernández, al tiempo que la ministra de Economía, Nadia Calviño, ha lamentado en una entrevista en RNE que Vox quiera "amedrantar" a las mujeres y "retrotraernos a los tiempos más negros de nuestra historia".